"Volver la vista atrás" Juan Gabriel Vásquez
«Según me lo contó él mismo, Sergio Cabrera llevaba tres días en Lisboa cuando recibió por teléfono la noticia del accidente de su padre. La llamada lo sorprendió frente al Jardín de la Plaza del Imperio, un parque de senderos amplios y empedrados donde su hija Amalia, que por entonces tenía cinco años, trataba de dominar la bicicleta rebelde que acababa de recibir como regalo. Sergio estaba sentado junto a Silvia en una banca de piedra, pero en ese instante tuvo que alejarse hacia la salida del jardín, como si la cercanía de otra persona le impidiera concentrarse en los detalles de lo sucedido. Al parecer, Fausto Cabrera estaba en su apartamento de Bogotá, leyendo el periódico en el sofá de la sala, cuando se le ocurrió que la puerta de la casa no tenía puesto el seguro, y al levantarse bruscamente sufrió un desvanecimiento».
Sergio Cabrera había hecho una parada en Lisboa para ver a su mujer y a su hija. El matrimonio no pasaba su mejor momento y la madre y la hija habían puesto tierra y océano por medio refugiándose en Portugal, el país de origen de Silvia. Sergio se dirigía a Barcelona donde había sido invitado a participar en una muestra retrospectiva de sus películas que estaba organizando la Filmoteca de Catalunya. Allí pensaba reunirse además con su hijo Raúl que vivía en Marbella con su madre, la anterior mujer de Sergio.
Fausto Cabrera no se recuperaría de su caída y moriría el 10 de octubre de 2016. Sergio, tras valorar horarios de vuelos, su presencia comprometida en Barcelona, sus escasos días planeados con su mujer y su hija y su reencuentro con Raúl, decidiría no viajar a Colombia al funeral de su padre. En todo eso pensaba Sergio «cuando tomó una decisión que no le pareció entonces tan extraña como le parecería más tarde».
Si Sergio Cabrera es un director de cine conocido y apreciado (quién no recuerda la famosa y premiada La estrategia del caracol), Fausto no se quedaba atrás.
«Fausto Cabrera era una figura de renombre[...] Había sido el primero en usar el método Stanislavski para interpretar poemas, no sólo para hacer personajes dramáticos; había fundado escuelas de teatro experimental en Medellín y en Bogotá, y una vez se atrevió a convertir la plaza de toros de Santamaría en escenario para una obra de Molière. A finales de los años cuarenta hizo programas en la radio que cambiaron la manera en que la gente entendía la poesía, y luego, cuando llegó la televisión a Colombia, fue uno de los primeros directores de teleteatro y uno de sus actores más reconocidos. Después, en tiempos más convulsos, usó la reputación que había conseguido en las artes escénicas como fachada para militar en el comunismo colombiano, y eso le granjeó el odio de muchos hasta que esos años fueron cayendo en el olvido. Las generaciones más jóvenes lo recordaban en especial por un papel cinematográfico: fue para La estrategia del caracol, la más conocida de las películas de Sergio y acaso la que más satisfacciones le había dado, donde Fausto hizo de Jacinto, un anarquista español que lidera una pequeña revolución popular en el corazón de Bogotá».
Juan Gabriel Vásquez nos va contando en Volver la vista atrás, en capítulos entremezclados, las historias de Fausto y de Sergio. Empezará cronológicamente en plena guerra civil española, cuando Fausto era un niño de trece años que subía a la azotea de la casa desde donde se veía Montjuic y los aviones rebeldes que sobrevolaban Barcelona. «La guerra, para los hermanos, era esconderse debajo de la mesa del comedor mientras cruzaba el cielo azul la silueta de un Junkers enemigo. Después aprendieron a buscar refugio cuando sonaban las sirenas, pero muy pronto, cuando las sirenas se volvieron rutinarias, perdieron la costumbre: a partir de cierto momento, sólo Pilón, el perro lobo de la familia, siguió escondiéndose en el refugio».
