"Pureza" Jonathan Franzen
«—Ay, preciosa, cuánto me alegro de oír tu voz —dijo la madre de la chica por teléfono—. Me está traicionando el cuerpo otra vez. A veces creo que mi vida no es más que un largo proceso de traiciones del cuerpo.
—Como todas las vidas, ¿no? —dijo Pip.
Había adoptado la costumbre de llamar a su madre desde Renewable Solutions durante la pausa de la comida. Esto mitigaba en parte su sensación de no valer para ese trabajo, de tener un trabajo para el que nadie podía valer, o de ser una persona que en realidad no valía para ningún trabajo; y además, al cabo de veinte minutos, podía decir con sinceridad que tenía que seguir trabajando».
Pip no está contenta con su trabajo ni con su vida en general. Adora a su madre, pero le aburre hablar con ella y oír sus quejas. Por eso la ha dejado sola en su cabaña de Felton, en el Valle de San Lorenzo, California, y se ha ido a Oakland donde vive de okupa en una casa embargada cuyo propietario ha vuelto a ocupar ilegalmente. Lo único que Pip querría oír de su madre es la identidad de su padre, pero eso la mujer lo oculta celosamente por más que para Pip podría ser la solución a muchos problemas. Pretende que su desconocido padre pague el préstamo universitario de ciento treinta mil dólares que la encadena a trabajos que no le gustan. Puesto que nunca le ha dado nada, Pip piensa que bien puede correr con ese gasto. Ahora ha conocido a alguien que le puede poner en contacto con alguien que podría resolver el enigma.
Andreas Wolf es el creador y alma del Sunlight Project, un proyecto dedicado a filtrar secretos de Estado y de grandes corporaciones en la línea de Snowden y Assange.
«Wolf había fundado el Sunlight Project en el año 2000, centrado al principio en un surtido de infracciones alemanas, pero pronto había abierto el espectro para incluir injusticias sociales y secretos tóxicos del mundo entero. En unos cuantos cientos de miles de imágenes de internet se apreciaba que era un hombre muy guapo, aunque al parecer no se había casado ni tenía hijos. Había huido de un juicio en Alemania en 2006, y de Europa en 2010, para recibir asilo primero en Belice y, más recientemente, en Bolivia, cuyo presidente populista, Evo Morales, le profesaba admiración».
Y es que Wolf es oriundo de Alemania del Este, la República del Mal Gusto en sus propias palabras. Sabremos de su vida allí, del delito que cometió por amor, de las difíciles relaciones con sus acomodados y acomodaticios padres, miembro él del Comité Central; del fin del estado socialista y de su huida de Alemania.
Leila Helou trabaja para Denver Independent, «una agencia de investigación periodística patrocinada por una fundación» y presidida por Tom Aberant su actual pareja. Ambos mantienen una relación complicada con sus respectivas parejas anteriores. Leila aún se ocupa de Charles, el profesor del que se enamoró mientras estudiaba y que dejó a su mujer y a sus hijos por ella. Ahora está inválido y aunque de facto están separados ella se sigue ocupando de él y pasando algunos días en su casa. Esto le crea problemas con Tom que tampoco parece haberse librado de su ex mujer. «Me ocupo de Charles porque me necesita. Tú te agarras a Anabel porque nunca dejaste de quererla».
Tom Aberant nos cuenta su historia con Anabel, cómo se enamoró y cómo consiguió llegar a casarse con ella, una heredera que podría ser multimillonaria si no hubiera decidido enfrentarse a su padre y despreciar todo lo que él representaba. Esta parte es la única narrada en primera persona por Tom, pero además de su historia más que accidentada con Anabel sabremos del origen del propio Tom, de su madre nacida y criada en Alemania Oriental, de donde pudo salir para casarse con un estadounidense con dos hijas de un matrimonio anterior que la deslumbró en contraste con la pobreza a la que estaba acostumbrada y se la llevó a Estados Unidos. Lo conoció en Berlín donde era «delegado del Cuarto Congreso Mundial de la Asociación para el Entendimiento Internacional, que ya nunca celebró un quinto congreso, al revelarse el otoño siguiente que en realidad era una tapadera comunista».
