"El último verano" Ricarda Huch
"Querido Konstantín:
Acabo de tomar posesión de mi nuevo cargo y quería contarte cómo se presentan las cosas. No dudo de que conseguiré mi objetivo; las circunstancias parecen ser incluso más favorables de lo que suponía. He despertado simpatía en toda la familia del gobernador; nadie muestra la más mínima desconfianza hacia mí. En realidad, es natural: solo nosotros, los que estamos al corriente, podríamos temer lo contrario". Esta es otra de esas novelas, que cada vez me gustan más, que está escrita en forma de cartas. Las cartas escritas entre el 5 de mayo y el 2 de agosto de 19... No se especifica el año, pero la novela está publicada en 1910, aunque fue escrita en 1905. La trama transcurre pues en algún momento de esa primera mitad de la primera década del siglo XX, una época que muchos especialistas consideran históricamente como perteneciente al siglo XIX que se prolongaría hasta 1914 y el inicio de la Gran Guerra.
Toda la historia de "El último verano" se cuenta mediante las cartas escritas entre los miembros de la familia Rasimkara, así como las escritas por Liu, al que se ha contratado como secretario del padre, a su amigo Konstantin. Aunque el pretexto de la presencia de Liu en la casa de verano de los Rasimkara es ayudar al padre, en realidad está allí como protector ya que la madre teme un atentado contra la vida de su marido. Liu es un encantador de serpientes que, aunque enseguida se nos muestra con todas sus nefastas intenciones, tiene a la familia cautivada. "Ha llegado el ángel de la guarda. Mamá está convencida de que tiene el don de apartar de papá y atraer hacia sí cualquier veneno, arma, cartucho de dinamita o desgracia, y lo aprecia infinitamente. Pensábamos que sería un hombre de barba ancha, corpulento y con un discurso arrogante, pero en lugar de eso es un joven delgado, bien afeitado y tan discreto como un inglés".
La familia Rasimkara está formada por el padre, Yegor, que ostenta el cargo de Gobernador, su mujer Lusinia, y sus tres hijos, un joven, Velia, y dos muchachas, Yéssika y Katia. Además de este núcleo familiar que pasa el verano en su residencia de Kremskoie, están la tía Tatiana, hermana de Yégor, y su hijo Peter en la cercana ciudad de San Petersburgo. Entre estos siete personajes se irán intercambiando las cartas a lo largo del verano. Así iremos sabiendo de los altercados estudiantiles que han llevado a Yégor a cerrar la universidad, a detener a los más destacados rebeldes alguno de los cuales incluso está condenado a muerte. Es por estos acontecimientos por lo que Lusinia teme por la vida de su marido, ya que el clima en Rusia en esos días es muy proclive a atentados y todo tipo de violencia (no olvidemos que en 1905 tuvo lugar la primera revolución en Rusia que terminaría cristalizando en la definitiva de 1917). Llegarán además amenazas explícitas al gobernador: "[...] si no perdonan la vida a Demodov y al resto de estudiantes, la muerte de papá los seguirá o los precederá a la tumba" le cuenta Velia a su hermana Katia que se ha ido a San Petersburgo a visitar a su tía Tatiana.
Las cartas nos mostrarán también el carácter de los personajes en un retrato excepcional que se va dibujando por lo que escriben y les escriben. Cada personaje, sobre todo el matrimonio y sus tres hijos, terminará siendo conocido en sus grandezas y miserias por el lector que pronto distinguirá la valentía despiadada de Yégor, el aprecio egoísta de Lusinia, la bondad indolente de Velia, el desprecio rencoroso de Katia y la inocencia ingenua de Yéssika. Y es que, al decir de Cecilia Dreymüller en un maravilloso prólogo que recomiendo leer al final, "Raras veces se encuentran unos personajes tan ricos esbozados con tan pocas pinceladas".
