"Regresión" Alejandro Amenábar

Seis años hace ahora desde el estreno de la anterior película de Alejandro Amenábar, la excelente "Ágora". Por motivos de trabajo, la veo todos los años y tengo que decir que con cada nueva visión, la película gana. No creo que suceda lo mismo con "Regresión" la nueva cinta del director estrenada el pasado 2 de Octubre.
Se trata de una historia basada en hechos reales. Una supuesta secta satánica que actuaba en Minnesota en los años noventa del pasado siglo, cometió todo tipo de crímenes horrendos. Abuso de menores e incesto, misas negras con toda clase de sacrificios, incluidos los de bebés. 
Los hechos se desencadenan cuando Angela Grey de diecisiete años acusa a su padre, John, de abusos sexuales. El padre, hombre muy religioso, no recuerda nada, pero piensa que todo debe ser cierto porque su hija jamás miente. Con el fin de averiguar la verdad, se incorpora a la investigación un psicólogo que someterá al detenido a tratamientos de regresión, una técnica en la que, mediante hipnosis, se pretende llevar al paciente a momentos de su pasado que en estado de consciencia es incapaz de recordar. 
Lo que van descubriendo, va desvelando todo un mundo soterrado en el que participan más personas de las esperadas; lo que descubren va poniendo de manifiesto que uno no debe burlarse de ciertos temas, porque después viene la realidad a burlarse de uno.
Y eso es lo que le sucede al inspector Bruce Kenner, encargado de investigar el caso, cuando éste comienza a influir en su vida no sólo en forma de pesadillas. Interpretado por Ethan Hawke, sobra decir la verosimilitud, sin estridencias ni excesos que le da al personaje, pues en eso es especialista el actor.

La casa de los Grey

La historia está muy bien contada, ambientada de forma impecable, en unos paisajes de una belleza apabullante alrededor de uno de los numerosos lagos de los que abundan en el estado (la falta de horizontes en alguna escena me hace pensar en el Lago Superior), en unos ambientes deprimentes y cochambrosos (la casa de Amanda es un caos de suciedad, trastos viejos, y exceso de gatos, en la que lo único que se mantiene limpio y ordenado es el cuarto de la joven) que aportan una gran verosimilitud a la aparición de satanismos y demás actividades esotéricas. 
Amenábar es un artesano en la realización de sus películas y eso vuelve a notarse en ésta. También consigue llevar a los actores al máximo de lo que pueden dar y eso sin sobreactuaciones innecesarias, con la sencilla maestría del intérprete que se mete en la piel de un personaje y deja que el personaje lo lleve con la naturalidad con la que se llevaría a sí mismo.
Amenábar es capaz de mantener un ritmo constante, sin sobresaltos ni gritos en la

Ethan Hawke (Bruce Kenner) y
Emma Watson (Angela Grey)

sala, con la sangre justa y la violencia muy medida, hace que el espectador esté atento y pendiente de la historia sin perder un momento la atención...
Y sin embargo, a la película le falta algo. Le falta la chispa del Amenábar que conocemos en este tipo de películas; del Amenábar que fue capaz de llenar la pantalla de personajes muertos con un guión escrito varios años antes que el de "El sexto sentido". En mi ingenuidad, estuve esperando el giro mágico hasta el final y no llegó. 
Es una buena película, con su final inesperado (al menos para mí) y, hasta cierto punto, sorprendente. También es una buena crítica de lo que los fenómenos mediáticos pueden hacer en el colectivo social (ese creo que es su mayor valor), pero no deja de ser una película más en ese género entre cine de intriga, miedo y policíaco. 
Tal vez se deba a que, al estar basada en hechos reales, la propia realidad pone sus límites a la imaginación, pero también "Mar adentro" y "Ágora" estaban basadas en hechos reales y eso no impidió que el director nos atenazara el alma de emoción.
No, no es eso. Es que a esta película le falta el sello de Amenábar. 

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