Septiembre 2016
"El valle
Salinas se halla en la California septentrional. Es una cañada larga y
estrecha que se extiende entre dos cordilleras montañosas. Por su centro
serpentea y ondula el río Salinas, hasta desembocar en la bahía de Monterrey.
Recuerdo los
nombres que de niño ponía a las hierbas y flores misteriosas. Recuerdo dónde
puede vivir un sapo y a qué hora se despiertan los pájaros en verano, incluso
cómo olían los árboles y las estaciones; y también cómo andaban las personas,
qué aspecto tenían y su olor. El recuerdo de los olores es muy enriquecedor.
Yo recuerdo haber recorrido el Valle de Salinas, en coche, en el verano de 2011, para llegar a Monterrey y allí ser presentada al océano Pacífico; y recuerdo haber experimentado la emoción de saber que, cuando leí el libro (cada una de las veces que lo leí), jamás hubiera pensado que un día recorrería aquellos pasajes míticos para mí, pero los estaba recorriendo con la turbación nerviosa del que recorre un lugar sagrado (para mí lo era).
También recuerdo la segunda vez que leí este libro, y la tercera. Soy incapaz, sin embargo de recordar la primera vez, aunque sé que existe, y a veces dudo de si las que recuerdo como segunda y tercera no serán en realidad tercera y cuarta y habré olvidado la segunda igual que olvidé la primera. Lo he leído varias veces. En realidad, me inclino más por la versión de que cuatro han sido las veces que he leído "Al este del edén" de John Seteinbeck. No descarto que haya más.
Se trata de una maravillosa y muy extensa novela que ha inspirado una película, del año 1955, dirigida por Elia Kazan, aunque sólo un episodio del libro se ha llevado a la pantalla, de manera que cuando, en palabras de Aute en su preciosa canción "Las cuatro y diez", James Dean tiraba piedras a una casa blanca, está empezando la película, pero para entonces el libro lleva ya recorridas más de las dos terceras partes de sus páginas y ha contado la historia del padre y de la madre de Caleb Trask, personaje que interpreta, efectivamente, el mítico James Dean.
La historia que nos cuenta la novela se basa, casi exclusivamente, en el mito de Cain y Abel, un tema que me resulta de lo más atractivo; un mito que en la novela se nos muestra en la historia de Adam Trask y su hermanastro, Charles, pero sobre todo en Caleb y Aaron, los dos hijos mellizos de Adam y Cathy.
Una historia, la de Cain, en la que indagó y profundizó hace años un grupo de chinos de la familia de Lee, el criado de los Trask y quien realmente ha cuidado de los niños desde que desapareció la madre. Estos chinos comienzan a estudiar hebreo para poder interpretar el verdadero sentido de una palabra, "timshel"; una palabra que, traducida de distintas maneras en las distintas versiones de la Biblia, ha llenado de curiosidad a Lee y a sus estudiosos familiares. Las diversas interpretaciones la traducen como una orden dada por Dios a Caín tras matar a su hermano ("Domina al mal") o como una promesa ("Dominarás al mal"). Lo que descubren tras sus estudios del hebreo y su interpretación de la palabra ("Podrás dominar al mal") "hace al hombre grande, lo pone al lado de los dioses, porque a pesar de su debilidad, de su cieno y de haber dado muerte a su hermano, todavía le queda la gran libertad de escoger". No es una orden, no es una promesa, es el don de la libertad: podrás o no podrás, tú eliges.
Pero que nadie se asuste. No estamos ante una historia bíblica, sino ante las peripecias de dos familias (los Trask y los Hamilton) en el Valle de Salinas, a caballo entre los siglos XIX y XX, desde la Guerra de Secesión, hasta le Primera Guerra Mundial.
Una historia llena de personajes que anhelan el amor, que envidian a los que creen que se lo disputan, que sufren y se defienden como pueden o como saben y que intentan vencer al mal, aunque no siempre lo consigan.
Las novelas que aparecen en esta sección, "Bienvenido nuevo mes literario", no están recién leídas, pero están leídas. Se trata de novelas que empleo para comenzar cada mes. Por ello comienza la entrada con el inicio del libro. No pretende ser una reseña, sino el comentario sobre una historia que me marcó lo suficiente como para poder hablar de ella aunque haga ya muchos años que la leí. Por ello, espero que me perdonéis si incurro en algún error.
