"Reina roja" Juan Gómez-Jurado.
Esta es otra novela que viene recomendada por el entusiasmo general que provoca en las redes sociales. Pues a pesar de todo, no me ha llegado a convencer.
Entiendo el por qué de su éxito porque tiene cosas buenas, pero no puedo obviar las malas que también las tiene.
Tiene una trama original que nos lleva a toparnos con una serie de asesinatos, secuestros y peticiones de rescate que se pueden considerar novedosos; tiene un personaje, Antonia Scott, cuya extraordinaria inteligencia la lleva a ser seleccionada por un grupo de gente muy especial, que pretende resolver ciertos casos criminales de una forma más especial aún. "Antonia Scott sólo se permite pensar en el suicidio tres minutos al día. Para otras personas, tres minutos pueden ser un período minúsculo de tiempo. No para Antonia. [...] La mente de Antonia Scott es más bien como una jungla, una jungla llena de monos que saltan a toda velocidad de liana en liana llevando cosas. Muchos monos y muchas cosas, cruzándose en el aire y enseñándose los colmillos.".
Tiene otro personaje, Jon Gutiérrez, expedientado por pensar que con tal de castigar a un culpable cualquier método puede ser válido. "Jon no está tan gordo como para que su jefe le regañe, y el comisario tiene mejores motivos por los que echarle la bronca, además. Para echarle la bronca y para echarle del cuerpo. De hecho, Jon está suspendido de empleo y sueldo, oficialmente".
Ambos personajes serán sacados de su realidad atormentada, más o menos convencidos, más o menos presionados, para resolver un caso que afecta a las más altas esferas de la sociedad de consumo: la directora del banco más prestigioso del país (que recuerda mucho a Ana Patricia Botín) y el empresario estrella de la industria textil, uno de los hombres más ricos del mundo (que no puede dejar de traer a nuestra mente a Amancio Ortega).
La novela está bien escrita y tiene un montón de frases muy buenas, lo que, junto a lo entretenida que es, ayuda mucho a que se lea con suma facilidad. Las ilustraciones, de Fran Ferriz, sencillas y en blanco y negro, son hermosas e inquietantes. Y debo decir que mi trabajo me ha costado averiguar la autoría, porque en ningún lugar del libro aparece mención ni de las imágenes ni de su autor.
Sí aparece en los agradecimientos Joaquín Sabina, de cuyas canciones el autor entremezcla frases a lo largo de toda la novela. Conozco la obra de Sabina creo que en su totalidad por lo que no es probable que se me haya escapado ninguna de las citas. "Casi todos se miran al espejo por las mañanas, sin reconocer la cara que les devuelve el reflejo y se preguntan quién les ha robado el mes de abril, cómo ha podido sucederles a ellos". Siempre es un aliciente añadido encontrar por ahí diseminados los versos del cantautor.
Hasta aquí la parte buena que, no cabe duda,la tiene. Vamos ahora con los fallos, o lo que para mí constituye los fallos.
Tanto Antonia como Jon son personajes que viven atormentados por episodios de su pasado más o menos reciente. Y ya me voy cansando de protagonistas de series policíacas que viven en el infierno de sus culpas y desgracias personales, familiares o profesionales. Se han puesto de moda estos personajes a modo de anti héroes y, si al principio resultaban conmovedores y originales, terminan resultando un tostón, y una añora a los detectives guapos, honrados y con éxito profesional y sentimental.
He dicho ya que la novela está bien escrita, pero de repente, entre acierto y acierto sintáctico, surge el fallo que chirría, el que me pone los ojos atravesados y hasta el oído siento que se me queja: una serie de leísmos que, desde mi punto de vista, son imperdonables en un autor que tiene tal cantidad de obra escrita y publicada.
Y ya, el colmo en un escritor de novela negra que degüella, apuñala y exanguina sin recato a sus personajes ha sido situar la aorta en el cuello. Me ha conmovido hasta las lágrimas, pero de estupefacción. Alguien a quien clavan un objeto punzante en la aorta, intenta quitarse del cuello el objeto extraño. No pongo la cita literal por miedo al destripe. ¿Habrá confundido la aorta con la carótida? Si es así, el error debió subsanarse en la primera corrección, porque no solo es de cultura general conocer las arterias más importantes del cuerpo, es que hay que tener unas mínimas nociones de anatomía cuando se pretende escribir acerca de traumatismos de todo tipo sobre cuerpos humanos.
Y ya, para terminar, aunque el autor nos ruega encarecidamente que no hablemos con nadie del final de la obra, no dice nada de hablar del futuro de la obra, y sí, habrá una segunda parte y a saber cuántas más. No me cabe duda de que tendrán el éxito asegurado
Entiendo el por qué de su éxito porque tiene cosas buenas, pero no puedo obviar las malas que también las tiene.