«¿Qué sabía yo de dólares fuertes, de divisas débiles? Y como no entendía todo lo que decía, creía que la ciudad de Denver al completo lo había elegido como representante para un importante congreso mundial. ¡Creía que era rico! Nunca había visto una cartera tan gruesa. Yo no sabía que la Asociación para el Entendimiento Internacional tenía exactamente cuatro socios de pago en todo el estado de Colorado. No sabía nada. En cinco minutos me robó el corazón. Con tal de estar con él, habría ido a Estados Unidos arrastrándome de rodillas».
Jonathan Franzen |
Todas estas historias irán confluyendo, unas de forma más previsible y otras, de manera inesperada. Y aunque parezca que he contado mucho, en realidad, no he empezado casi a hablar de la novela. Y no voy a hacerlo. Tan solo diré que habla de muchas cosas, pero ya casi llegando al final, encuentro una frase que es como un resumen de las más de setecientas páginas que la componen:
«Pip [...] estaba pensando en lo terrible que es el mundo, en la eterna lucha por el poder. Los secretos daban poder. El dinero daba poder. Ser necesitado por los demás daba poder. Poder, poder, poder; ¿cómo era posible que el mundo se organizara a partir de la lucha por algo cuya posesión genera tal soledad y opresión?
Cynthia preparó una cena sencilla, abrió una segunda botella y habló de su forma de ver el mundo: la concentración de capital en las manos de unos pocos, la demolición calculada de la confianza en el gobierno, la abdicación de la responsabilidad por el cambio climático en todo el planeta, las decepciones de Obama. Oscilaba entre la indignación y la desesperanza, y Pip compartía su indignación, pero sólo en parte. Sin duda parecía injusto que le hubiera tocado aquella mierda de mundo creado por sus padres. En lo personal, la habían dejado en una posición insostenible y pertenecían a la generación que no había hecho nada acerca de las armas nucleares y menos que nada contra el calentamiento global; ella no tenía la culpa».
Sí, creo que finalmente, la novela habla del poder, de todo tipo de poder, el poder grande que se ejerce desde los Estados o las grandes corporaciones o desde un ordenador cuando se tiene la información necesaria, pero también del poder con minúsculas, el que tiene uno u otro miembro de la pareja, el que proporciona poseer dinero y usarlo, y saber renunciar a él, el que se ejerce con la propia debilidad y el que tienen los fuertes. Habla de esperanzas y de decepciones, de amor y desamor. Y recorre una buena parte del siglo XX en Europa y en Estados Unidos. Sin olvidar Bolivia donde transcurre un capítulo.
Jonathan Franzen es uno de los autores más interesantes del panorama narrativo actual. Estuve muchos años sin leerlo, aunque sus obras han aparecido en mis estanterías a medida que se han ido publicando. Por fin, tras la lectura de su último libro, Encrucijadas, he vuelto sobre él y me alegro muchísimo. No es para leer con prisas. Sus novelas son extensas e intensas, pero engancha. A mí me engancha.
Estas son las otras novelas que he leído de Jonathan Franzen con la fecha de lectura entre paréntesis.
“Las
correcciones”. (2002)
“Movimiento
fuerte”. (2005)
“Libertad”. (2011)
“Encrucijadas”. (2022)
Este libro participa en el Reto Autores de la A a la Z que organiza el blog Lecturápolis. Con él relleno la letra F.
Participa también en el Reto Doce libros pendientes de tu biblioteca como El gordo (con muchas páginas). Tiene 704 páginas
Título del libro: Pureza
Autor: Jonathan Franzen
Nacionalidad: Estados Unidos
Título original: Purity
Nacionalidad: Estados Unidos
Título original: Purity
Traducción: Enrique de Hériz
Editorial: Salamandra
Año de publicación: 2015
Año de publicación original: 2015
Nº de páginas: 704
Sera un placer conocerla.
ResponderEliminarGracias por compartirla, saludosbuhos!!
Seguro que te gusta y la disfrutas. Gracias a ti por la visita.
EliminarUn beso.
Una novela para reflexionar, con temas muy actuales y poliédricos. Me gusta mucho esa reflexión final en torno al poder y la soledad que genera y lo que se intuye tras tu reseña, Rosa. Una recomendación estupenda. Un beso y muchas gracias.
ResponderEliminarEs un autor que me gusta mucho. Sus historias son magníficas y sus reflexiones muy interesantes. La forma de contar está historia, a base de las pequeñas historias que la forman, me ha gustado especialmente.
EliminarUn beso.
Hola, Rosa.
