Febrero 2019
En el hospital del orfanato —la sección niños de St. Cloud’s, en Maine— dos enfermeras
eran las encargadas de dar nombre a los nuevos bebés y de verificar que sus
pequeños penes cicatrizaran después de la obligada circuncisión. En aquellos
tiempos (192-), se circuncidaba a todos los niños nacidos en St. Cloud’s porque durante la primera
guerra mundial el médico del orfanato había tenido dificultades, por un motivo
u otro, en el tratamiento de soldados no circuncisos. El médico, que también
ocupaba el cargo de director de la sección niños, no era un hombre religioso;
para él la circuncisión no era tanto un rito como un acto estrictamente clínico
que se ejecutaba por razones higiénicas. Se llamaba Wilbur Larch y siempre evocaba en una
de las enfermeras —si exceptuamos el aroma a éter que constantemente lo
acompañaba— la madera resistente y perdurable de la conífera del mismo nombre.
Sin embargo, la enfermera detestaba el ridículo nombre de Wilbur y se horrorizaba
ante la estupidez de haber combinado semejante nombre con algo tan sólido como
un alerce.
"Príncipes de Maine, reyes de Nueva Inglaterra", de John Irving, es una de las historias más emotivas y hermosas que he leído o visto en cine.
Homer Wells nació en St. Cloud's, un pueblo de Maine, en Nueva Inglaterra, en la costa este de Estados Unidos. Y nació en el orfanato que dirigía Wilbur Larch. No estaba solo el doctor en esa tarea. Le acompañaban "Enfermera Edna (que estaba enamorada [del doctor]) y Enfermera Angela (que no lo estaba)", y lo consideraban tan buena persona que entre ellas, cariñosamente, le llamaban San Larch.
Aunque la huella de Dickens está muy presente en la novela, nada que ver este refugio de niños huérfanos con los que se describen en las obras del escritor inglés.
Wilbur Larch quiere a sus niños, les lee por la noche "Grandes esperanzas" y "David Copperfield" y, cuando se despide de ellos, siempre lo hace con las mismas palabras: ¡Buenas noches, príncipes de Maine, reyes de Nueva Inglaterra! Y es que para él, sus niños, y sobre todo Homer, son reyes y príncipes por derecho propio y con todos los derechos. "A veinte minutos por noche, al Dr. Larch le llevó varios meses leer Las grandes esperanzas y más de un año la lectura de David Copperfield, momento en que San Larch anunció a Homer que empezaría otra vez por el principio de Las grandes esperanzas. A excepción de Homer, los huérfanos que habían escuchado la primera versión de Las grandes esperanzas ya no estaban en St. Cloud’s".
No, Homer Wells nunca consiguió ser adoptado por lo que toda su infancia y gran parte de su juventud la pasó en el orfanato escuchando "David Copperfield" y "Las grandes esperanzas", y aprendiendo de Wilbur las técnicas quirúrgicas cuando tuvo edad para ello, porque el doctor, fiel a su máxima de que en cualquier situación hay que ser útil, sin demasiadas preguntas, sin demasiados remilgos, sin plantearse nada más allá que aquello que se debe hacer para ser útil, tiene una actividad secundaria en su institución.
Wilbur no solo acoge en su orfanato a los niños que allí son abandonados, también libera a las madres de sus embarazos no deseados porque cree que es mejor cortar los males de raíz que acumular en su institución niños que nadie quiere y que siempre se sentirán, de alguna manera, rechazados.
Cuando Homer se entere de esta faceta del trabajo de su mentor, tendrá dudas y escrúpulos, y decidirá abandonar el orfanato para descubrir qué hay más allá de aquellos muros vetustos y de las alas protectoras de Wilbur y de las enfermeras.
John Irving siempre trata de huir de lo políticamente correcto y sabe dar a los temas que trata una profundidad que nos hace pensar mucho. No defiende ni condena el aborto, porque el aborto no es algo de lo que se pueda estar a favor, pero tampoco se puede estar en contra, salvo por sectarismos religiosos o ideológicos que a ninguna parte llevan. El aborto solo es algo que en algunas ocasiones, es útil, es práctico, es el mal menor.