Tiene una trama original que nos lleva a toparnos con una serie de asesinatos, secuestros y peticiones de rescate que se pueden considerar novedosos; tiene un personaje, Antonia Scott, cuya extraordinaria inteligencia la lleva a ser seleccionada por un grupo de gente muy especial, que pretende resolver ciertos casos criminales de una forma más especial aún. "Antonia Scott sólo se permite pensar en el suicidio tres minutos al día. Para otras personas, tres minutos pueden ser un período minúsculo de tiempo. No para Antonia. [...] La mente de Antonia Scott es más bien como una jungla, una jungla llena de monos que saltan a toda velocidad de liana en liana llevando cosas. Muchos monos y muchas cosas, cruzándose en el aire y enseñándose los colmillos.".
Tiene otro personaje, Jon Gutiérrez, expedientado por pensar que con tal de castigar a un culpable cualquier método puede ser válido. "Jon no está tan gordo como para que su jefe le regañe, y el comisario tiene mejores motivos por los que echarle la bronca, además. Para echarle la bronca y para echarle del cuerpo. De hecho, Jon está suspendido de empleo y sueldo, oficialmente".
Ambos personajes serán sacados de su realidad atormentada, más o menos convencidos, más o menos presionados, para resolver un caso que afecta a las más altas esferas de la sociedad de consumo: la directora del banco más prestigioso del país (que recuerda mucho a Ana Patricia Botín) y el empresario estrella de la industria textil, uno de los hombres más ricos del mundo (que no puede dejar de traer a nuestra mente a Amancio Ortega).
Ilustración de Fran Ferriz para "Reina roja" |
Sí aparece en los agradecimientos Joaquín Sabina, de cuyas canciones el autor entremezcla frases a lo largo de toda la novela. Conozco la obra de Sabina creo que en su totalidad por lo que no es probable que se me haya escapado ninguna de las citas. "Casi todos se miran al espejo por las mañanas, sin reconocer la cara que les devuelve el reflejo y se preguntan quién les ha robado el mes de abril, cómo ha podido sucederles a ellos". Siempre es un aliciente añadido encontrar por ahí diseminados los versos del cantautor.
Juan Gómez-Jurado |
Tanto Antonia como Jon son personajes que viven atormentados por episodios de su pasado más o menos reciente. Y ya me voy cansando de protagonistas de series policíacas que viven en el infierno de sus culpas y desgracias personales, familiares o profesionales. Se han puesto de moda estos personajes a modo de anti héroes y, si al principio resultaban conmovedores y originales, terminan resultando un tostón, y una añora a los detectives guapos, honrados y con éxito profesional y sentimental.
He dicho ya que la novela está bien escrita, pero de repente, entre acierto y acierto sintáctico, surge el fallo que chirría, el que me pone los ojos atravesados y hasta el oído siento que se me queja: una serie de leísmos que, desde mi punto de vista, son imperdonables en un autor que tiene tal cantidad de obra escrita y publicada.
Y ya, el colmo en un escritor de novela negra que degüella, apuñala y exanguina sin recato a sus personajes ha sido situar la aorta en el cuello. Me ha conmovido hasta las lágrimas, pero de estupefacción. Alguien a quien clavan un objeto punzante en la aorta, intenta quitarse del cuello el objeto extraño. No pongo la cita literal por miedo al destripe. ¿Habrá confundido la aorta con la carótida? Si es así, el error debió subsanarse en la primera corrección, porque no solo es de cultura general conocer las arterias más importantes del cuerpo, es que hay que tener unas mínimas nociones de anatomía cuando se pretende escribir acerca de traumatismos de todo tipo sobre cuerpos humanos.
Y ya, para terminar, aunque el autor nos ruega encarecidamente que no hablemos con nadie del final de la obra, no dice nada de hablar del futuro de la obra, y sí, habrá una segunda parte y a saber cuántas más. No me cabe duda de que tendrán el éxito asegurado
Título del libro: Reina roja
Autor: Juan Gómez-Jurado
Editorial: Ediciones B
Año de publicación: 2018
Año de publicación original: 2018
Nº de páginas: 568
Tienes razón, últimamente todos los investigadores/protagonistas de estas novelas tiene problemas personales y están atormentados. Aun así, la novela me parece muy entretenida y se lee muy bien. A mí me gustó, pero entiendo tus peros, los leísmos hacen daño y en la correción deberían haberse dado cuenta de lo de la aorta, yo para ser sincera no me di cuenta... la anatomía no es lo mío jejeje.
