"El otro nombre de Laura" Benjamin Bkack
A estas alturas ya todo el mundo sabe que Benjamin Black es el seudónimo con el que firma sus novelas policíacas el autor irlandés John Banville. Y entre sus novelas policíacas, las más famosas son las de la serie protagonizada por Quirke, forense en el Hospital de la Sagrada Familia de Dublín allá por los años 50 del siglo XX.
Quirke tiene un turbio pasado: educado en un orfanato gestionado por frailes; rescatado de allí por el Juez Griffin que lo lleva a vivir con su familia y lo introduce en ella como uno más. Viendo como su hermanastro se casaba con Shara, la mujer de la que él estaba enamorado, se casa a su vez con la hermana de ésta, Delia, que muere de parto. Quirke, viudo desde muy joven, habiendo perdido en un sólo acto mujer e hija, queda solo y se entrega a la bebida.
En la primera novela de la serie, "El secreto de Christine" se investigan unos turbios sucesos relacionados con el tráfico de niños. Estos sucesos acaban salpicando directamente a Quirke y a sus familiares más cercanos: el juez Griffin, su hijo y hermanastro de Quirke, Malachy, e incluso a la familia de Sara, la mujer de Malachy, allá en Boston. Es en esta primera novela donde se nos cuentan varios de los acontecimientos de la biografía de Quirke, y se desvela un secreto que afecta a las vidas de todos.
En el segundo libro de la serie, este que nos ocupa, con las biografías de los protagonistas ya explicadas y claras, se centra más en la investigación de un caso que se le presenta a Quirke de manos de un antiguo compañero de la Universidad cuya mujer se ha suicidado aparentemente. Se va contando, a la vez que la investigación del caso, la vida de Laura Swan o Deirdre Hunt, nombres ambos a los que respondía la víctima, cada uno con un significado vital diferente.
Deirdre o Laura consigue escapar de una vida sórdida y miserable en Los Bloques y entra a trabajar en un establecimiento de perfumería y farmacia en Dublín. Allí conocerá a su marido Billy Hunt y al Dr. Kreutz y a Leslie White, y, poco a poco, entre todos, irán sentando los previos que acabarán con ella en la camilla de la morgue donde Quirke, a pesar de lo que le ha pedido el marido, se dispone a hacerle la autopsia. Lo que descubrirá le llevará a buscar la ayuda del inspector Hackett de la Garda (como comunmente se conoce a la policía de la República Irlandesa, Garda Síochána, literalmente Guardianes de la Paz), que ya le había ayudado en su anterior caso.
Se nos presenta, en esta ocasión, un nuevo Quirke. Ha dejado de beber y ha recuparado a su hija que creía perdida. Ambas cosas han dado otra seguridad a su vida, pero todo parece venirse abajo entre los entresijos y las truculencias de una historia sórdida como sus protagonistas y gris como la ciudad en la que se desarrolla.
No es de las series policíacas más amables de leer, pero su dureza ensambla con una situación que presumimos muy real. Seguiremos las peripecias de Quirke.
Quirke tiene un turbio pasado: educado en un orfanato gestionado por frailes; rescatado de allí por el Juez Griffin que lo lleva a vivir con su familia y lo introduce en ella como uno más. Viendo como su hermanastro se casaba con Shara, la mujer de la que él estaba enamorado, se casa a su vez con la hermana de ésta, Delia, que muere de parto. Quirke, viudo desde muy joven, habiendo perdido en un sólo acto mujer e hija, queda solo y se entrega a la bebida.
En la primera novela de la serie, "El secreto de Christine" se investigan unos turbios sucesos relacionados con el tráfico de niños. Estos sucesos acaban salpicando directamente a Quirke y a sus familiares más cercanos: el juez Griffin, su hijo y hermanastro de Quirke, Malachy, e incluso a la familia de Sara, la mujer de Malachy, allá en Boston. Es en esta primera novela donde se nos cuentan varios de los acontecimientos de la biografía de Quirke, y se desvela un secreto que afecta a las vidas de todos.