También recuerdo la segunda vez que leí este libro, y la tercera. Soy incapaz, sin embargo de recordar la primera vez, aunque sé que existe, y a veces dudo de si las que recuerdo como segunda y tercera no serán en realidad tercera y cuarta y habré olvidado la segunda igual que olvidé la primera. Lo he leído varias veces. En realidad, me inclino más por la versión de que cuatro han sido las veces que he leído "Al este del edén" de John Seteinbeck. No descarto que haya más.
Se trata de una maravillosa y muy extensa novela que ha inspirado una película, del año 1955, dirigida por Elia Kazan, aunque sólo un episodio del libro se ha llevado a la pantalla, de manera que cuando, en palabras de Aute en su preciosa canción "Las cuatro y diez", James Dean tiraba piedras a una casa blanca, está empezando la película, pero para entonces el libro lleva ya recorridas más de las dos terceras partes de sus páginas y ha contado la historia del padre y de la madre de Caleb Trask, personaje que interpreta, efectivamente, el mítico James Dean.
La historia que nos cuenta la novela se basa, casi exclusivamente, en el mito de Cain y Abel, un tema que me resulta de lo más atractivo; un mito que en la novela se nos muestra en la historia de Adam Trask y su hermanastro, Charles, pero sobre todo en Caleb y Aaron, los dos hijos mellizos de Adam y Cathy.
Una historia, la de Cain, en la que indagó y profundizó hace años un grupo de chinos de la familia de Lee, el criado de los Trask y quien realmente ha cuidado de los niños desde que desapareció la madre. Estos chinos comienzan a estudiar hebreo para poder interpretar el verdadero sentido de una palabra, "timshel"; una palabra que, traducida de distintas maneras en las distintas versiones de la Biblia, ha llenado de curiosidad a Lee y a sus estudiosos familiares. Las diversas interpretaciones la traducen como una orden dada por Dios a Caín tras matar a su hermano ("Domina al mal") o como una promesa ("Dominarás al mal"). Lo que descubren tras sus estudios del hebreo y su interpretación de la palabra ("Podrás dominar al mal") "hace al hombre grande, lo pone al lado de los dioses, porque a pesar de su debilidad, de su cieno y de haber dado muerte a su hermano, todavía le queda la gran libertad de escoger". No es una orden, no es una promesa, es el don de la libertad: podrás o no podrás, tú eliges.
Pero que nadie se asuste. No estamos ante una historia bíblica, sino ante las peripecias de dos familias (los Trask y los Hamilton) en el Valle de Salinas, a caballo entre los siglos XIX y XX, desde la Guerra de Secesión, hasta le Primera Guerra Mundial.
Una historia llena de personajes que anhelan el amor, que envidian a los que creen que se lo disputan, que sufren y se defienden como pueden o como saben y que intentan vencer al mal, aunque no siempre lo consigan.
Las novelas que aparecen en esta sección, "Bienvenido nuevo mes literario", no están recién leídas, pero están leídas. Se trata de novelas que empleo para comenzar cada mes. Por ello comienza la entrada con el inicio del libro. No pretende ser una reseña, sino el comentario sobre una historia que me marcó lo suficiente como para poder hablar de ella aunque haga ya muchos años que la leí. Por ello, espero que me perdonéis si incurro en algún error.
He visto la película en varias ocasiones y me encanta. Por contra y, como casi siempre me pasa con las películas, tengo miedo a que el libro me decepcione. Aunque por lo que dices debería leerlo. Al autor ya lo conozco, leí hace mucho De ratones y hombres, pero temo que me pase como con Rebecca o como con Desayuno con Diamentes, que los libros me gustaron, pero sigo teniéndolos en la sombra de las películas.
ResponderEliminarUn besote.
La película es muy buena, pero es que es menos de la tercera parte de la historia que empieza contando la infancia de los padres. Creo que deberías leerlo porque con la peli no te haces idea. "De ratones y hombres" es muy bueno y "Las uvas de la ira", sublime.
EliminarUn autor muy bueno.
Un beso.
Rosa, es interesante aquello del "mito de Caín y Abel" y me alegra que hayas aclarado que este libro no trata sobre una historia bíblica. Me imagino es un contraste para comprender las relaciones humanas y algunos sentimientos como odio, envidia o rencor. Esos dramas familiares me atraen bastante.