ResponderEliminarBesos
Para mí son fallos imperdonables. Un leísmo se le puede escapar a cualquiera, puede ser hasta un fallo de dar a la tecla incorrecta sin querer, pero cuando se repite al menos cinco veces, ya no se puede achacar a la casualidad. Fallo por parte del autor y también por parte del corrector.
EliminarEntretenida es, desde luego y, salvando ese fallo (que para mí es muy gordo) está bien escrita. Se lee bien y eso es un mérito.
Lo dicho, un libro con sus luces y sus sombras.
Un beso.
Pues no te digo nada de poner que en la Policía Nacional hay un capitán y un cabo... Eso es de primero de novela policiaca
EliminarJa, ja, esa se me había escapado. Tampoco sirvo para correctora.
EliminarYo también estoy hasta el pirri de personajes que viven en el infierno. Le tenía muchas reticencias a este libro, dada el apoyo mediático, es un prejuicio, ya lo sé, pero el tiempo me da la razón en muchos casos. Los fallos anatómicos dicen mucho, más de lo que parece. En fin, paso palabra y de esta novela. Gracias. Me has ahorrado tiempo. Un beso.
ResponderEliminarEs un prejuicio que yo también padezco. Cuando un libro empieza a copar las redes y los blogs, me suelo mosquear. la verdad es que alguna vez me he equivocado, pero la mayor parte de las veces que me he decidido, mis reticencias se vieron plenamente justificadas. Lo que pasa es que siempre me queda la duda y la curiosidad.
EliminarLos fallos anatómicos en un autor de novela negra que produce heridas a sus víctimas creo que son imperdonables. Creo que es como pretender escribir de cualquier tema sin controlarlo mínimamente. Si vas a herir a tus personajes, tienes que saber dónde lo haces y en el cuello es imposible pillar la aorta.
Un beso.
Haces una excelente ponderación de la novela, Rosa. Ya quisiera yo tener ese "ojo de halcón" al que no se le escapa nada.
ResponderEliminarAdmito que aún sin defectos no me hubiese decantado por su lectura, pero leerte a ti ya es un premio.
Abrazos!!
Con lo despistada que yo soy, me hace gracia lo de "ojo de halcón" y la duda que me queda es cuántas cosas se me habrán escapado y cuántos fallos habrá de los que no me haya dado cuenta. Pero en fin, ya es bastante criticar los que se ven, no vamos también a achacar al autor los fallos que no vemos.
EliminarDesde luego, no es una novela que yo recomiende y menos a los que no sois amantes del género.
Un beso.
Me encantan tus críticas constructivas, Rosa. Yo me lo he pasado bien leyendo la novela, que es lo que importa, a pesar de estar llena de personajes clichés, pero es que hoy en día no hay un thriller en el que su protagonista no sea un borracho o esté atormentado por un oscuro pasado. Y si te digo que soy de letras puras entenderás por qué se me pasó ese error de la aorta
ResponderEliminarBesos
Yo también me lo he pasado bien leyendo esta novela porque es muy entretenida y dejando aparte esos leísmos que me han herido, está bien escrita.
EliminarLo de la aorta no es algo que todo el mundo tenga que saber, pero si escribes novelas en las que los personajes reciben heridas y quieres mencionar los órganos afectados tienes que documentarte un poco. No puedes darle un golpe a alguien en la cabeza y romperle una pierna, de la misma manera no puedes clavarle algo en el cuello y herirle en la aorta. Todas esas cosas hacen que la novela, para mí, no pase de entretenida, sin más.
Un beso.
Hola Rosa, ¿qué opinión tienes de la extensión de la novela hasta las 568 páginas? No sé si esto le resta algo de ritmo, o por el contrario no afecta a la argumentación central. Por otra parte, no entiendo como se puede cometer un error tan garrafal como el de la aorta sin que los correctores, la editorial o alguien de confianza del autor se haya percatado. ¿Sería posible corregir el error en futuras ediciones de la novela?
ResponderEliminarBuen ojo crítico Rosa, un beso y feliz semana.
La verdad es que es incomprensible que, tras los fallos del autor, los correctores los hayan pasado por alto. No es una autoedición, ni una editorial menor y se supone que el equipo de correctores es bueno. Tanto el fallo anatómico, como los gramaticales debieron ser detenidos por algún filtro.
EliminarMe imagino que si les llegan noticias de esos errores los corregirán en sucesivas ediciones, pero como solo se leen maravillas de la novela, dudo que lleguen a percatarse.