ResponderEliminarEsa reflexión implícita sobre el poder, el gran poder o el pequeño poder, es un temazo para un libro por lo que no me extraña que te haya enganchado. La longitud de la novela hace que tengas que dedicarle tiempo y saborearla aunque en lo personal cuando pasan de las 500 páginas me cuestan un poco.
Besos y buen fin de semana.
A mí, si me gusta la novela, cuanto más larga, mejor. Siempre he sido partidaria de libros gordos. Sólo cuando leo digital, como no veo el libro, me importa menso, pero en las librerías huyo de los libros finos.
EliminarEstá novela es muy interesante. El autor entero lo es.
Un beso.
Un autor que no he leído, pero que supongo que en algún momento debería de leer, por todo lo bueno que escucho siempre de sus libros y sobre todo porque me da que me va a gustar. A ver si me animo a hacerle un hueco a alguna de sus extensas novelas.
ResponderEliminarbesos
No lo dejes pasar. Estoy segura de que te es de los que te van a gustar. Todas sus novelas merecen la pena y tratan temas interesantes muy bien tratados.
EliminarPor cierto he tardado en contestar porque te acabo de sacar del spam. Qué lata esto del spam. Tengo que revisarlo cada dos o tres días y siempre hay algún comentario allí.
Un beso.
Una completa lata. Yo también tengo la costumbre de revisarlo a menudo porque además hay veces que incluso pasa a spam comentarios publicados hace tiempo en entradas antiguas y, ya el colmo de los colmos, repuestas mías a algunos comentarios, como si no tuviera yo más cosas que hacer que 'spamearme' a mí misma.
EliminarEl sábado no debía de estar muy fino, porque además del tuyo visité y comenté algún otro blog y hubo algún otro comentario que no publicó. De hecho de alguno me di cuenta en el momento. Como alguna vez te he leído que sueles estar pendiente, no quise insistir volviendo a comentar. Pensé: pues bueno, ya lo rescatará Rosa cuando buenamente pueda, jaja.
Intentaré no dejar pasar a Franzen.
besos
Exactamente igual me pasa a mí. Encuentro en spam comentarios míos de respuesta a otros, y la última vez saqué uno de una entrada de 2017 que se había publicado en su momento.
EliminarHay que andarse con un cuidadín... ja, ja.
Un beso.
Hola, Rosa:
ResponderEliminarComo ya te he dicho en Instagram o Facebook,ahora no sabría decirte dónde, me gusta el estilo de Franzen, pero como a Miguel las muchas páginas me echan un poquito para atrás. Pero me llama esta novela y creo que para el verano que ya está en puertas y que se anuncia caluroso puede ser una buena compañía. Me lo apunto.
Un beso
Es una novela larga, pero muy entretenida, al menos a mí me lo parece. Todo lo que he leído de Jonathan Franzen me ha resultado siempre muy entretenido. Además de que tiene una gran calidad y está muy bien escrito. Me gustaría ver cómo lo analizas tú en esas reseñas tan completas y pormenorizada que sueles hacer. A ver si este verano te animas con ésta o con otra de sus novelas.
EliminarUn beso.
¡Hola Rosa! conozco a Franzen, claro, y lo recomiendo en la biblioteca a pesar de no haberlo leído nunca y no sentir ganas de hacerlo, lo recomiendo porque sé que es un autor muy bueno, que a muchos apasiona, pero sé a que usuarios sí y a cuales no recomendarlo (a los usuarios habituales ya se les conoce también respecto a sus gustos lectores), porque sé que también a muchos se les hace espeso, entre los temas que aborda que son intrincados y esos tochos ante los que enfrentarse. Y ya sabes que lo de que sean tochos, no son impedimento para mi si consiguen engancharme, incluso agradezco las lecturas extensas si me apasionan, así me duran mas y no tengo que andar intentando engancharme a algo, harto complicado para mi hoy en día, ya lo sabes.