Michael Caine como Wilbur Larch |
Cuando vi la película conocía muy poco al autor. Había leído "Una mujer difícil" y "El mundo según Garp", pero me gustó tanto la película, sin saber que estaba basada en una de las obras de John Irving, que cuando lo descubrí, con motivo del Oscar, la compré y ya me hice adicta al autor al que he seguido y del que he leído casi toda su obra.
Con excepción del éter, Homer Wells sabía que el corazón de Wilbur Larch tenía muy pocos defectos.
Para Enfermera Edna, que estaba enamorada, y para Enfermera Angela,
que no lo estaba (pero que en su sabiduría había dado nombre tanto a Homer Wells como a Fuzzy Stone), no había defectos
en el corazón del Dr. Stone ni en el del Dr. Larch, que eran —si alguna vez los hubo— príncipes de Maine, reyes de
Nueva Inglaterra.
Las novelas que aparecen en esta sección, "Bienvenido nuevo mes literario", no están recién leídas, pero están leídas. Se trata de novelas con las que quiero comenzar cada mes, Cada entrada comienza con el principio del libro y termina con su final. No pretende ser una reseña, sino el comentario sobre una historia que me marcó lo suficiente como para poder hablar de ella aunque haga ya muchos años que la leí. Por ello, espero que me perdonéis si incurro en algún error.
Título del libro: "Príncipes de Maine. Reyes de Nueva Inglaterra"
Título original: "The cider house rules"
Autor: John Irving
Traducción: Iris Menéndez Sallés
Editorial: Tusquets
Año de publicación: 1985
Año de publicación original: 2000
Nº de páginas: 628
Título original: "The cider house rules"
Autor: John Irving
Traducción: Iris Menéndez Sallés
Editorial: Tusquets
Año de publicación: 1985
Año de publicación original: 2000
Nº de páginas: 628
Solo empezar a leer el argumento me he dicho: caramba, si eso me suena a la película "Las normas...". Y como que es la misma historia, jeje. Una película que he visto dos veces y me ha resultado preciosa, por lo cual la novela lo tiene que ser igual o más.
ResponderEliminarLo que no me ha quedado claro es lo que comentas de su título. Dices que "Las normas de la casa de la sidra" es la traducción literal del título original de la novela. Entiendo, pues, que el autor (o quién fuere) cambió su título tras haberla publicado. ¿Tienes idea del porqué?
Un beso.
Yo creo que "Príncipes de Maine..." es el título que le dio Tusquets a la edición española a la novela. Si te fijas en la ficha que añado al final, el título original del libro es "The cider house rules".
EliminarLa película es preciosa, como dices y, al menos para mí, la novela lo es más aún. John Irving es uno de mis autores favoritos junto a Joyce Carol Oates. Eso por nombrar solo un par de los que siguen vivos.
Un beso.
No he leído la Irving, pero sí que he visto la película Las normas de la casa de la sidra y no me disgustó. Tendré que leer algo del autor.
ResponderEliminarBesos
Yo lo tengo entre los autores de referencia. Nunca me pierdo una de sus novelas. Unas me gustan más que otras, pero siempre mantienen una calidad excepcional.
EliminarEsta y "La última noche en Twisted River" son lo mejor que le he leído y de lo mejor que nunca he leído.
Un beso.
Yo tengo por casa uno de sus títulos, “Una mujer difícil”, sin embargo no me he estrenado con J. Irving. Leída tu reseña de este libro y película basada en él, (la vi hace tiempo, y creo que la tengo en DVD)… ¡casi me dan ganas de salir corriendo a por esta novela!
ResponderEliminarComparto tus palabras sobre el aborto, lo has expresado con mucho juicio. Y soy padre de dos niñas pequeñas.
Por cierto, todavía conservo mi David Coppefield, de la Colección Nuevo Auriga de AFHA, mi madre me iba comprando algunos títulos de dicha colección, siendo un chiquillo de siete u ocho años, me fascinaban sus portadas con esas grandes ilustraciones a color, y los leía como un poseso, jaja. Los he conservado, ahora los tiene mi hija mayor, y le encantan (los leemos muchas veces).
Beso y buen finde, amiga Rosa.