La longitud no me ha llamado la atención especialmente. Estoy acostumbrada a leer libros extensos y, como es entretenido, no me he fijado en ese detalle. Puede haber sido fallo mío o que la longitud es adecuada a la trama. Más bien creo que es esto último.
Un beso.
Me había emocionado con el libro y estaba deseando leerlo al llegar a la mitad de tu reseña. De ahí en adelante he ido perdiendo las ganas :(
ResponderEliminarA mí que el pasado de los protas sea "tormentoso" y los marque, si es creíble y justifica con coherencia su presente, no me importa; pero lo de los leísmos y fallos de cultura general, eso me puede, aunque de lo primero, creo sinceramente, tiene más culpa el corrector que el autor. Se supone que conoce su oficio y que para eso le pagan, para corregir ese tipo de fallos.
En fin, de todos modos parece una novela entretenida, quién sabe... :)
Un placer leer tus estupendas reseñas de nuevo, Rosa.
¡Un beso grande!
Qué alegría volver a verte por el mundo bloguero.
EliminarA mí, al principio, ese pasado (o presente) tormentoso y atormentado del policía o detective, me parecía un detalle original, pero se abusa tanto de él, que ya llega a resultar caricaturesco.
Yo creo que la culpa de los errores la podemos dividir en partes iguales. Al corrector le pagan para eso y en esta novela ha dejado pasar errores de bulto, pero a un autor consagrado y con mucha obra publicada tampoco se le pueden perdonar ciertos fallos.
Un beso.
Jo, la verdad es que la extensión ya me echa para atrás. Como dices el detective atormentado comienza a ser un poco cliché. Últimamente estoy viendo mucho documental de asesinatos y de investigación policial. La verdad es que ninguno de esos detectives tuvo un pasado perturbador. Son gente normal abocada a tratar lo peor de la sociedad y lo hacen volviendo a sus vidas, con su mujer e hijos. Lo de la aorta, bueno, lo curiosos es que en los procesos de revisión, los correctores no se percataran de ello. Pero son errores que a veces pasan. Recuerdo una anécdota que explicaba P.D. James cuando en una de sus novelas conseguía que una moto fuera marcha atrás. La pregunta es ¿cuántos lectores se darán cuenta de ello? Un fuerte abrazo!!
ResponderEliminarMe imagino que poner un protagonista normal, que vuelve a casa por la noche a hacer la cena y bañar a los niños hace que haya que poner mucha calidad y originalidad en la trama y eso es más difícil que correr tras los traumas de un detective atormentado. También hay maneras y maneras de hacer desgraciado a un personaje. Las hay muy originales y/o rompedoras y más simples.
EliminarEs cierto que errores tiene cualquiera, pero el leísmo se repite muchas veces y lo de la aorta es imperdonable en este tipo de novelas. Que se les haya pasado a los correctores es incompresible.
Un beso.
Muchas gracias por esta reseña
ResponderEliminarGracias a ti por pasarte a leerla.
EliminarUn beso.
No entiendo como esos fallos garrafales (leísmos y el imperdonable error anatómico) no han sido detectados por el corrector (me imagino que todas las editoriales lo tienen) o por otros ojos críticos antes de la publicación. A mí este tipo de fallos también me echan para atrás.
ResponderEliminarMe imagino que este caso es como el de muchas películas, en las que el público solo se fija en la forma y no en el fondo, en el asunto y no en los detalles, ese público que va al cine a distraerse y no a pensar, como algunos admiten sin ningún tipo de rubor. Fijarse en detalles y hechos que no acaban de cuadrar y que chirrían, no es, al parecer, algo muy habitual.
Y es muy cierto lo que apuntas sobre el perfil humano y psicológico de los intrépidos detectives, tanto en el cine como en las obras literarias. O bien son alcohólicos (anónimos o no) o siguen traumatizados por el abandono o la muerte de su mujer, jeje.
Un beso.
Desde luego es una novela muy aclamada en las redes. Supongo que pasa eso que dices, que mucha gente lee para entretenerse y esta es una novela muy entretenida.
EliminarYo también leo y voy al cine para distraerme, pero es que si la obra no me hace pensar, me aburro.
Esta novela tiene su crítica. Los grandes pilares del capitalismo son el verdadero objetivo del asesino y la trama no carece de originalidad. Eso lo pongo en el platillo de las cosas buenas de la novela. Lo que pasa es que cuando un libro concita tantas buenas críticas,una se siente más tentada de incidir en los fallos.
Un beso.
Ya me imaginaba que la novela no era para mí, pero ahora ya no tengo dudas. Ha habido muchísima publicidad y he estado tentada de leerla pero nunca me acababa de apetecer.