ResponderEliminarFíjate que leyéndote te diría que me parece muy interesante la novela, esos temas como el poder ejercido sobre los demás y ese confluir de historias que me suele encantar, hasta me han entrado ganas de leerlo. Pero sin ni siquiera darle la oportunidad, presiento que el autor no es para mi, que sería carne de abandono inevitable, aunque ¿quién sabe? igual un día me da la locura y me llevo uno de sus libros a casa, conmigo nunca se puede estar segura de nada, ni yo misma lo estoy literariamente hablando 😂
Me alegra que la hayas disfrutado
Un beso
Pues creo que es un autor que te gustaría. Puede que asuste un poco por la extensión de sus libros (aunque sé que ese no es tu caso) o por tener la sensación de que va a ser un autor difícil o aburrido. Nada más lejos de la realidad. Es un autor muy entretenido, al menos lo que yo considero entretenido. Sus historias siempre me enganchan. Lo hicieron en la primera etapa de mi lectura de sus novelas y, muchos años después, en mi sugunda etapa, me vuelve a enganchar. Ahora ya no me queda ninguna novela por leer y me voy a meter con dos libros autobiográficos que tiene que, por cierto son más finitos sobre todo el primero, Zona templada, que tiene unas setenta páginas.
EliminarImagino que sí que se termina conociendo los gustos lectores de los usuarios habituales. Tanto ver los libros que se llevan tiene que dar mucha información.
Un beso.
Buenos días, Rosa.
ResponderEliminarEfectivamente, en la vida todo gira entorno al poder. Es así ahora, y , en realidad, siempre ha sido así. Sólo hay que estudiar la historia mundial para darse cuenta de ello. Tan sólo han variado un poco los medios para conseguirlo. Recuerdo un libro de Alvin Toffler que tuve que leer durante mis años universitarios, que adjudicaba el poder al máximo conocimiento que se pudiera tener. Me gustaría saber qué diría de los tiempos actuales si aún siguiera con vida...
Muy interesante tu propuesta literaria de hoy. Todavía no he leído a Jonathan Frazen, pero no tardaré en hacerlo. Me lo dejo para este verano.
Un abrazo, y feliz domingo!!
Basta con estudiar la Historia y remontarse a la Prehistoria, porque fue en el Neolítico cuando todo comenzó. Las desigualdades, la distinta capacidad para hacerse con los excedentes de comida y de ahí, todo lo demás.Esta novela habla del poder, aunque también de otras cosas.
EliminarEn el sentido de lo que cuentas, yo pienso en los grandes humanistas del siglo XIX y principios del XX, e incluso en los anarquistas y socialistas que pensaban que todos los males del mundo se acabarían cuando todo el mundo supiera leer y escribir (conocimiento al fin y al cabo, como decía Alvin Toffler). me he preguntado muchas veces qué sucedería si levantaran la cabeza y vieran lo que hace la gente con sus capacidad para leer y escribir ahora que todos gozan de ello.
Te recomiendo a Franzen. me encanta y nunca me ha defraudado.
Un beso.
Hola Rosa!! Me interesa mucho lo que nos cuentas sobre este título, creo disfrutaría con su lectura, así que tengo muy en cuenta tu recomendación. Me alegro que te haya gustado. ¡Estupenda reseña, como siempre! Besos!!
ResponderEliminarPues ciertamente espero que disfrutes de esta novela. Larga, pero muy interesante.
EliminarUn beso.
Hola Rosa, otro autor del que no he leído nada pero del que he visto en la biblioteca alguna de sus novelas, y no lo he leído, no por el grosor de sus libros, sino por la absoluta falta de referencias. Ahora tras tu reseña, creo que podría gustarme, y es que el tema del poder y de como se ejerce, me parece un tema interesante. Me lo apunto, y a ver con cual me animo, aunque las incorrecciones creo que es la más conocida. Besos.
ResponderEliminarLas correcciones es la más conocida y es con la que yo conocí al autor, pero todas me han gustado mucho. Fue finalista del Premio Pulitzer de ficción y creo que eso dio gran notoriedad al autor. Es de las novelas que pienso que debería releer porque la verdad es que casi no recuerdo nada de ella. Creo que te gustará cualquiera de sus libros.
EliminarUn beso.
No he leído aún nada de este autor. Lo tengo entre mis pendientes desde hace mil, pero no termino de hacerle hueco. Me atrae los temas que trata en este libro y esa reflexión final sobre el poder. Me tientas. A ver si consigo animarme.
ResponderEliminarBesotes!!!
Anímate porque creo que al menos merece la pena conocer a Jonathan Franzen. Sus novelas son muy entretenidas y, sobre todo, muy interesantes, bien escritas y para reflexionar.
EliminarUn beso.