La familia pronto se vio en la necesidad de huir de la guerra. Fausto recorre varios países en compañía de su tío, su padre y sus hermanos antes de encontrar su acomodo en Colombia. Allí conoce a la que sería su primera mujer, Luz Elena Cárdenas, que sería la madre de Sergio y de su hermana Marianella. Cuando los niños son adolescentes, toda la familia se traslada a vivir a China y de allí vuelven, primero los padres «Lo primero que hizo Fausto al llegar a Colombia fue ponerse en contacto con los fundadores del partido. Por supuesto, lo que él llamaba "el partido" tenía a estas alturas un nombre más largo: Partido Comunista Marxista-Leninista Pensamiento Mao Tse-Tung». Sergio y Marianella aun seguirían varios años en China donde recibieron adiestramiento para su inserción en guerrillas.
Y eso es lo que hacen los dos hermanos a su regreso a Colombia. Si en su estancia en China se nos cuenta cómo van adquiriendo la ideología comunista y revolucionaria, en sus andanzas en la guerrilla vemos cómo se van desencantando y cómo, primero Marianella y luego Sergio y su padre (que había tenido que huir al monte sin haberlo deseado), se libran de sus compromisos y se integran a la vida normal de la gente normal. «La lucha armada se le había convertido en una rutina obscena: ganar la confianza de los campesinos para llevar a cabo operativos de guerra, y contemplar cómo las víctimas de los operativos, a la larga, eran los campesinos cuya confianza habían ganado. No, la revolución no podía ser esto».
Si la biblioteca de su difunta madre, puso a Fausto tras la pista de los poetas y del teatro, la cámara Kodak Brownie Fiesta que Sergio heredó de su tía al morir esta, lo puso en contacto con un mundo de imágenes que abriría su afición al cine y lo pondría en el camino de la que sería su profesión. Y ahora, tantos años después, con su padre recién fallecido, su hijo viendo por primera vez alguna de sus películas, contemplando él el mismo Montjuic que su padre observaba de niño, rememora su vida y ajusta cuentas con los fantasmas del pasado. Como en Colombia lo hace su hermana. «Marianella hablaba de eso con frecuencia: de lo mucho que le seguía doliendo su pasado en la guerrilla, de los esfuerzos casi físicos que había llevado a cabo para olvidar todo lo ocurrido en esos años, del arrepentimiento, de la culpa, del odio».
Volver la vista atrás es una magnífica novela que nos habla de unas personas, pero también de un país de historia convulsa. Cuando me la recomendaron no me entusiasmó leer sobre la vida de un director de cine, por más que su película La estrategia del caracol me hubiera gustado. No soy demasiado amiga de biografías, pero está claro que, como no me canso de repetir, lo más importante no es lo que te cuentan sino cómo te lo cuentan y Juan Gabriel Vásquez lo cuenta todo, siempre maravillosamente. Los dos libros que había leído suyos, El ruido de las cosas al caer y Las reputaciones, me gustaron mucho y Volver la vista atrás me enganchó desde el principio y se me ha resultado adictiva a la vez que muy interesante.
La novela trata de esas relaciones familiares que tanto me gustan y que, si bien suelen darse entre madres e hijos, en este caso se da entre un padre y su hijo, pero las mismas contradicciones, la misma mezcla de amor/odio, el mismo egoísmo que también sirve de generosidad...
«Tantos conflictos, escribió Sergio. A pesar de que hicimos tantas cosas juntos, en China, en la guerrilla, en el cine, en la televisión, el conjunto de recuerdos, por más que trato de edulcorarlos, no es positivo. [...] Y sin embargo yo sé, y lo digo cada vez que puedo, que soy un discípulo de mi padre. Nunca habría podido hacer las cosas que hice si no hubiera crecido en su mundo».
Título del libro: Volver la vista atrás
Autor: Juan Gabriel Vásquez
Nacionalidad: Colombia
Nacionalidad: Colombia
Editorial: Alfaguara
Año de publicación: 2021
Año de publicación original: 2020
Nº de páginas: 480
¡Vaya libro tan interesante, Rosa! Nada más ver que lo firmaba Juan Gabriel Vásquez me he venido para tu blog. La biografía de estos dos Cabrera, el cineasta y el escritor es por demás interesante. Creo que leeré el libro más pronto que tarde pues me llama mucho las vicisitudes de Fausto. Yo viví en Canarias durante tres años y el apellido Cabrera es allí muy común. Me interesa saber cómo fue la salida de España y lo que en Colombia le pasase. También me llama mucho esa desilusión por la ideología de la guerrilla colombiana que sufrieron Marianella y Sergio. Y me quedo en ascuas al no saber cómo es que no les pasó nada al salirse por su propia cuenta.