ResponderEliminarLa extensión para mí no es un problema, de hecho prefiero los libros gorditos a los que tienen unas 200 páginas. Pero veo que hay demasiados clichés.
De momento lo dejo pasar. Casi siento alivio, porque mi lista de deseos ha descartado un libro jajajaja
Besitos!
Pues yo me dejé caer en la tentación. Suelo mosquearme cuando un libro es tan mediático, pero como siempre queda la duda, a veces caigo. Casi siempre mis impresiones eran ciertas, pero es cierto que alguna vez me equivoco. Este libro no es de los peores, pero creo que está supravalorado.
EliminarYo también prefiero los libros extensos por lo que a este no es su número de páginas una de las cosas que le reprocho
Me alegro de dejarte aliviada, jaja.
Un beso.
Este tipo de libros son muy entretenidos, pero a la vez previsibles y suelo dejarlos a la mitad. No son los que más me gustan, pero el autor es solvente y bastante popular: lo respeto. Lo de los fallos resulta extraño, sabiendo que detrás hay una editorial importante. Alguien no ha hecho bien su trabajo, pasa en todos los ámbitos. Parece que últimamente "todo vale".
ResponderEliminarEn fin, hoy no crece mi lista.
Un abrazo.
Yo no conocía de nada a este autor. Me gustan mucho las novelas policíacas y de intriga desde adolescente y la verdad es que muy malas tienen que ser para que las abandone. Esta no es de lo mejor, pero tiene sus cosas buenas y la he leído a gusto, lo que sucede es que con toda la fama que tiene y las alabanzas que provoca, una esperaría algo mucho más logrado.
EliminarUn beso.
Hola Rosa, en cuanto he visto la novela que reseñabas he corrido a tu blog.
ResponderEliminarMe ha extrañado la inclusión entre tus críticas ya que, como a tí, me ha parecido bastante floja.
Ha sido la primera novela con la que inauguré el año ya que fue un regalo de Navidad. Tienes razón, es entretenida y se lee rápido, pero ya me canso de tanto título amparado en una trama policiaca con ingenio y la descripción de la ciudad de turno.
Ya he visto que anuncia saga, pero creo que no estaré entre sus lectores. Un beso
En principio esta novela iba a ir a mis sección "Sin reseña", pero empecé a escribir y entre lo bueno y lo malo que tiene, me di cuenta de que llevaba mucho escrito para esa sección, así es que le ha correspondido una entrada en exclusiva.
EliminarEs cierto que están muy de moda las series ambientadas en ciudades pequeñas: Las Palmas de Gran Canaria, Vitoria, Pamplona, Cartagena... Y salvo la de Vitoria, las otras no están mal.
Yo estoy segura de que no leeré más libros de esta serie.
Se está poniendo tan de moda lo policíaco que se escribe demasiado y ya se sabe que lo mucho está en contra de lo bueno.
Un beso.
Reina roja es la primera novela que leeré de Gómez-Jurado. Acabo de leer otra reseña de esta novela que parece no le entusiasmó tanto como a la mayoría de los lectores. Ya adviertes al principio de tu reseña que no te terminó de convencer la trama de esta novela, aunque también comentas que tiene ingredientes atractivos: espero que Sabina sea un aliciente que me incite a afrontar su lectura con las expectativas que tengo puestas en esta novela. Besos.
ResponderEliminarSabina alegra el ojo y la mente asomando de vez en cuando entre las frases de la novela.
EliminarNo, no me ha entusiasmado y me encantará leer tu opinión cuando la termines. No cabe duda de que tiene aciertos, pero creo que los fallos hacen que pierdan mérito y le restan mucha calidad al producto final. Ya nos contarás. Yo tampoco había leído nada del autor. Ni siquiera lo conocía hasta el punto de pensar que era su primera novela, lo que hubiera explicado ciertas cosas. Cuando vi la cantidad de cosas que tiene publicadas, me fue muy difícil disculpar detalles que se pueden perdonar a un novato, pero nunca a alguien con su trayectoria.
Un beso.
Hola Rosa, a mi esos fallos me molestan mucho porque se supone que han pasado por varios procesos de corrección de profesionales. A todos se nos puede pasar pero el problema más que del autor (que también) me parece del editor. Igual desde el desconocimiento pensaba que cuando se publicaba un libro se pasaban diversas revisiones pero igual es que estaba equivocada.
ResponderEliminarDe momento este no lo voy a apuntar, tengo demasiado por leer.
