"La anomalía" Hervé Le Tellier

«Matar a alguien no es nada del otro mundo. Basta con observar, vigilar, reflexionar mucho y, llegado el momento, vaciarse. Eso es. Vaciarse. Apañárselas para que el universo se contraiga, para que se contraiga hasta condensarse en el cañón de un fusil o en la punta de un cuchillo. Eso es todo. No hacerse preguntas, no dejarse llevar por la furia, seguir el protocolo, actuar metódicamente. Blake sabe cómo hacerlo, y lo sabe desde hace tanto que ya ni sabe cuándo empezó a saberlo. El resto cae por su propio peso».

Blake es un asesino a sueldo. Lo encontramos en la Costa Este de Estados Unidos un 21 de marzo. Allí llegó el día 10 en un vuelo París-Nueva York con pasaporte australiano para llevar a cabo un encargo. Un vuelo que tardarán en olvidar los pasajeros y la tripulación del Boeing 787. «Todos los vuelos tranquilos se parecen, pero cada vuelo turbulento lo es a su manera. Son las 16.13 horas cuando el vuelo AF006 París-Nueva York ve alzarse ante él, al sur de Nueva Escocia, la barrera acolchada de un inmenso cumulonimbo». Así, parafraseando a Tolstoi, comienza Le Tellier a contarnos las peripecias de aquel terrible vuelo cuyos pasajeros no iban a olvidar nunca. Un vuelo en el que atravesaron un cumulonimbo de enorme  magnitud. Cientos de kilómetros de norte a sur, y unos 45.000 pies de altura. 

Pero Blake no es más que uno de los varios pasajeros del vuelo con los que nos iremos encontrando. A todos los veremos en su vida después de ese terrible 10 de marzo y hasta finales de junio. En esos tres meses y medio ha pasado de todo en la vida de los pasajeros. Alguno ha muerto o está enfermo y en fase terminal; se han roto parejas, se ha alcanzado la fama y la riqueza, se han celebrado matrimonios y concebido hijos. 

Las peripecias de los pasajeros del avión que nos son presentados nos llevan de Nueva York a California; de París a la India o a Nigeria. Todos han seguido con sus vidas, o con sus muertes, y a todos los iremos siguiendo hasta finales de junio, cuando irrumpe en sus vidas el desastre. 

«Traemos una orden de arresto, la estoy metiendo ahora mismo por debajo de la puerta. Abra, por favor». 

«Esto va a sorprenderte, [...] pero detrás de esa puerta hay alguien esperándote. Dos oficiales del FBI. En cualquier caso, cuento contigo para lo de mañana, siempre y cuando ya te hayan soltado, claro».

«Tenemos órdenes de pedirle que nos acompañe, [...] eso es todo. Un miembro de su consulado debería haber venido a recibirlo. Se reunirá con nosotros allí adonde lo llevamos. Puede usted negarse, en cuyo caso lo esperaremos juntos en la zona de retención».

Es el 24 de junio de 2021. El Boeing 787 París-Nueva York ha vuelto a aterrizar. Antes se ha encontrado con el mismo cumulonimbo, pero la respuesta encontrada al ponerse en contacto con tierra ha sido muy distinta.  Les ponen en comunicación con el Pentágono y general Patrick Silveria, en nombre del Secretario de Defensa les anuncia que dos cazas de la Navy los escoltarán y «En caso de tentativa de fuga, o si desobedece sus consignas, tienen la orden de derribar la aeronave».