ResponderEliminarHa sido un estupenda reseña. NO creo que yo haya leído jamás tres o cuatro veces el mismo libro. Si acaso dos.
Para nada es una historia bíblica. Es una novela normal con sus amores y odios y personas buenas y malas y regulares, ambientada en California a finales del siglo XIX y principios del XX. te gustará, casi seguro.
EliminarUn beso.
Hola!!!!! Veo que eres de las mías, de releer bastantes veces un libro.
ResponderEliminarHe visto la peli muchas veces, pero no he leído el libro, así que me lo apunto, porque si te digo la verdad, no sé porqué no lo he leído si es un género y una época que me gustan.
Besos.
La película es muy buena, nunca dejaré de decirlo, pero es que es una pequeña parte del libro y no da idea de la historia tan completa y compleja que se encierra en la novela. Seguro que te gusta.
EliminarUn beso.
Coincido contigo, es una novela maravillosa. La leí estas navidades, aunque llevaba en mi estantería mucho tiempo. Una novela que tiene su punto autobiográfico, puesto que uno de los personajes clave, el viejo Samuel Hamilton es el abuelo de Steinbeck.
ResponderEliminarLa adaptación al cine es mítica, mientras leía el libro no era capaz de imaginar a Caleb de otro modo que como James Dean.
El perfil del personaje de Cathy es estremecedor, representa el mal en estado puro, una psicópata sin ninguna capacidad de empatía. En la película creo que prescinden del personaje de Lee, que es quien da toda la profundidad y matiz psicológico a la historia.
En fin, con el tiempo yo también acabaré dándole una segunda lectura, aunque lo de viajar al Valle de Salinas lo veo menos probable.
Muy buena manera de empezar septiembre, ¡saludos!
Sabía que el narrador es el nieto de George Hamilton (vaya personaje!!), pero no sabía que era el propio autor. ¿Se puede suponer que la historia es real al menos en parte? Pues sería terrible.
EliminarUn beso y bienvenido.
Tendría que buscarlo, pero creo que todo lo referente a su madre, las clases de vuelo, lo que cuenta el narrador de cierta enfermedad infantil, etc. Todo es verídico, es la historia familiar de los Steinbeck. Lo de Caleb y Aaron, que es lo que nos interesa, es ficción.
EliminarQué interesante. No tenía ni idea. Vergüenza me da, tanto amor por la novela y desconocer esas cosas. Muchas gracias por la información.
EliminarUn beso.
No he leído la novela, posiblemente eclipsado en esta ocasión por tan maravillosa adaptación cinematográfica.
ResponderEliminarUn saludo.
Lo digo siempre. La película muy buena, pero solo recrea un pequeño episodio de la novela, por lo que leer ésta se hace imprescindible.
EliminarUn beso.
Hola, Rosa, leí la novela hace años. Y me gustó mucho, al igual que la película. Donde nunca he estado es en el Valle de Salinas, y me encantaría. Lo dudo, pero, quién sabe. La foto que inicia el texto es preciosa. Si es tuya, la bordaste. Un abrazo, Rosa.
ResponderEliminarNo, no es mía. Iba tan embobada en el coche, con la cámara guardada y de eso que no haces foto y luego te arrepientes. Pero bueno, lo vi con mis ojitos y metí los pies en el agua en Monterrey!!
EliminarUn beso.
Hola Rosa: Para empezar te diré que me he quedado embobada un ratín viendo tan maravillosa fotografía, que bonita, y luego leyendo tu reseña como siempre sublime, precisamente Chari y yo lo comentábamos esta tarde lo buena que eres con las reseñas, nos gusta mucho a las dos. Bueno sigo que me enrollo y me pierdo, no he leído la novela, pero si he visto y varias veces, porque a mi padre le gustaba mucho, la peli, de modo que viendo lo bien que hablas del libro me lo apunto en lo mucho que tengo pendiente para leer, jo yo no se como se me acumula tanto, pero por que leo y veo nos pasa un poco lo mismo a todos. Un beso y enhorabuena una vez mas por la foto y la reseña. TERE.
ResponderEliminarLa foto no es mía, Tere. Qué más quisiera. Pasé por el Valle de Salinas con la cámara en la maleta. Era un día de travesía y ni se me ocurrió sacarla. Si te gusta la película, te recomiendo el libro.