También aparecen los criados, como sombras espectrales, fieles a unos amos a los que temen a la vez que respetan, aunque tal vez temor y respeto no sean en el entorno de la novela más que dos caras de una misma moneda. La familia confía ciegamente en ellos y saben que si hay peligro para el padre, nunca vendrá de la servidumbre. "La servidumbre está compuesta por un cochero llamado Iván, que bebe y a quien Velia llama «abuelito», y tres criadas; son gentes de la Vieja Rusia, que todavía se sienten como siervos y adoran a sus amos, pero que en el fondo los juzgan con una supremacía inconsciente, porque están más cerca de los orígenes. Son seres bondadosos que me infunden un cierto respeto, como los animales". El desprecio que destilan estas palabras de Liu a su amigo Konstantín sirven también para el retrato de este personaje. Las cartas de Liu nos lo revelan como un hombre cuyos presuntos ideales disfrazan sus ansias de manipular y demostrar su poder.
Konstantín nunca contesta. No hay cartas de Konstantín y si sabemos de su opinión y de sus palabras es tan solo por el relato de Liu en sus cartas: "dices", "tu carta". Tampoco Peter escribe cartas. Él las recibe de su primo Velia y de su prima Katya. Por ellas sabemos que ha sido uno de los estudiantes instigadores de la revuelta "¡Qué tontería eso de cerrar la universidad! Yo estaba en lo cierto cuando recomendaba calma: era fácil de prever que, en caso de conflicto, nos llevaríamos la peor parte. Pero tú, naturalmente, tenías que lanzarte como un desenfrenado, de manera que ha sido por pura casualidad que mi padre no te ha mandado a la horca". También sabemos que está enamorado de Katya, aunque esta lo ve solo como a un amigo y pariente muy querido.
La trama, contada en exclusiva mediante las cartas, se va desarrollando ante nuestros ojos con exactitud matemática. Liu, como maestro de ceremonias nos va acompañando por los caminos que él mismo ha trazado y el final se va desarrollando ante nosotros mientras la tensión crece y vamos buscando el detonante que hará llegar la historia a su irremediable final, y el detonante llega y nos quedamos sobrecogidos ante la belleza del recurso.
Ricarda Huch (1864-1947) |
Ricarda Huch era para mí una autora totalmente desconocida hasta que me encontré una reseña de este libro, más bien un pequeño comentario, que me cautivó. Fue en el blog de Esther, Con vistas al horizonte. Si os pasáis por allí, descubriréis una curiosa anécdota sobre la autora. Ricarda Huch fue sobre todo poeta, historiadora y filósofa en la Alemania de la primera mitad del siglo XX. Según Cecilia Dreymüller en el citado prólogo fue la primera mujer alemana con un doctorado en Historia, admirada por los escritores más prestigiosos de la época como Stefan Zweig, Hermann Hesse o Thomas Mann, candidata al Premio Nobel.
No es extraña su formación como historiadora. En este libro ha sabido rodear la vida de la familia de un ambiente que destila historia y acontecimientos históricos, un ambiente además que se cuenta únicamente por medio de cartas y un ambiente que resultó premonitorio de lo que iba a venir. "La bullente atmósfera previa a las revueltas y revoluciones sociales que se preparan en toda Europa es captada a la perfección por la autora, cuyo instinto –al ser historiadora de formación mejor sería decir clarividencia– para los cambios que se preparaban es impresionante (El último verano fue escrito en 1905)".
No sé si leeré algo más de esta Ricarda Huch. Tiene alguna novela aparte de "El último verano", pero ni siquiera en la Biblioteca Central de Santander ni en Amazon; ni en novela ni en ningún otro género, he visto más obra traducida de la autora. Una lástima porque me encantaría leer "Der Fall Deruga", una novela de ambiente judicial ambientada en el Múnich anterior a la Gran Guerra.
Esta novela entra en el IV reto "Nos gustan los clásicos" por estar publicada antes de 1980. "El último verano" está publicada en 1910.
Esta novela entra también en el II reto "Cabalgando entre clasicos" por estar publicada antes de 1970.