ResponderEliminarDe este autor yo leí con grandísima satisfacción "El ruido de las cosas al caer" e hice reseña en mi blog. Me pareció fantástica novela. Así que esta no la pienso dejar pasar.
Un beso grande
Pues creo que Las reputaciones también te gustaría. Juan Gabriel Vásquez sabe contar historias sin ninguna duda.
EliminarLa vida de Fausto Cabrera es de lo más interesante, aunque la verdad es que antes se nos cuenta la historia de sus padres y como de América volvieron a Canarias, donde nació Fausto, y terminaron en Madrid y cómo después se fueron a Barcelona y ya de ahí al exilio. Lo de China merece mención aparte. Lo que son las ideologías cuando se practican con una fe inquebrantable... Y lo de la guerrilla... Vamos que, se mire por donde se mire, es un libro para leer.
Un beso.
Pues mira, sería un libro en el que creo que no me habría fijado, pero me he quedado pegada a tu reseña. Me parece muy reveladora esa cita final. Las relaciones paterno filiales pueden ser muy complejas, unas especie de ni contigo ni sin ti. El contexto de la vida de los dos Cabrera también me parece muy interesante.
ResponderEliminarBesos
Te pasa como a mí. Me lo habían recomendado hace tiempo y lo tenía en mente porque el autor me gusta mucho, pero el tema del libro me daba pereza. menos mal que se puso para la tertulia del instituto y por fin lo leí. No me hubiera gustado perdérmelo.
EliminarUn beso.
Fantástico como reseñas un aplauso muchacha
ResponderEliminarMucha
Gracias.
Eliminar¡Hola!
ResponderEliminarA mi en principio tampoco me llama leer sobre la vida de un director de cine, en general no me apetecen las biografías, tampoco soy demasiado amiga de ellas, pero sí que igual me animo con alguna de las otras dos obras suyas que leíste, veo que a Juan Carlos también le gustó mucho "El ruido de las cosas al caer", esa sí la anoto
Besos
Cualquiera de las dos novelas de Juan Gabriel Vásquez que menciono, El ruido de las cosas al caer, Premio Alfaguara 2011, o Las reputaciones, creo que te gustará mucho. Es un autor que escribe muy bien. También este libro te resultaría interesante, aunque entiendo que prefieras las novelas. A mí me suele pasar lo mismo.
EliminarUn beso.
A mí sí me gustan las biografías, pero si son de personas o personajes muy conocidos por mí. Pero aunque este no es el caso, tu estupenda reseña y la particular historia de esa familia me ha decantado hacia el interés por su lectura. Es muy cierto lo que dices, que muchas veces es más importante cómo se cuentan las cosas que las cosas en sí mismas. No obstante, las vicisitudes experimentadas por la familia Cabrera no tienen desperdicio.
ResponderEliminarUn beso.
Como digo, he leído pocas biografías. A pesar de lo mucho que me gustó María Estuardo, de Stefan Zweig, ni siquiera he leído más biografías de este autor que tanto me gusta. La que traigo en este entrada, que son dos más bien, la del padre y la del hijo, me ha resultado apasionante. Y es que, como dices, sus vicisitudes no tienen desperdicio.
EliminarUn beso.
Llevo con el en casa bastante tiempo pero ahora tengo claro que me pondré con el más temprano que tarde. Gracias por tu reseña.
ResponderEliminarNo lo dejes pasar. Seguro que te gusta y te entretiene.
EliminarUn beso.
Cierto, más importante que lo que te cuentan es cómo te lo cuentan y esta historia, por lo que dices, está magníficamente contada. La relación familiar y el contexto histórico que aborda me parece interesantísimo así que la tengo en cuenta. Gran reseña, Rosa. Un beso.
ResponderEliminarHay autores que lo cuentan todo de maravilla y este es uno de ellos. Todo lo que he leído suyo me ha encantado y esta biografía, o biografías, se te pega a las manos.
EliminarUn beso.
Buenos días, Rosa.
ResponderEliminarMe parece muy interesante lo que nos cuentas. Yo tampoco soy amiga de biografías, sólo me gustan las que aportan algo narrativamente. Los datos y fechas en la vida de un "personaje" me suelen dar igual, s no llevan adherido motivos importantes. No sé si leeré este libro, pero me ha gustado conocer la historia que hay tras él. ¡Muchas gracias por la reseña!
