"Ve y pon un centinela" Harper Lee
la autora presenta el libro, al editor le gustan sobre todo los pasajes donde la protagonista rememora su niñez y le pide que escriba otra novela centrándose en esa etapa, y así es como surge "Matar un ruiseñor". No se sabe por qué la novela original desaparece, ni se sabe por qué, ni en qué circunstancias aparece ahora, al menos yo no lo sé. Todo lo que he leído es una vaga alusión a que Tonja Carter, la abogada de la autora, encontró la obra.
Harper Lee publicó "Matar un ruiseñor" en 1960, obtuvo el premio Pulitzer en 1962 y nunca volvió a escribir un libro.
"Ve y pon un centinela", la supuesta novela original de la que partió todo, ha batido todos los records en Estados Unidos. Ha vendido más de un millón de ejemplares en su primera semana; es la novela más vendida en su primer día, superando a Dan Brown; ha desbancado en Amazon a "Harry Potter y las reliquias de la muerte" que estaba imbatida y ha arrasado con el insuperable "Grey", que viene detrás de todas sus sombras, como novela más vendida en un día. Y una se pregunta y reflexiona "¿No es mucha casualidad? Menuda mina ha encontrado la editorial. ¿Será todo un montaje?" Dejémoslo aquí de momento; dejémoslo durante unos párrafos.
Harper Lee |
Primero: me ha sorprendido porque tras leer "Matar un ruiseñor", en donde pasan tantas cosas; donde se ponen en juego tantos sentimientos, y emociones; una novela que arranca con una fuerza que te arrastra hasta el final (acabo de empezar a leerla, de nuevo), aquí casi no ocurre nada hasta bien avanzado el libro.
Había leído cerca de noventa páginas cuando estuve a punto de dejarlo. Efectivamente, no pasaba nada, más allá del tonteo insustancial de Jean Louise (más conocida como Scout) con un personaje desconocido, que no aparece en "Matar un ruiseñor": Henry Clinton, al parecer presente durante la infancia y adolescencia de Scout, protegido de Atticus y que jamás oímos mencionar. Pues a lo que íbamos: sus diálogos forzados, sosos y repletos de "cariños" hasta dar grima, me estaban cansando, aburriendo y haciéndome desear botarlo y coger su precuela-secuela y desquitarme de tanta imbecilidad.
Pero perseveré y obtuve una recompensa. No muy grande, es cierto, pero me sirvió para terminar el libro. Un día Jean Louise descubre que sus personas más queridas no son como ella imaginaba, no son lo que siempre le habían hecho creer que eran. Su decepción es enorme y busca explicaciones a algo que no puede entender, ni casi creer a pesar de haberlo visto y oído. Su mundo se viene abajo y es que empieza a sentir que todo aquello que le han enseñado desde pequeña, todo lo que ha creído y en lo que ha basado sus planteamientos éticos y morales se sustenta sobre un falso andamiaje, se desploma como un falso castillo construido con falsos naipes de humo.
A partir de ese momento, en la novela, comienzan a sucederse una serie de conversaciones sumamente interesantes sobre la libertad y el papel que el Estado debe jugar en ella. Una serie de comentarios que son la esencia de la mentalidad americana que se enfrenta a sus propias contradicciones ¿Puede la Corte Suprema emitir una sentencia que reivindica las libertades de una minoría subyugada (anular la segregación racial en los autobuses de Alabama), si para ello debe contradecir la Décima Enmienda de la Constitución que garantiza la capacidad de decisión del pueblo y de los Estados? Scout está indignada con la sentencia "Lo único que se interpone entre nosotros y algún listillo que quiera poner en marcha algo es la Constitución, y la Corte Suprema va y anula alegremente toda una enmienda", pero a la vez se siente satisfecha con su resultado porque "por muy mal que lo haya hecho la Corte Suprema, por algún sitio había que empezar [...] no me gusta cómo lo han hecho, me asusta muchísimo pensar cómo lo han hecho, pero tenían que hacerlo"
También resultan interesantes las reflexiones acerca de la necesidad de que el Gobierno intervenga lo menos posible en la Economía para preservar las libertades individuales. El Gobierno debe olvidarse de paternalismos e intervenciones limitándose a "impedir el delito y preservar los contratos".
Una escena de la película "Matar un ruiseñor"con Gregory Peck (Atticus) y Mary Badham (Scout) |
No quiero profundizar en el análisis por no desvelar detalles de la trama que otros lectores preferirán descubrir por sí solos. Lo único que encuentro coincidente con que este libro haya sido el primero, es su inferior calidad, sus diálogos poco ágiles, sus personajes indefinidos y con reacciones infantiles (Scout parece que sigue teniendo seis años y nos los veintiséis que se le adjudican), y desmesuradas (la bofetada que le da el tío Jack, con sangre incluida, es un despropósito estridente y que no viene a cuento).