Autora: Ricarda Huch
Nacionalidad: Alemania
Título original: Der letzte Sommer
Nacionalidad: Alemania
Título original: Der letzte Sommer
Traducción: Carmen Colomines y Christian Frisch
Editorial: Duomo
Año de publicación: 2019
Año de publicación original: 1910
Nº de páginas: 160
Una introdccion que deja ganas de leer lo que comentas. En el silencio de una lluvia que no para, trato de buscar libros que me den ganas de seguir leyendo .
ResponderEliminarPues si lees la reseña igual te animas con este.
EliminarCiertamente me ha intrigado conocer esta atractiva novela creada a través de un compendio epistolar que desde luego contiene un argumento bastante bien elaborado por lo que he deducido de tu reseña y lo mejor de todo es la calidad narrativa de esta autora interesada por el romanticismo alemán y con una gran formación académica.
ResponderEliminarGracias, Rosa por darme a conocer a una autora tan importante dentro del mundo literario.
Un beso.
Muy importante y muy desconocida. El hecho de que escribiera muy poca novela y bastante obra especializada en Historia y Filosofía, imagino que ha hecho que no sea muy conocida, pero esta novela ya vale todo el prestigio que pueda tener. Es curioso cómo a base de cartas se puede hacer una narración tan rica en ambientación y acontecimientos, y profundizar tanto en los personajes. Es fabulosa de verdad.
EliminarUn beso.
Gracias por la cita y me alegro que te haya gustado. Un abrazo!
ResponderEliminarGracias a ti por el descubrimiento, Esther. Ha sido un hallazgo de los que no se hacen todo los días. Lástima que no encuentre más obra traducida suya.
EliminarUn beso.
Creo que hay muchas maneras de despreciar y hacerse notar en el habla. Me hadado rabia. Supongo que cómo toda buena historia narrada desde la historicidad, habrá algún sentir de vida. He leído muy pocos libros históricos. Así que me ha gustado verlo en tu blog. Un saludo!!
ResponderEliminarEs un gran libro en el que a base de cartas y con las palabras de los personajes, se dicen y se muestran muchas cosas. Desprecio, pero también amor, celos, rencor, indiferencia, frustración. Aparte de eso, el trasfondo histórico es sumamente interesante.
EliminarUn beso.
Confieso mi desconocimiento total tanto de la novela como de la autora, pero me gusta lo que cuentas y, además, el género epistolar me gusta muchísimo y hace demasiado tiempo que no leo nada de él. Le voy a dar una vuelta. Gracias por la reseña.
ResponderEliminarBesos.
Pues si te gusta el género epistolar, seguro que esta novela te va a gustar también. Es una novela en la que los personajes son muy importantes y además tienen la peculiaridad de que se construyen a partir de las cartas que envían. También lo que se cuenta es importante y el conjunto, da lugar a una novela realmente notable.
EliminarUn beso.
Hola Rosa, no conocia a la autora, pero me llama mucho la época en la que se desarrolla y me encanta el género epistolar, así que me la apunto. Leyendo la " publicidad" de la editorial dice que la escritora está a la altura de Dostoievski. A ti te parece que es así?. Besinos.
ResponderEliminarDe Dostoievski solo he leído "Crimen y castigo" y hace ya muchos años, por lo que me costaría hacer una comparación. Además al ser epistolar y mucho menos densa, creo que no es muy fácil comparar, aunque ya te digo que no conozco tanto a Dostoievski como para comparar. Lo que sí puedo decir es que esta novela resulta de lo más interesante y adictiva.
EliminarUn beso.
Me sucede un poco como a ti en el terreno del género epistolar si es que pudiera llamarse así. También me pasa con los libros escritos en forma de diario. Hay algo seductor en esta forma de escribir y creo que despierta la curiosidad en el lector. No conocía a la escritora, pero la época en la que está narrada me llama mucho la atención. Esa transición entre siglos pudo marcar la historia tanto como lo hizo la Segunda Guerra Mundial.