Besos guapísima, un placer leerte como siempre
Desde luego que ha habido un fallo de corrección en la editorial, aunque yo no sé cómo se llevan a cabo esas cosas ahora, no sé si siguen existiendo las galeradas que se le daban al autor para corregir y que se corregían en la propia editorial; con esto de que todo este digitalizado no sé si funciona igual. No obstante, un escritor no puede tener una falta gramatical tan notoria y que se repite al menos cinco veces. Creo que si te dedicas profesionalmente a escribir, tienes que controlar tu herramienta de trabajo que es tu idioma.
EliminarUn beso y me alegro de no añadir otra novela a tu lista de pendientes que imagino infinita como todas.
Ahora mismo estoy en otra onda en cuanto a lo que leo la verdad. Cierto que es la típica novela que parece que se leerá con facilidad y que es muy entretenida. Yo soy fan del Sabina de los ochenta, veo que la cita que incluyes de aquella época. La tendré presente para más adelante. Gracias.
ResponderEliminarSaludos.
En mi opinión es una novela de la que se puede prescindir sin mucha pena. Es entretenida, pero sin más.
EliminarA Sabina se lo va uno encontrando a lo largo de la novela en varias ocasiones.
Un beso.
Vuelvo a esta reseña después de leer recientemente la novela. Para ser sincero no me ha dicho gran cosa. Es entretenida y se lee con facilidad, pero para ser sincero me gusta bastante más la obra de Toni Hill o Carlos Bassas, por citar dos autores también actuales y que tocan un palo estilístico similar. De todas formas no me he aburrido ni nada por el estilo.
EliminarBesos
Bueno, es que Toni Hill y Carlos Bassas del Rey son muy buenos escritores. Para mí no tienen comparación. Sus personajes son muy buenos y sus historias aportan mucho más que entretenimiento. Con ellos repito y repetiré.
EliminarUn beso.
Evidentemente conozco esta novela de tanto verla por las redes sociales, al igual que pasó con las anteriores de este autor y que pasa con las de otros varios autores. No me llamó la atención a priori. Sigue sin llamármela ahora que leo tu reseña. Ya sabes que no es el de esta novela un género del que lea mucho, así que cuando lo leo prefiero hacerlo con un libro, aunque entretenido, no tan manido y con esos fallos. Al respecto, tirón de orejas no solo al autor sino también a la editorial. Estas no están solo para vender, a ver qué pasa con la labor de corrección. Extraño también que no se haga mención al ilustrador. En fin, que creo que este libro no es para mí, y me da la impresión de que lo que más me gustaría de él son las frases de Sabina, pero para eso mejor me quedo con el original.
ResponderEliminarBesos
Yo no sabía nada del autor hasta esta novela y. de hecho, pensaba que era su primera obra y estaba dispuesta a ser un poco condescendiente con sus fallos, pero cuando vi la cantidad de cosas que tiene publicadas, me pareció imperdonable.
EliminarMe gusta mucho el género negro y aunque tengo bastante buena intuición con lo que se recomienda en las redes, a veces me dejo tentar por algún detalle, eso y que en ocasiones mi instinto me ha engañado, hace que de vez en cuando caiga víctima de mi curiosidad.
Yo también me quedo con el Sabina original.
Un beso.
Y se les escapó a los editores tambièn jajaja a lo mejor ni se han dado cuenta. ¿Les escribiste un e mail?
ResponderEliminarMe recordaste a una escena de la película Girl Interrupted con Angelina Jolie con Whoopie Goldberg. Jolie se pone unas tijeras en la garganta y amenaza con cortarse la aorta y la enfermera le dice que ahí no queda jajajajjaa
A mí me enseñaron que por ahí está la yugular y ya nunca se me olvidó desde la primaria.
No he mandado una carta a la editorial. Creo que ya son mayorcitos para saber hacer su trabajo.
EliminarNo he visto esa película, pero es la demostración perfecta de que como argumento cómico, la equivocación es muy buena, pero cuando va en serio... resulta casi más cómico, pero muy triste también. Algunos escritores de novela negra deberían hacer un curso de anatomía para poder destripar a gusto y con conocimiento.
Un abrazo.
Fany, la yugular no es una arteria, es una vena, slds.
EliminarPor lo menos está en el cuello, ja, ja.
EliminarPues yo os recomiendo que leáis el libro porque merece muchísimo la pena.
ResponderEliminarGracias por tu comentario y por tu participación. Está bien que quien venga a informarse encuentre opiniones diversas.
EliminarTal vez esperaba más del libro por las muy buenas reseñas leídas, pero el caso es que no lo he encontrado tan bueno como esperaba.
Un abrazo.