Casualmente "Una mujer difícil" fue la primera novela que leí del autor. La había visto en las librerías y entre el título y la portada, me había parecido una novela romántica en la que no había reparado, pero entonces una amiga me la recomendó y me la prestó. ¡Cuán engañosos son los prejuicios y las primeras impresiones! Me encantó la novela y después leí "El mundo según Garp" y vi esta película y no me he podido volver a despegar del autor.
EliminarSobre el aborto se hace mucha demagogia y se dicen muchas barbaridades. Hay quien lo ensalza y hace del tema bandera, como si fuera algo buenísimo cuyo derecho hay que exigir. Otros lo tachan de asesinato con gran alarde de argumentos torticeros. Yo creo que es algo a lo que una mujer tiene derecho, sabiendo que es un mal menor por el que probablemente tendrá que pagar un precio en nostalgia, en recuerdo y hasta, en el peor de los casos, de arrepentimiento. Lo dicho, un mal menor del que no hay que hacer panacea, pero tampoco demonizarlo.
Fíjate que no he leído "Las Grandes esperanzas". "David Copperfield" sí, aunque creo que era una edición juvenil.
Un beso.
Buenos días Rosa.
ResponderEliminarLlevo tiempo sin aparecer por aquí y después de leerte me voy con una recomendación que me agrada.
Empezaré por la película que me resulta muy apetecible para este fin de semana.
Gracias amiga.
Un beso.
Pues envidio tu fin de semana y el visionado inicial de esta película. Yo la veré en breve (tras escribir esto me entraron muchas ganas), pero ya por tercera vez y no es lo mismo. carece de la sorpresa inicial, pero supone el cálido encuentro con algo conocido y querido. Disfrútala. Lo merece.
EliminarUn beso.
Recuerdo ver esta película por lo que el libro será muy bueno leer de ese escritor. Tiene un buen argumento. Un abrazo.
ResponderEliminarEspero que el libro te guste tanto como la película. Ambas propuestas son muy buenas y cualquiera de ellas nos cuenta una maravillosa historia.
EliminarUn beso.
Tengo un precioso recuerdo de esa película y acabo de enterarme, gracias a ti, que existe una novela en la que se basó. Tomo nota del título y veré si lo tienen en la biblioteca, aunque no se cuándo podría ponerme con ella. Besos
ResponderEliminarYo tampoco sabía que había libro cuando vi la película, pero me gustó mucho y después, cuando leí el libro, aún me gustó más.
EliminarOjalá que lo disfrutes tanto como yo.
Un beso.
Hola Rosa, que genial reencuentro a través de tu reseña con 'La normas de la casa de la sidra' que me pareció una película maravillosa, y que andaba algo perdida en mi memoria cinéfila. No recordaba que la película estuviera basada en una novela, y desde luego a casi 20 años ya de su estreno en cines, estoy deseando volver a verla con ese pedazo de actor como es Michael Caine y con Charlize Theron cuando ya despuntaba como actriz internacional.
ResponderEliminarBesos y feliz mes de febrero lector.
Yo la veré un día de estos también. Escribiendo la entrada me dieron muchas ganas de volver a verla. La tengo en DVD porque cuando la vi me gustó tanto que la compré en cuanto salió. la he visto una vez más con lo que la próxima será la tercera. Michael Caine es un gran actor, pero creo que este es uno de sus mejores papeles, si no el mejor. Maravillosa.
EliminarUn beso.
Años ha que vi la película, y me gustó mucho. Ahora toca leer la novela, y después revisionar la peli y comparar. Veo que es uno de tus autores referentes, por lo que es para tenerlo muy en cuenta. Besos.
ResponderEliminarPues si la película te gustó, creo que la novela aún te gustará más.
EliminarJohn Irving es un autor al que sigo y del que leo todo lo que publica hace muchos años. Es de lo mejor en Estados Unidos. Te lo recomiendo sin ninguna duda.
Un beso.
Pues tomo nota de tu recomendación, tanto de la película como de libro, aunque soy más de leer el libro primero. Se ve que es de ese tipo de historias que se te quedan en la memoria por mucho tiempo y me encanta. Un saludo!
ResponderEliminarA mí también me gusta leer primero el libro y luego ver la peli o la serie, pero a veces, como en este caso, me topo con la película sin saber que existe una novela. Aun así, no puedo resistirme a le lectura cuando una historia me gusta tanto aunque ya la conozca por el cine.