Un abrazo y muy feliz fin de semana!!
Esta novela es una biografía muy literaria y que provoca reflexiones muy interesantes sobre muchos temas. Creo que por eso me ha gustado tanto. Eso, que las peripecias de los protagonistas son muy especiales y lo bien escrita que está.
EliminarUn beso y feliz fin de semana también para ti.
¡Hola, Rosa! No era muy dado a las biografías hasta que comencé a indagar en las vidas de los escritores y me encontré con un género que si se narra de manera sincera y con cercanía al lector sin duda puede entretener tanto como una novela de ficción. Un abrazo!
ResponderEliminarLo que decía: hay cosas gustan más o menos por su temática, pero la forma de contarlas es fundamental y así, cosas que no te agradaban en principio, pueden resultar apasionantes y viceversa.
EliminarUn beso.
Hola Rosa, a mi si suelen gustarme las biografías, pero reconozco que las que he leído eran de escritores o personajes históricos que me llamarán la atención por algún motivo, no conocia al autor pero las relaciones familiares siempre me han parecido muy interesantes y si están bien contadas, con más motivo. Me lo llevo apuntado. Besos.
ResponderEliminarApunta al autor completo porque sus novelas son fantásticas. Es un escritor que hay que tener en cuenta. Esta es una biografía en forma de novela y ral ves esi, von un buen novelista por medio, la hace tan apasionante.
EliminarUn beso.
Hola. A mí también me gustan mucho las novelas en las que hay lío familiar y también me parece que da más juego madre/hija que padre/hijo pero bien igualmente. No me llama especialmente la atención la biografía aunque también me gusta la peli La estrategia del caracol. Pero habiendo guerra y tema guerrillas de por medio la verdad es que no me atrae lo suficiente. Me parece interesante pero no es lo que me apetece leer ahora.
ResponderEliminarBesos
La parte de la guerrilla es dura. La sekva, las órdenes, las suspicacias, las propias acciones guerrilleras... Entiendo que no te atraiga. Tak vea alguna otra novela dek autor, porque desde luego es muy recomendable.
EliminarUn beso.
En principio no me atraía pero me lo has contado tan bien que al final me has dejado con muchas ganas. A ver si me estreno con este autor.
ResponderEliminarBesotes!!!
Un autor muy recomendable, aunque te decidas por otra de sus novelas. No te arrepentirás leas lo que leas de él.
EliminarUn beso.
Hola Rosa!! Es un género que me gusta mucho, así que tomo buena nota de tu recomendación. Me encanta descubrir al leer reseñas nuevos títulos y autores. ¡Fantástica reseña y gracias por el descubrimiento! Besos!!
ResponderEliminarSeguro que la disfrutas si te gustan las biografías y si no, también porque es una buena biografía en forma de una muy buena novela.
EliminarUn beso.
¿Relaciones familiares? uyuyuyu, Las familias son un filón en las novelas. Me gusta lo que cuentas, así que me lo llevo anotado. Besos
ResponderEliminarSí, las familias esconden tantas contradicciones y sentimientos tan complejos que a la fuerza dan buenas novelas y, en este caso, una realidad tormentosa y con comportamientos difíciles de entender en algunos casos.
EliminarUn beso.
Hola. Rosa te leo y termino adquiriendo el libro en digital, siempre me convences. Mil gracias por contribuir a que mi lector esté a punto de reventar. Feliz semana.
ResponderEliminarBesos.
Ja, ja, no sé si es para dar las gracias. Las listas de pendientes echan chispas a base de leer algunos blogs. Pero como siempre digo, peor sería que no se nos ocurriera nada que leer en un momento dado. Prefiero tener mucho donde escoger. Te gustará Días sin sol.
EliminarUn beso.
Hola.
ResponderEliminarQué variado lees, me encanta.
Yo soy un poco rarita para las biografías, pero tu reseña, como siempre, ha hecho que esta me apetezca.
Muy feliz martes.
Juan Gabriel Vásquez es un autor para tener muy en cuenta. Si esta biografía (aunque en forma de novela) no te gusta mucho, sus novelas tradicionales te gustarán seguro.
EliminarUn beso.