Hola, Rosa. Mi favorito de Franzen sigue siendo Las correcciones, me pareció una maravilla. Estoy de acuerdo contigo en todo lo que dices de este, me encantó la parte de las relaciones humanas y la parte también en las dos Alemanias. Pienso como tú, es un libro al que ir armado con bastante paciencia porque algunos temas son algo densos pero compensa. El que no me gustó casi nada fue Libertad. Tengo pendiente Encrucijadas.
ResponderEliminarBesos
Si te digo la verdad, los que leí antes de Encrucijadas, lo que yo llamo mi primera etapa con el autor, casi no los recuerdo en absoluto. Sé que me gustaron mucho y también recuerdo que Las correcciones fue el que más, pero no consigo recordar más que leves pinceladas de sus tramas. Mi memoria es fatal para estas cosas. A ver si no tardando mucho me meto con Zona templada y Zona fría, sus dos libros autobiográficos. ¿Los has leído?
EliminarUn beso.
No, no conocía esos libros autobiográficos. Voy a investigar.
EliminarBesos
Hola. No he leído nada de este autor, lo tengo anotado por creer que es un gran artesano para crear emociones con sus letras y una vez más con tu reseñas me dejas con ganas de comenzar a leerlo. Este libro que nos reseña me tienta y lo buscaré. Gracias y felices lecturas.
ResponderEliminarNo dejes pasar a Jonathan Franzen. Es un gran autor con novelas muy buenas y entretenidas. Seguro que lo disfrutas. Es, en efecto, un gran artesano de la narración.
EliminarUn beso
No he leído nada del autor, pero todo lo que cuentan es positivo y ahí lo tengo a la vista... No sé cuándo caerá, espero que en algún momento. Me gustaría al menos darle la oportunidad, veo que son libros intensos pero si enganchan, como dices que te ha pasado a ti, seguro que se leen bien igualmente. No me importa leer libros extensos cuando estos tienen contenido interesante y son entretenidos... :)
ResponderEliminarGracias por la recomendación, este título no lo tenía en el radar.
Un abrazo.
Jonathan Franzen es un gran autor que merece mucho la pena aunque sus novelas sean bastante extensas todas ellas. Yo empezaría por Las correcciones. Fue la que lo dio a conocer, fuera de Estados Unidos por quedar finalista del Pulitzer y, aunque casi no recuerdo nada de su trama, fue la primera que leí y la que me enganchó al autor. Espero que te animes y lo disfrutes.
EliminarUn beso.
¡Hola, Rosa!
ResponderEliminarTe soy sincera, no conocía a este autor. No me importaría acercarme a él con tu sugerencia, esas tramas entrelazadas con múltiples giros inesperados y que acumulan suspenso, me atraen bastante. Pero no estoy segura de que esta sea la mejor novela de Franzen.
Tal como le sugieres a Lectora Empedernida, ¿es mejor acercarse al autor con "Las correcciones"?
Un abrazo.
Yo creo que Las correcciones es una buena opción para acercarse al lector. También Encrucijadas. Pureza podría serlo perfectamente. El que creo que no te aconsejo para empezar es Libertad. El otro día me decía Norah que era un libro del autor que no le había gustado nada Yo le dije que casi no recordaba nada de los libros de Franzen leídos en aquellos años, pero luego me di cuenta de que justo después de leer Libertad vino mi parón con el autor que ha durado once años y ahora pienso que pudo ser porque Libertad tampoco llegó a convencerme del todo. Me cuesta recordarlo la verdad, pero no veo otra razón para que dejara de leer a un autor que tanto me gustaba.
EliminarNo obstante, te recomendaría empezar por Las correcciones para ir sobre seguro. Fue finalista al Pulitzer.
Un beso.
Nunca he leído a Jonathan Franzen y no por falta de ganas sino de tiempo, pero siempre me ha llamado la atención "Pureza", por el título, claro. Aunque es tan tocho... Pero voy a empezar por aquí con el autor, me has convencido. Me gustan esas historias que confluyen y que la protagonista se llame Pip, como el Pip de Dickens en "Grandes esperanzas". Besos.
ResponderEliminarEs un gran escritor. Yo disfruto mucho de sus libros, y disfruto más por lo largos que son y lo mucho que desarrolla las historias. Espero que te animes. Pureza o Las correcciones o Encrucijadas pueden ser buena opción para abordarle. Ya nos contarás.
EliminarUn beso.