EliminarSí, es de esas historias que se te quedan pegadas y son difíciles de olvidar.
Un beso.
Tengo pendiente a este autor desde hace tiempo pues no he leído nada de él. Cada vez que reseñas algo suyo recuerdo que debo subsanar esta carencia.
ResponderEliminarAlgún día lo haré.
Un beso.
Estoy deseando que te decidas para que me cuentes lo que te parce el autor. La verdad es que desde que tengo el blog solo ha sacado una novela que es la que he reseñado. las otras dos veces que he hablado de alguna obra suya ha sido en el mes literario, pero es uno de mis autores imprescindibles.
EliminarUn beso.
Totalmente de acuerdo contigo, Rosa, tanto el libro como la película son muy recomendables. Yo solo les encuentro un fallo, y es que me hacen llorar de lo lindo :(( Me encanta la delicadeza con la que se trata un tema tan controvertido como el aborto y las varias facetas que se muestran de él. Como casi todo en esta vida, no hay blancos ni negros, solo mil tonos de gris y cada cual tiene los suyos.
ResponderEliminarUn gustazo volver a leerte, querida. Por cierto, estoy aquí jajajaja.
¡Besos de domingo!
Es una de las virtudes de John Irving el tratar temas difíciles con gran respeto y delicadeza. Nunca se deja atrapar por la moda de lo correcto y eso es algo que yo valoro mucho.
EliminarYo soy poco llorona en cine (en libros casi nada), pero hay escenas que me emocionan mucho en esta película. Esas despedidas, primero de Wilbur y luego de Homer, "Buenas noches, príncipes de Maine, reyes de Nueva Inglaterra", me emociona solo de recordarla.
No sabes cómo me alegro de verte de nuevo por mi blog. Hay personas que cuando faltáis dejáis un hueco.
Un beso.
La película es mítica y el libro muy de tu estilo, ¿no? Los acercamientos que he hecho a la literatura norteamericana han sido por tus sugerencias y siempre con éxito, aunque tengo muchos anotados y que están pendientes. El último libro que he leído, aunque no tiene ninguna similitud formal, también trata el tema del aborto ("Daniel Astor y la caja negra" de Marta Sanz). De acuerdo con que no se puede estar a favor pero tampoco en contra.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es Daniela, me falló la A.
EliminarDe marta Sanz leí hace unos años "Farándula" y me gustó mucho la forma y lo que cuenta. Luego, no he vuelto a leer nada suyo y tengo un par de ellas apuntadas y una "Clavícula" incluso comprada, pero no le ha llegado el momento. Podría ser este porque me pilla con un libro terminado.
EliminarJohn Irving debe de ser de mi estilo porque es uno de mis favoritos. Me parece fabuloso.
Un beso.
No he leído el libro y tengo al autor pendiente. Me ha gustado todo lo que has contado del libro, y la película la conozco, aunque no la he visto.
ResponderEliminarMe apunto el libro, aunque ya tenía apuntado al escritor en general.
Un besito!! :))
¡¡Hola, María!! Cuánto tiempo. Pues película o libro, ambos son estupendos. Aunque yo prefiero leer el libro primero, en esta caso fue al revés porque ni sabía que había libro.
EliminarCon esta o con otra novela, no dejes escapar al autor porque es muy bueno.
Un beso.
Hola!apuntamos ambas recomendaciones que somos de ver película o leer libro por igual o en simultáneo. Jaja!Caine es un acto razón! !!abrazosbuhos
ResponderEliminarActorazo.
ResponderEliminarPues ambas propuestas os gustarán seguro porque, cada una en su formato, son grandes obras.
EliminarEspero que las disfrutéis.
Un beso.
Conocía la historia, aún antes de hacerme del libro y de la peli. En algún momento, este año o el próximo haré el combo. Sabiendo que te ha agradado, sube unos escalones entre mis pendientes.
ResponderEliminarUn beso, Rosa.
No la dejes pasar. Yo, como siempre, recomiendo primero el libro y luego la peli, aunque sé que eso es un gusto mío y cada cual tendrá el suyo. En cualquier caso, una historia muy buena y muy bien contada.
EliminarUn beso.