"La abadía de Northanger" Jane Austen.

A pesar de que se publicó por primera vez en diciembre de 1817, de manera póstuma (Jane Austen había muerto en julio de ese mismo año), "La abadía de Northanger" fue una de las primeras novelas finalizadas por la autora. Parece ser que se escribió entre 1798 y 1799. Según su hermana Cassandra, la novela se tituló en un principio "Susan" y aunque ya había sido vendida para su publicación en 1803, no llegó a publicarse hasta catorce años después.

Antes de tener esta novela lista para la imprenta, la autora ya había empezado a escribir "Sentido y sensibilidad" y "Orgullo y prejuicio", novelas que alcanzarían mucha más fama antes de que "La abadía de Northanger" se hubiera publicado. Fama que ha perdurado hasta ahora dejando a esta última como una de sus obras menores. 

Y, sin embargo, para nada me ha parecido menor esta novela. Tal vez no tiene una trama tan elaborada como las mencionadas o "Persuasión" o lo que la inacabada "Sanditon" promete; puede que sus personajes sean demasiado estereotipados: los buenos, muy buenos; los malos, odiosos; todo eso puede ser cierto, pero ofrece un análisis de las relaciones humanas de la época tan cruel y certero que llega a sobrecoger cuando una se pone en la piel de la protagonista.

"Nadie que hubiera conocido a Catherine Morland en su infancia habría imaginado que el destino le reservaba un papel de heroína de novela. Ni su posición social ni el carácter de sus padres, ni siquiera la personalidad de la niña, favorecían tal suposición. Mr. Morland era un hombre de vida ordenada, clérigo y dueño de una pequeña fortuna que, unida a los dos excelentes beneficios que en virtud de su profesión usufructuaba, le daban para vivir holgadamente. [...] Los Morland siempre fueron considerados una familia admirable, ninguno de cuyos miembros tenía defecto físico alguno; sin embargo, todos carecían del don de la belleza, en particular, y durante los primeros años de su vida, Catherine, que además de ser excesivamente delgada, tenía el cutis pálido, el cabello lacio y facciones inexpresivas. Tampoco mostró la niña un desarrollo mental superlativo". Puede que la niña no tuviera las características de una heroína de novela, pero tal vez ese escaso desarrollo mental y sus limitados dones estéticos la hacían idónea para ser una víctima de novela lo que al fin y a la postre viene a ser lo mismo. No hay mayor heroína que la que sufre debido a las circunstancias y por lo tanto es a la vez víctima de las mismas.

Catherine Morland no había tenido oportunidad de despertar su corazón no ya al amor, ni tan siquiera la atracción había anidado en su ánimo. Tal vez fuera la causa la ausencia de jóvenes de su edad en la comarca aparte de sus tres hermanos mayores. Por eso cuando al señor Allen le recomiendan tomar las aguas en la ciudad de Bath, "su esposa, una dama muy corpulenta pero de carácter excelente, comprendiendo sin duda que cuando una señorita de pueblo no tropieza con aventura alguna allí donde vive, debe salir a buscarlas en otro lugar, invitó a Catherine a que los acompañase". 

En Bath, Catherine se abrirá al mundo por primera vez. Conocerá la amistad y conocerá el amor, y, como joven inexperta que solo ha tratado con los miembros de su familia, se verá sometida al engaño de amigas y pretendientes, al interés de quien la cree más adinerada e importante de lo que es, a la ilusión de su propia juventud inocente y entusiasta. También conocerá personas sinceras  y bienintencionadas. En una palabra, se verá sometida a todo tipo de personas, a intereses espurios y a sentimientos generosos. 

Aunque no será ella la única que caerá en las trampas que le van poniendo en el camino gentes más calculadoras. Su hermano James, estudiante en Oxford, y más hecho a los mundanos lazos con que el destino enreda a las personas inocentes, también será seducido por las hermosas palabras y estará a punto de verse metido en uno de esos problemas que se arrastran de por vida. Al menos se arrastraban en aquella época.