Las interesantes ideas que apunta (y lo son) están incrustadas de manera forzada en una historia que carece de cuerpo y entidad, que no resulta creíble ni verosímil y, si nunca podrá velar el brillo deslumbrante con que nos iluminó "Matar un ruiseñor", tampoco puede erigirse ni en su predecesora, ni en su secuela. Realmente, nada tiene que ver con ella y es mejor, sencillamente, que olvidemos su desacertada existencia.
Hola. coincido contigo en que esta novela no tiene nada que ver con la original y conocida... seguimos en contacto
ResponderEliminarSí, es tal la diferencia de calidad entre ambas, que dudo que hayan sido escritas por la misma persona. En fin, si hay algo raro, espero que nos enteremos.
EliminarUn abrazo.
Gracias, Rosa. Después de lo que comentamos en el blog de Manuel, tenía verdadero interés en saber qué opinabas de esta novela. Te haré caso, olvidaré su desafortunada existencia y seguiré añorando a los personajes de "Matar un ruiseñor". En especial, claro, a Scout, de quien todos estamos irremediablemente enamorados.
ResponderEliminarEs una novela totalmente olvidable. No me arrepiento de haberla leído porque tenía mucha curiosidad y ha quedado totalmente satisfecha como me esperaba, por otra parte. Estas secuelas, que encima nos las venden como precuelas, nunca traen nada bueno. Como ya le dije a Marta más arriba espero que lleguemos a enterarnos de lo que hay detrás de todo esto porque algo raro tiene que haber.
EliminarUn beso.
¡Hola guapa! ¿Qué tal? :)
ResponderEliminarMe ha parecido muy interesante tu post. Hace poco me enteré de la existencia de este libro, puesto que Matar a un ruiseñor me pareció increíble, estaba buscando el libro para comprarlo. Pero ahora mismo después de leer esta magnífica reseña, creo que no perderé mi tiempo con él.
Según lo que cuentas, esto me huele a chamusquina, tiene que ser un montaje seguro. Debido a su éxito en su momento ha aprovechado su nombre y su grandísima obra y es algo que me decepciona.
En fin, espero que algún día nos enteremos si realmente lo es.
¡Mil gracias por compartirlo preciosa!
¡Besotes!
Yo no la recomiendo, pero hay gente que prefiere comprobarlo por sí misma. Si prefieres fiarte de los demás, mi opinión es que te compres otro libro de los muchos que hay mucho mejores. Este es totalmente prescindible.
ResponderEliminarUn beso.
He visto opiniones para todos los gustos, aunque ninguna entusiasta ha sido positiva
ResponderEliminarPor mi parte creo firmemente en lo conocido y eso hace que me escame este título lo suficiente como para no tener ninguna prosa
Besos
Creo que a nadie con un mínimo gusto literario le puede entusiasmar el libro. Con tanto como hay para leer, solo la curiosidad me llevó a tenerlo en cuenta. Ahora ya sé lo que es. Por otra parte, me lo imaginaba.
EliminarUn abrazo.
Huy, huy, huy, qué mal huele esta primera novela (¿primera?) Será que soy muy mal pensada pero me hace sospechar. Yo también había leído muy buenas críticas de ella y pensaba leerla y volver a leer seguidamente 'Matar a un ruiseñor'
ResponderEliminarGracias por la reseña porque me evitas la molestia.
Un beso
Yo también soy malpensada y desde el principio sospeché, pero tenía una leve esperanza de estar equivocada. A veces, me fastidia mucho acertar.
EliminarUn beso.
Por cierto, como habrás visto en el blog, estoy leyendo "Matar un ruiseñor" y la diferencia es altamente sospechosa.
Eliminar¡¡¡Hola!!! Te he hecho caso y me he pasado. ¡Menudo chasco! He leído mil veces Matar un ruiseñor, y el sábado vi con mi madre la peli, la he visto muchas veces, pero muchas, más de cien, y me da miedo que esta lectura me las empañe.
ResponderEliminarBesos y gracias por la reseña.
Me alegro si te he servido de ayuda. No obstante, quiero recordar de nuevo que es solo mi opinión y bien podría ser que tú tuvieras otra. Pero siempre hay que informarse y después decidir.
EliminarA mí me ha dejado una sensación desagradable, como si me hubieran engañado con los personajes. Tú verás.
Un beso.