EliminarPor cierto, ¿qué es de Chari? ¿No piensa volver por estos mundos blogueros?
Tennos un poco informadas porque se la echa de menos.
Un beso.
Otra novela que me gustaría poder releer un día. Si tuviera la llave de tiempo de Hermione Granger, jaja. Hay que volver a los clásicos.
ResponderEliminarLa foto es preciosa.
besos
Como digo en respuesta a otros comentarios, la foto no es mía. Bien podría serlo, pero no sabía que un día iba a tener un blog y me vendría muy bien. Pasé tan atontada y fascinada por el lugar (y con la cámara en la maleta) que ni pensé en hacer fotos.
EliminarSteinbeck es uno de los buenos y este libro, junto con "Las uvas de la ira" (otra película fabulosa) de lo mejorcito.
Un beso.
Un beso.
Yo solo he leído "Al este del Edén" una sola vez y, al igual que tú, se me ha olvidado porque lo único que recuerdo fue que al iniciar el libro, y como ya había visto previamente la película, aquello no se parecía en nada al film.
ResponderEliminarSi se me habrá olvidado que incluso leyendo tu reseña no me suena apenas nada. Para mí pasó sin pena ni gloria. Quizás, y viendo las emociones que despertó en ti, debería volver a darle otra oportunidad.
Por cierto, me parece entrañable la fascinación que sientes por EEUU.
Un besote, guapa
A mí me impresionó mucho, pero es que tenía trece años. las siguientes veces que lo leí, tengo que decir que ninguna de ellas me decpcionó, por lo que la primera impresión fue acertada.
EliminarMi fascinación por Estados Unidos es cierta y no es que no sea consciente de las cosas malas que tiene su cultura imperialista y dominante, pero es que, además, soy consciente de las cosas buenas que tienen y creo que son muchas y que tenemos cosas que aprender de ellos. En Europa y, en España, hay muchos prejuicios con el tema.
Un beso.
Sé que he visto la película, sé que la protagonizaba James Dean y hasta tengo en la cabeza alguna de las escenas míticas que nos regaló... pero nada más. Lo cierto es que no recuerdo nada más de la historia o los otros protagonistas. Esta es buena ocasión para sacarla del baúl de los recuerdos ;) Con el libro, que además adviertes es extenso, no me animo de momento.
ResponderEliminarComo siempre una reseña estupenda y que además sirve de estreno al mes. ¡Gracias!
Besos, Rosa.
No es más que un pequeño comentario de inicio de mes. Para hacer una reseña debería volver a leerlo (cosa que no descarto) porque la última vez fue en 1990 y ya no recuerdo lo suficiente como para una buena reseña.
EliminarVer la película siempre está bien, pero leer el libro es como añadir una precuela a la película, pues empieza cuando los padres aún no han nacido... Ahora, se necesitan unas semanas.
Un beso.
Gracias por recordarme esta novela. La tengo cargada en el e-book desde hace muchíiiisimo tiempo para volver a leer y nunca encuentro el momento. Creo que el inicio del otoño puede ser un buen momento. Un beso
ResponderEliminarPues anímate. Es una lectura muy buena para cualquier época, pero otoño, sin clases (je, je), puede ser la temporada ideal. Y sin prisas.
EliminarUn beso.
Entono un: ¡Mea culpa! ni me he leído el libro ni creo haber visto la película... tendré que enmendar alguna de las dos faltas.
ResponderEliminarPero como siempre te quedo agradecido, porque al menos tú me recuerdas las limitaciones y me acercas las obras a las que yo no he llegado todavía ni llegaré.
Besos
Pues yo ye agradezco con esta información que te proporciono, los maravillosos relatos que tú nos regalas. Piensa que le información que yo proporciono, la puede proporcionar cualquiera, hasta internet, pero tus relatos, solo tú puedes escribirlos.
EliminarUn beso.
Un libro y una película que no importa releerlo y ver la peli varias veces, no cansa. Un abrazo
ResponderEliminarMe alegro de que la historia te guste tanto como a mí.
EliminarUn beso.
gracias!!!! buscaremos el libro y la pelicula creo haberla visto, es que tu lo cuentas tan bonito y agradable que quedamos enredadas en tus letras y con eso nos basta... a veces!!. abrazote.
ResponderEliminarLa película está muy bie, el libro es maravilloso. Creo que no os arrepentiréis.
EliminarUn beso.