En el segundo libro de la serie, este que nos ocupa, con las biografías de los protagonistas ya explicadas y claras, se centra más en la investigación de un caso que se le presenta a Quirke de manos de un antiguo compañero de la Universidad cuya mujer se ha suicidado aparentemente. Se va contando, a la vez que la investigación del caso, la vida de Laura Swan o Deirdre Hunt, nombres ambos a los que respondía la víctima, cada uno con un significado vital diferente.
Deirdre o Laura consigue escapar de una vida sórdida y miserable en Los Bloques y entra a trabajar en un establecimiento de perfumería y farmacia en Dublín. Allí conocerá a su marido Billy Hunt y al Dr. Kreutz y a Leslie White, y, poco a poco, entre todos, irán sentando los previos que acabarán con ella en la camilla de la morgue donde Quirke, a pesar de lo que le ha pedido el marido, se dispone a hacerle la autopsia. Lo que descubrirá le llevará a buscar la ayuda del inspector Hackett de la Garda (como comunmente se conoce a la policía de la República Irlandesa, Garda Síochána, literalmente Guardianes de la Paz), que ya le había ayudado en su anterior caso.
Benjamin Black |
No es de las series policíacas más amables de leer, pero su dureza ensambla con una situación que presumimos muy real. Seguiremos las peripecias de Quirke.
Hola!!! no conocia este libro ni su autor, pero me ha llamado mucho la atencion la novela, asi que me la apunto. Aunque empezare con la primera de la saga
ResponderEliminarPor cierto, acabo de descubrirte y ya te sigo. Y te invito a visitar mi blog
Un abrazo
Gracias. Yo también te sigo. Interesante tu blog con alguna iniciativa a la que igual me sumo.
EliminarUn saludo.
Así que el protagonista se llama Quirke, pues voy a tener que leer la novela aunque sólo sea por afinidad onomástica. Bueno, tu reseña también ha contribuido a que me anime.
ResponderEliminarUn beso
No había caído. Lo que hace verlo con K o con Q. Si te animas, empieza por la primera "El secreto de Christine" Un beso.
ResponderEliminarMe gustan mucho estos temas para una novela, pero no me gustan las series. En verdad me parecen innecesarias ya que con un solo libro bien escrito, me conformo. Leì la novela El Jurado de John Grishnan y puedo decir que el suspenso es genial, invita a leer libro en el menor tiempo posible.
ResponderEliminarPues, aunque me gustan más los libros, por supuesto, soy amante incondicional de las buenas series americanas. Y entre ellas, la mejor, si de detectives se trata, "True detective". Tiene más profundidad en sus diálogos que muchos libros.
EliminarGracias por pasarte y por colaborar Arethusa.
Un arazo.
True Detective, una serie muy buena, sí señora. No es una serie policíaca corriente. Siempre es mejor un buen libro (o saga) pero, a veces, en la pantalla también se hacen buenas historias. Además las interpretaciones de Matthew McConaughey y Woody Harrelson son excelentes.(Creo que va a haber una segunda temporada pero con otros actores)
EliminarUn beso a las dos.
Verdad que es genial? Los diálogos son espectaculares y la interpretación, sobre todo de Matthew McConaughey, digno de varios Oscar. Woody Harrelson también está muy bien pero Matthew McConaughey es mi actor fetiche.
EliminarPues yo no sabía de este autor ni de su pseudónimo, así que gracias Rosa, aunque sí he caído en seguida que el protagonista se llama como una amiga nuestra, con la sútil diferencia de una letra ;-)
ResponderEliminarCreo que será interesante y aunque lo apunte, te digo que me voy a poner ya mismo con el que me regaló otra amiga que tiene la pinta de ser más, digamos, distendido.
¡Besos!
Es curioso porque es tan conocido y famoso como John Banville y como Benjamin Black. A mí me gusta más como autor de novela negra.
EliminarEspero que el libro que te regaló esa amiga, te resulte divertido y, digamos, distendido.
Un beso.