El avión es llevado a un hangar en la base de la Fuerza Aérea McGuire en Trenton, Nueva Jersey. A partir de ese momento, viene lo que para mí es lo más interesante del libro. Los mismos personajes que han seguido con su vida durante más de tres meses aparecen en un avión en lo que para ellos es el 10 de marzo. Hay personajes marzo que han vivido con normalidad hasta junio y personajes junio que han perdido tres meses de su vida. ¿Cómo será el encuentro entre ellos? Porque a ver si nos entendemos, cada uno es cada uno, con sus sentimientos y con distintas experiencias. ¿Cómo reaccionar cuando te encuentras con un doble de ti misma casada (con alguien de quien tú estás enamorada) y embarazada? ¿Cómo solucionar el hecho de que tu hijo considera su madre a otra que es igual que tú, pero no eres tú... aunque sí seas tú? Si tu novia te ha dejado en este tiempo, ¿le podrás dar consejos a ese otro tú al que aún no han abandonado? ¿Es un descanso encontrarte a ti misma, la única a la que le contarías según qué secretos? «Solo tengo un consejo: sé cariñoso, sé atento, pero hazte un poco el indiferente. Y no la desees demasiado. Ya lo has entendido, pero aún no lo has aceptado. Lo recuerdo perfectamente. Tiene uno tan pocas ocasiones de hacerse de coach de sí mismo».

¿No resulta apasionante? Aterrizas en una base militar de Estados Unidos y te encuentras con que has perdido los meses que van de marzo a junio. Pero lo peor, con todo, no es eso. Lo peor es que hay otro tú que ha vivido tu vida durante ese tiempo. Ha dejado a tu novio o se ha casado con el hombre que amas; ha triunfado y se ha hecho famoso en el mundo entero, ha sido la madre de tu hijo que no ha tenido que echarte en falta, ha enfermado, ha muerto.

Y no es un intruso, eres tú mismo, con tu número de la seguridad social, tu pasaporte, tu identidad legal, tu ADN. ¿Qué hacer a partir de ese momento? ¿Hay que repartir el patrimonio, los hijos y el marido? Las situaciones que se plantean son de lo más variadas. Hay quien hace de la necesidad virtud y le saca a la situación todo el partido posible; hay quien solo ve en su otro yo un rival a abatir; hay quien decide hacerse humo y dejar su sitio al "otro"; hay quien... 

Las hipótesis científicas y tecnológicas no se hacen esperar y las hay de lo más peregrinas:

«¿y si somos un mundo de cromañones simulado por los neandertales, esa raza de sapiens que, contrariamente a lo que creíamos, consiguió sobrevivir realmente hace cincuenta mil años, hasta el punto de querer ver lo que esos primates africanos superagresivos podrían haber hecho si no hubiesen desaparecido, pobrecitos míos? [...] Y oye, ya puestos, ¿qué tal si no somos más que una simulación efectuada por los herederos de los dinosaurios, a los que ningún meteorito habría destruido, que se divierten observando un mundo gobernado por mamíferos?»

Hervé Le Tellier

La anomalía, Premio Goncourt en 2021, me ha resultado un libro apasionante. Entre la intriga y la ciencia ficción, plantea una serie de situaciones sumamente interesantes y sugerentes. Las discusiones científicas, los debates religiosos, los protocolos de actuación elaborados tras el 11-S, todo ello se analiza con un humor corrosivo que pone de manifiesto la vulnerabilidad a la que estamos sometidos y la ridiculez de muchas de las actuaciones tendentes a evitarla. «No se les ha escapado nada; hasta el punto de que si el Pentágono les hubiera pedido que dijeran todos los resultados posibles de una moneda lanzada a cara o cruz, habrían propuesto tres: cara, cruz y canto, incluyendo el inusual caso en que la moneda decide inmovilizarse en la vertical. Pero diez días después de haber entregado el informe, en abril de 2002, el DoD se lo devuelve con una pregunta escrita en rotulador rojo: "¿Y si nos enfrentáramos a un caso que no obedezca a ninguna de las situaciones contempladas?".

Tina pone los ojos en blanco: la hipótesis que faltaba, que la moneda se quede flotando en el aire».

Este libro participa en el Reto Escritores de la A a la Z que organiza el blog  Lecturápolis. Con él relleno la letra T.

Título del libro: La anomalía

Autor: Hervé Le Tellier
Nacionalidad: Francia
Título original: L’anomalie

Traducción: Pablo Martín Sánchez

Editorial: Seix Barral

Año de publicación: 2021

Año de publicación original: 2020

Nº de páginas: 368