ResponderEliminarBesos, Rosa y buena semana.
Pues fíjate que a mí, son géneros que me dan un poco de pereza. Y eso que las novelas de género epistolar que he leído me han gustado siempre mucho. Creo que después de "El último verano" no me volverá a pasar. También a mí me atrajo mucho la época y el lugar en que se ambienta. Ese 1905, con las revueltas en Rusia, que sería el prólogo a la Revolución de 1917, una época que supuso el fin de tantas cosas en Europa. Desde luego, no me he sentido defraudada en absoluto. Es más, tiene un componente, que no me esperaba, que ha hecho que me guste más aún.
EliminarUn beso.
Hola,
ResponderEliminarme has picado la curiosidad. Lo cierto es que aunque el nombre me sonaba no sabía de qué iba la novela hasta que te he leído. Es una firme candidata a mi lectura cuando baje un poco mi lista de pendientes.
Un beso
Seguro que te gusta y no te arrepientes de haberla incluido en tu lista. la verdad es que yo la pasé por delante de todas porque me dio muy buen pálpito. Ahora sé que mi pálpito fue acertado y que la novela lo merescía.
EliminarUn beso.
Según iba leyendo tu reseña me decía, yo creo que esta reseña ya la he leído o me suena muchísimo pero cómo va a escribir Rosa dos veces sobre la misma novela... Luego al leer los comentarios veo que agradeces a Esther que te la recomendase. O sea que fue en el blog de Esther donde leí sobre la novela. Como a ti me pareció interesante y me la apunté pero no tengo tu ritmo lector y ahí está, apuntada, esperándome.
ResponderEliminarUn beso
Ando despistada, pero no tanto como para escribir dos reseñas sobre el mismo libro, aunque en Sin reseña, ya me he visto escribiendo sobre un libro y he de pronto me he dado cuenta de que ya lo había hecho en la entrega anterior.
EliminarTe la recomiendo de veras. Sé que te va a gustar y encima no es larga y se lee muy fácil porque engancha.
Un beso.
¡Hola Rosa!! antiguamente tenía el tonto prejuicio de pensar que las novelas de género epistolar no me atraían , que se me podía hacer aburrido, pero fue leer "La sociedad literaria y el pastel de piel de patata de Guernsey" y "84 Charing cross road", ambas narradas en forma de cartas y darme cuenta de que era eso, un simple prejuicio (por cierto, aprovecho para recomendarte estas dos joyitas literarias si no las has leído)
ResponderEliminarAsí que por lo que cuentas puede que esta novela me guste (me has dejado intrigada con el personaje de Liu, parece muy misterioso). ¿Sabes? da rabia ¿verdad? de repente encontrar a un autor que te gusta y no encontrarte con más novelas suyas traducidas, alguna vez me ha pasado
Un beso
Síiiii, he leído "84 Charing cross road" y me encantó y también "La sociedad literaria y el pastel de piel de patata de Guernsey" que también me gustó mucho. Como he dicho más arriba, las novelas de género epistolar me daban algo de pereza, pero tras estas tres experiencias tan fabulosas, creo que no me vuelva a pasar.
EliminarCreo que esta novela te gustará y hasta te enganchará. Yo la he disfrutado un montón. Y sí, da mucha rabia que no se traduzcan novelas de autores que conoces y que te gustan mucho y a los que te gustaría seguir frecuentando. habrá que esperar a ver si alguna editorial se anima.
Un beso.
Lo tuve apuntado en su momento pero terminé reculando, me pesa mucho que sea epistolar aunque, ahora, al verlo de nuevo leyendo tu opinión, veo que sigue siendo un libro que me atrae.
ResponderEliminarBesos
Yo creo que merece la pena. Ya digo que a mí el género epistolar se me hacía un poco raro, pero las tres novelas que he leído por ahora (al menos recientemente; puede que haya leído más y no las recuerde), me han encantado. Este libro es muy atractivo. Yo en cuanto leí sobre él lo apunté y lo por delante de todos.