Yo me divertí con ella y continué porque era únicamente trilogía, pero el siguiente, Loba Negra, me ha defraudado mucho. En este confinamiento mi hija ha leído Reina Roja y ahora está justo con Loba Negra y creo que le está gustando más que a mí
ResponderEliminarUn beso.
Me resultó entretenida y, en ese sentido, puedo decir que me divertí, pero la verdad es que no me quedaron ganas de volver a repetir. Si encima dices que la segunda entrega te ha defraudado, me confirmas en mi decisión.
EliminarTiene fallos imperdonables y para un autor con tanta obra publicada y tanta fama, me parece doblemente imperdonable. Yo lo he descartado como escritor a leer.
Un beso.
Y qué decir del detalle que ha tenido para contentar a partidarios de la tortilla con/sin cebolla: Jon frie aparte la cebolla de su tan ponderada tortilla... pero olvida añadirla a la mezcla de patata y huevo o a la sarten!!!
ResponderEliminarDe acuerdo con todos los comentarios, enganxa y tiene toques interesantes (las palabras del juego de Marcos y Antonia) pero los múltiples fallos de corrección y la resolución rapida y con flecos por resolver suenan a encargo entregado con prisas.
No se puede poner en duda que la novela entretiene mucho y engancha, pero con los fallos que yo he encontrado, unidos a otros que se han señalado en los comentarios y que yo no había percibido (ahora tu aportación de la tortilla con/sin cebolla que, por cierto, cuando lo has dicho, me ha querido sonar que me pareció raro, viene a sumarse al resto), creo que hay muchas cosas para leer y la verdad es que no creo que repita con el autor.
EliminarUn beso.
Aprovecho para comentar porque, confieso, acabo de terminar de leer esta tercera parte de la historia.
ResponderEliminarCada vez entiendo menos el éxito de este autor, voy a ser más dura que tú en la crítica; no me parece bien escrita y la trama me parece que hace aguas varias veces durante la historia.
Nos amenaza con una continuación, espero, esta vez, ser más firme y ,con todo lo bueno que hay para leer, mantenerme lejos de este autor. Besos
Yo tuve suficiente con esta primera entrega. No me gustó la trama, no me gustó cómo está escrita y los detalles como la aorta en el cuello, los y algún otro muy gordo, me disuadieron totalmente.
EliminarHay autores que leo por simple entretenimiento aún sabiendo que no son gran cosa, pero lo menos que espero es que escriban con corrección y no cometan fallos tan gordos.
Nunca más.
Un beso.
Demasiadas opiniones favorables.
ResponderEliminarLa trama bien y el desarrollo correcto. Tuve claro que tenía trampa cuando a falta de menos de dos páginas y media todavía no sabíamos quién era la "mala" y cuál era la historia del señor White.
Todo preparado, como en las foto novelas, a seguir esperando el próximo capítulo.
No se puede dejar una novela inconclusa, es un fraude.
Quizás el autor se haya inspirado en la famosa serie Bergman cuyos autores suecos no soy capaz de referenciar. Pero en esta saga cada libro tiene una trama individual con principio y fin, con los mismos protagonistas aunque con variaciones en sus relaciones.
Sí, eso me pareció, una novela tramposa que me hizo perder totalmente el interés por el autor y el resto de su obra.
EliminarLa serie de Bergman es muchísimo mejor y de hecho me la he leído entera.
Este autor tiene mucha fama y levanta `pasiones, pero a mí no me ha convencido y eso en una de las novelas más aclamadas y reputadas.
Teote, tú lo has dicho. Una cosa es una serie, que son historias independientes, aunque coincidan los protagonistas, y otra es una saga (trilogía, bi/dilogía, etc., según si consfa de 3, 2, etc.), que es una línea argumental dividida en varios libros. No se pueden comparar.
EliminarAdemás las sagas suelen referirse a "sagas familiares". Menuda bronca me echó por aquí Jordi Sierra i Fabra porque en algún comentario (ni siquiera lo puse yo) a alguna entrada sobre alguna novela de su serie sobre Mascarell, alguien puso saga...
EliminarMuchos leismos , no da ni una, que lo manden corregir!!
ResponderEliminarSí, tiene fallos gramaticales gordos que el autor o la editorial debieron corregir.
EliminarHola, estoy leyendo la novela. La saqué de la biblioteca. Es una primera edición y encuentro que en la página donde específica la edición también pone @2018, Fran Ferriz por las ilustraciones. O sea que sí dice de quién son las ilustraciones. Y en la página 100 leo que el cuchillo se hunde en el cuello seccionando la yugular. En qué página está el apuñalamiento de aorta?