Dos serán las familias con las que entablará relación y que representan distintas maneras de ver la amistad y el amor. La señora Thorpe es una antigua amiga y compañera de colegio de la señora Allen. Está en Bath con sus hijas y con la mayor de ellas, Isabella, conocerá Catherine la experiencia de la amistad.  Por su parte, John Thorpe se presentará días después acompañado de James, el hermano de Catherine, del que es, a su vez, amigo.  John Thorpe será el primer pretendiente de Catherine. John e Isabella Thorpe serán la cara menos amable de las relaciones humanas que la joven tendrá que conocer en su primera salida al mundo. Dominantes, pagados de sí mismos, con tan alta estima de sus propias personas que no serán capaces de reparar en lo que los demás les podrían ofrecer, tan solo en lo que ellos, de manera más o menos forzada, pueden tomar.

La otra familia, los Tilney, también está representada por una hermana y un hermano, así como por el padre de ambos. Por el joven Tilney se sentirá atraída Catherine y la amistad de Miss Tilney le deparará más alegrías y más sinceridad que la de Isabella Thorpe. "Miss Tilney poseía un rostro de facciones agradables y una bonita figura, y si bien carecía de la arrogante belleza de Isabella, resultaba, en cambio, más distinguida que ésta. Sus modales eran refinados y su comportamiento ni excesivamente tímido ni afectadamente fresco, con lo cual resultaba alegre, bonita y atractiva". Aunque no todo sea tampoco fácil con esta familia.

Jane Austen

No es "La abadía de Northanger" el libro de Jane Austen que más me ha gustado, pero sí en el que he encontrado personajes más odiosos. Personajes que se venden a sí mismos alardeando de las virtudes de las que más carecen, que pregonan amor y amistad cuando solo los empuja el interés y el egoísmo. "Tú, que me conoces, sabes que llevo mi concepto de la amistad más lejos que la generalidad de la gente". Todo en este ser ruin, caprichoso y engreído va más allá que en el común de los mortales y sin embargo, tan solo su vanidad y prepotencia está por encima de la media. 

También he encontrado por primera vez en la autora ciertos rasgos del género de terror y gótico. La abadía de Northanger, a la que los Tilney invitan a Catherine y que la joven tanto ansía conocer influida por sus lecturas góticas, esconde misterios que puede que solo estén en la imaginación de la joven, pero que no por ello dejan de inspirarle temor. "¿Cómo explicarse la presencia de un manuscrito hallado en forma tan extraordinaria, y qué, además, coincidía de modo tan prodigioso con la descripción hecha por Henry unas horas antes? ¿Qué podría contener aquel rollo de papel? ¿A qué se refería? ¿Cómo habría permanecido oculto tanto tiempo? Y ¡cuan extraño resultaba que fuese ella la llamada a descubrirlo! Hasta que no estuviese al corriente de su contenido no podría recuperar la calma".

No se priva Jane Austen de criticar a los muchos que por aquella época consideraban la novela un género menor apto tan solo para jovencitas impresionables. Y lo hace de varias maneras, incluso metiéndose ella misma en la novela y dirigiéndose al lector. "Novela, sí. ¿Por qué no decirlo? No pienso ser como esos escritores que censuran un hecho al que ellos mismos contribuyen con sus obras, uniéndose a sus enemigos para vituperar este género de literatura, cubriendo de escarnio a las heroínas que su propia imaginación fabrica y calificando de sosas e insípidas las páginas que sus protagonistas hojean, según ellos, con disgusto". En más ocasiones se dirige la autora al lector, aunque eso ya se había visto en otras obras suyas.

"La abadía de Northanger" no es la mejor novela de Jane Austen, pero es necesaria su lectura para los amantes de la autora, para los que queremos conocer al máximo su obra y tener de ella una idea de conjunto. Y, por supuesto, no deja de ser interesante leer la primera novela que la autora tuvo lista para la imprenta, aunque fuera una de las últimas en ser publicadas.

Título del libro: La abadía de Northanger

Autora: Jane Austen
Nacionalidad: Reino Unido
Título original: Northanger Abbey

Traducción: Miguel Ángel Pérez Pérez

Editorial: Alianza

Año de publicación: 2016

Año de publicación original: 1817

Nº de páginas: 336