EliminarUn beso.
Hola.
ResponderEliminarAdoro el género epistolar y me ha gustado saber que fue la primera mujer alemana con un doctorado en historia.
Es una pena que no encuentres más obras de ella, una verdadera pena.
Como siempre una reseña estupenda.Feliz día.
Léelo, Gemma, creo que te gustará. Tiene todos los ingredientes para atraer y tratados con gran sensibilidad. Sí que es una pena. Ojalá alguna editorial traduzca alguna otra novela suya. Tampoco tiene demasiadas, fue sobre todo ensayista y poeta.
EliminarUn beso.
A mí las novelas de género epistolar también me gustan mucho y esa ambientación histórica que comentas es muy atractiva. Tomo nota, Rosa porque me ha encantado todo lo que cuentas. Un beso.
ResponderEliminarMe alegro de que te haya gustado Marta. La época histórica es apasionante y el lugar, esa Rusia iniciando las revueltas que llevarían a la Revolución, fascinante. Por no hablar de la historia en sí y la forma de contarla.
EliminarUn beso.
¡Hoooola!
ResponderEliminarPues no conocía ni el libro ni a la autora, pero desde luego que después de leer tu reseña me quedo con mucha curiosidad.
Hace mucho que no leo nada epistolar y me encanta que el libro esté contado a través de cartas, es algo que me apetece mucho. Encima bueno, si es la historia de una familia y tiene tantos personajes -criados incluidos, que siempre dan mucho salseo- y con tintes históricos... es que si, es el tipo de lectura que creo que ahora mismo me vendría de perlas :D
¡muchos besos!
PD: no conocía tu blog pero desde ya tienes una nueva seguidora ;)
Los criados no salen mucho, pero sí lo justo para tener una idea de la mentalidad de siervos que aún les quedaba desde que en 1861 se abolió el sistema de servidumbre.
EliminarLa novela se lee con auténtico gusto porque engancha y además no es demasiado larga. Parece mentira la de cosas que se pueden contar solo mediante cartas.
Un beso.
Pues sí, la forma epistolar en la que está escrita esta novela es algo que a mí también me resulta muy atractivo. pues se describe mucho mejor el carácter de los protagonistas, a quienes se va conociendo por sus propias palabras y su forma de pensar.
ResponderEliminarAl principio creí que la autora era de origen ruso o que había vivido en Rusia durante esa epoca en la que se desarrolla la trama. Pero siendo historiadora, no es de extrañar que pudiera conocer e incluso prever los acontecimientos presentes y futuros que tendrían lugar en ese país.
Resulta extraño que no se haya publicado ninguna otra obra suya traducida al castellano. Si deseas leer algo mas de esta autora tendrás, pues, que aprender alemán, je,je.
Un beso.
Ja, ja. No me veo yo aprendiendo alemán y eso que es un idioma que me gusta mucho como suena (a pesar de Hitler), pero sospecho que es muy difícil y mi tiempo es para otras cosas. Mejor espero a que alguna editorial decida traducir alguna otra novela.
EliminarA mí también me costaba imaginar que la autora no era rusa y de hecho lo comprobé a poco de empezar la lectura. Es cierto que al ser historiadora y estar en aquella época, tuvo más facilidad para ver lo que se venía encima.
Es una novela que engancha por el tema y arrastra por la forma porque las cartas, al no ser muy largas, hacen que termines una y sientas necesidad de seguir con otra. Yo me lo leí en dos tardes. Muy recomendable.
Un beso.
El género epistolar siempre me ha resultado atractivo. Que una historia se construya con unas cartas es una manera estupenda de escribir. Me apunto la autora y la obra.
ResponderEliminarUn beso.
Te gustará. Es una historia muy interesante, escrita y ambientada en un momento de la Historia también muy interesante. Los personajes son geniales y están dibujados solo con las cartas que escriben. la trama es también muy buena y el final... hay que leerla.
EliminarUn beso.