ResponderEliminarLos leísmos se me han escapado. Puedes decirme en qué página están? Y también te agradecería que me recomendaras una buena saga de novela negra donde los detectives sean guapos, honrados y con éxito profesional y sentimental. Este libro ya lo voy a acabar hoy y necesito ideas para el próximo. Gracias.
«Su impulso se suma a la puñalada de Carla, que le hunde la punta de la baldosa en la aorta. El hombre mira a Carla con incredulidad —intentando recalibrar qué está pasando—, al tiempo que aparta los dedos de la garganta del policía e intenta quitarse ese elemento extraño del cuello» Esa es la cita a la que me refiero con la aorta y el cuello, y no está en la página cien sino al final del libro. No sé la página exacta porque el libro me lo dejó una amiga. La cita está en mi libreta de citas de 2019.
EliminarRespecto al autor de las ilustraciones, pudo pasárseme, aunque lo busque bastante, pero también es cierto que mi despiste me puede hacer estar delante de algo y no verlo. Algo similar a lo que te pasa a ti con los leísmos.
Parece que solo has leído la segunda mitad del post, donde se habla de las cosas negativas (desde mi punto de vista). Lee la mitad anterior. Allí hablo de lo positivo. De todas formas no entiendo a la gente que no puede leer una opinión distinta a la suya sin sacar las uñas. Ni siquiera lo entiendo en el autor, pero en otra persona ajena, mucho menos (¿no serás el autor verdad? ja, ja. No ya sé que no. Gómez Jurado tendrá cosas más importantes que hacer que dejar comentarios anónimos en un blog cualquiera). Por cierto, tampoco me parece de recibo hacer un comentario como el tuyo de forma anónima.
Lo de los detectives «guapos, honrados y con éxito profesional y sentimental» (podías haber entrecomillado ya que me citas literalmente), está claro que es una ironía. No me gusta ese tipo de personajes y tampoco creo haberlos encontrado en las novelas que leo. Lo que pasa es que a estos los he visto también un poco llorones y compadeciéndose de sí mismos.
Y por si te interesa saber qué tipo de novela policíaca me gusta, te dejo algunas: las de Hervé Le Corre que no son serie; Jean Claude Izzo y su trilogía marsellesa; Maurizio de Giovanni con el comisario Ricciardi; Alexis Ravelo y su Eladio Monroy; Paco Gómez Escribano con su serie sobre Canillejas; Aro Sáinz de la Maza con Milo Malart; Toni Hill con Héctor Salgado. Hay muchos más, pero no caben todos aquí.
Menudo zasca múltiple, jajaja. Has empezado con lo de "como te pasa a ti con los leísmos", y ya no has parado hasta el final, épico. ¡Te felicito!
EliminarTe agradezco tus recomendaciones, sin duda voy a seguirlas puesto que me gusta mucho la novela negra. Siento que pienses que he sacado las uñas, no era mi intención, es sólo que aún no había llegado al segundo apuñalamiento. Es la primera vez que escribo y no sabía cómo se pone el nombre.
ResponderEliminarPues espero que disfrutes de mis recomendaciones. Para mí, son de lo mejor del género negro, y me olvidé de Dennis Lehane y James Ellroy. Más otros muchos de los que no me he acordado aún.
EliminarDeberías haber terminado la novela antes de juzgar.
Muy interesante tu blog. Añado gazapo: confunde ENDOdoncia con EXOdoncia. También he detectado algunos fallos de puntuación. Saludos y buenos vientos.
ResponderEliminarPS: Lo de las familias Ortega y Botín, no es que "recuerde a" ... ¡es que lo son! Y, ni lo veo necesario, ni me parece bien tal "intromisión" en sus vidas. No creo que ell@s - a quien dudo que hayan consultado- estén muy conformes en aparecer en esos contextos.
Ah, y Mentor "es" Charlie, de Los Ángeles de Charlie :-)
ResponderEliminarVeo que esta entrada sigue suscitando curiosidad y dejando comentarios después de más tres años de escrita. No se puede ir en contra de la opinión establecida que dice que Reina roja es el no va más en novela policíaca. Pues lo siento mucho, pero yo no estoy de acuerdo. De hacho no he vuelto a leer nada más del autor ni pienso que lo haga. No es que la novela me haya parecido una porquería, ni mucho menos, pero sí me ha parecido una más del montón enorme que se escribe y publica a diario. Encima con las fallas que muestro y me mostráis algunos lectores de los que pasáis por aquí aún quedan menos ganas de seguir. Yo seguramente también confundo Endodoncia y exodoncia, pero te aseguro que si escribiera una novela donde tuviera que usar esos términos, me enteraría antes.
EliminarGracias por pasarte y por tus comentarios.