¡Hola, Rosa! Me encanta visitar tu blog y encontrar este tipo de lecturas, tan interesantes y con todos los ingredientes para engancharnos de principio a fin. Lo que más me llama la atención es el género epistolar, que estoy segura hará de ésta, una lectura inolvidable. Gracias por la reseña. ¡Un besito!
ResponderEliminarEsta es una lectura inolvidable y no solo por el género epistolar. La propia historia es buenísima aunque es cierto que una forma de contarla menos buena podría haberla destrozado. Aquí se junta todo y el resultado es magnífico.
EliminarUn beso.
Ay, epistolar. Si pienso en el género , inmediatamente me viene a la cabeza 84, Charing Cross Road. Me encantó. Veo que puede ser un libro de los que se devora en la lectura. Y ese titulo, tan evocador. Me gusta lo que cuentas, así que lo voy a tener muy en mente. Besos
ResponderEliminar"84, Charing Cross Road" es una magnífica novela que me hizo darme cuenta de que el género epistolar tenía mucho que ofrecer. Luego leí "La sociedad literaria y el pastel de piel de patata de Guernsey" y terminé por perderle el miedo a este género. Con esta novela he terminado con mis reticencias si es que me quedaba alguna. Una novela notable que recomiendo sin dudar.
EliminarUn beso.
¡Hola, Rosa! Un libro muy atrayente. El género epistolar es maravilloso a nivel narrativo por cuanto permite con naturalidad que ese narrador múltiple con el que el autor puede desarrollar la trama a través de las miradas parciales de cada personaje, enfocar la historia enriqueciéndola con los distintos puntos de vista. Quizá, la novela que más me llamó la atención en este sentido fue La piedra lunar de Wilkie Collins, absolutamente magistral. Lamentablemente, es un género que hoy día es complicado de escribir, al menos como cartas. La generación de menos de treinta años seguramente no ha escrito ni recibido ninguna en su vida. Habría que renovarlo con las nuevas tecnologías, pero miedo me da qué libro podría salir a base de whatsaps, tuits, tictocs, etc... Una de las cosas que estamos perdiendo lamentablemente: recibir una carta de alguien en tu buzón. Anotada queda!! Un fuerte abrazo!
ResponderEliminarHay un escritor de Ponferrada que escribe ciencia ficción y lo hace por medio de mails, noticias de radio y periódicos, llamadas telefónicas y ahora no recuerdo si hay WhatsApp. Lo que sí creo que hay cmson SMS. Es un autor interesante y creo que te gustaría.
EliminarAhora que me lo has recordado es cierto que "La piedra lunar" es también de género epistolar. La leí hace mucho y no me acordaba.
"El último verano es una novela magnífica, con su intriga incluida, con un diseño elegante para contar la trama a base de cartas y con un final que me sobrecogió. Para no dejarla pasar.
Un beso.
Recuerdo que Esther mencionó este libro en una de sus entradas y que ya me llamó la atención.
ResponderEliminarNo he leído nada de la editorial Doumo. No sé por qué, pero sus libros a la par de llamarme la atención hay algo en ellos que me dice que no son para mí. Manías mías. Tendré que leer alguno para juzgar con criterio. Este casi lo leería por la portada, dan ganas de sumergirse en ese verde. Aunque creo que lo leería más por lo que cuentas de la autora y por lo atractivo del género epistolar.
Besos
Se ve que algo dijo Esther en su entrada que nos llamó la atención sobre esta novela. Yo no conocía obra ni autora, pero la apunté rápidamente y pasó por delante de toda la lista. Puedo asegurar que no me arrepiento. Seguramente te gustará.
EliminarUn beso.
Hola Rosa!! Me picas mucho la curiosidad por este libro, tomo buena nota. ¡Gran reseña, como siempre! Besos!!
ResponderEliminarUna novela muy buena, sencilla en la forma, pero con mucha miga en el contenido. Y que se lee muy bien porque unas cartas llevan a otras.
EliminarUn beso.