"Una temporada en el purgatorio" Dominick Dunne

Sé perfectamente que, al contar la historia que me dispongo a contar, corro el riesgo de perder todo lo que he logrado y adquirido en mi vida, incluyendo mi reputación. También sé que voy a ganarme la eterna animosidad de la familia y, a lo largo de los años, he sido testigo, en ocasiones muy cercano, de lo que significa su eterna animosidad, cuando eran otros muchos los que la sufrían. Ellos, la familia —o «la Familia», como la llaman ellos mismos y a veces también la prensa—, no son mi propia familia, pero sí la familia en la que fui aceptado hace veinte años.

Mi primera visita a la finca de los Bradley la hice en calidad de compañero de colegio de Constant, y se prolongó durante un mes. Estudiábamos en Milford, un colegio de Connecticut para hijos privilegiados de familias católicas ricas que había fundado setenta y cinco años atrás un millonario católico con una floreciente fortuna procedente de las minas de cobre, cuyo hijo, en opinión del millonario, no había sido admitido en el elitista Groton porque era irlandés y católico. 


Pero antes de que Harrison se traslade a 1972 para contarnos cómo  conoció a Constant y entró en contacto con toda la tribu de los Bradley, hemos leído los tres párrafos con los que empieza la novela hemos visto que hay un juicio y que Constant es el acusado. Sabemos que es un asesinato porque ha habido una autopsia de una joven apaleada, una joven con la que Constant bailó y a la que dirigió una grosería «¿Te importa bailar con un hombre que tiene una erección?». No destripo nada. Todo ello se conoce en el primer párrafo de la novela, poco antes de lo que he destacado en el cuadrito. 

Luego ya nos centramos en 1972 y Harrison, en la primera parte de la novela, nos narra su amistad con Cosntant y su vida cada vez más ligada a la de los Bardley con los que pasaba muchas temporadas como invitado y amigo incondicional del hijo menor y su acompañante cuando el resto de la familia estaba ausente. 

«Mamá en París con Maureen. Mi padre en algún sitio, de negocios. Nunca sé dónde. Kitt y Mary Pat en el colegio, en el Sagrado Corazón. Jerry normalmente está con papá. Sandro haciendo un posgrado en Yale. Desmond es médico, trabaja en el Hospital Santa Mónica, en el centro. Este, más o menos, es el resumen».

Ese es el resumen de los Bradley. Todos los hijos mencionados con sus quehaceres cotidianos. Bueno, no, todos no. Faltan Kevin, al que mataron en Vietnam, y Agnes, en cuya habitación duerme Harrison y ...  «Yo nunca había oído hablar de Agnes y nadie me explicó quién era. Tuve la sensación de que no debía preguntar, y no lo hice»

Los Bradley son una familia enormemente rica. Tienen ganado el respeto de los católicos irlandeses, comunidad de la que proceden. No se puede decir que pertenezcan a ella porque su riqueza les aleja de la mayoría. Por el contrario, los protestantes, comunidad predominante y preeminente ya que controlan todo lo que es importante, política, negocios, sociedad, los desprecia y nunca los admite en condición de igualdad. Y no obstante, Gerald Bradley ha decidido vivir en la zona oeste de la ciudad, rodeado de WASP que lo desprecian y alejado de la zona este donde viven polacos, irlandeses, judíos e italianos. De manera que se hizo con la antigua casa del gobernador en Scarborough Hill, la zona más exclusiva de la ciudad «[...] la sorpresa fue doble cuando Gerald Bradley derribó la venerable casa y construyó en su lugar una mansión todavía más grande, de piedra gris y marrón, de estilo Tudor. Puede que no fuera la casa más elegante de la ciudad, pero ciertamente era la más grande», y, entre la envidia y el desprecio, no dejó de provocar comentarios hirientes entre sus vecinos esa arrogancia de nuevo rico, porque no podían olvidar que el padre de Gerald no había sido más que un carnicero.

Harrison, en cambio, no es capaz de sustraerse al hechizo de Constant y su adinerada familia. Más cuando mueren sus padres y descubre que su supuesta fortuna (mucho más humilde que la de los Bradley) no es más que una leyenda y que, en realidad, hay más deudas que dinero. A partir de su orfandad, Harrison irá cayendo más y más en las redes de los Bradley que irán comprando su voluntad con exigencias cada vez más difíciles de complacer y, por lo tanto, cada vez mejor pagadas. Hasta que decide escapar de ellos, aunque llevándose lejos sus secretos y manteniéndolos en la condición de secretos. 

Pero no solo compran los Bradley la voluntad de Harrison. En su ambición desmedida por poner a sus hijos en la posición que él nunca ocupará, Gerald es capaz de deshacer matrimonios, sobornar, ocultar crímenes e incluso cometerlos. Quiere a un hijo suyo en la presidencia de Estados Unidos y no habrá obstáculo que no esté dispuesto a superar. En boca de una de sus amantes 

«La verdad es que son fascinantes, sí, a su manera irlandesa. Oh, y con tantas ganas de ser aceptados. Pero, ojo, dales veinte años. O menos. Quince. Diez, incluso. Todo el mundo en este país va a saber quiénes son. Acuérdate de mis palabras».

Pasan los años y la segunda parte del libro encuentra a Harrison convertido en un escritor de fama en Nueva York en 1989. Esta parte está narrada en tercera persona por un narrador omnisciente. En ella volvemos a saber de los Bradley de los que Harrison se ha alejado totalmente. Y, sin embargo, como una pesadilla recurrente, no puede deshacerse de ellos. Incluso Claire, su mujer, a la que creía totalmente ajena a la familia, guarda secretos de la misma. «Claire, su mujer, también sentía aversión hacia la familia. Llevaba casado con ella algo más de un año cuando descubrió, por casualidad, que había sido una de las diez damas de honor de la boda de Maureen Bradley»

La tercera parte vuelve a ser narrada por Harrison. Estamos en 1993 y los secretos de 1974 salen a la luz por fin.

«¿Cómo puedo describirles el furor que causó el arresto de Constant Bradley? ¿A qué pudo deberse? ¿A su carrera como congresista? ¿A sus aspiraciones a gobernador? ¿A su famosa familia? ¿A su multimillonario padre? ¿A su glamour y su fama de seductor? ¿A su extraordinaria apariencia? Quién sabe. Probablemente, a todo ello junto».

Dominick Dunne

Una temporada en el purgatorio es una magnífica novela. A pesar de estar ambientada durante los años que van de 1972 a 1993, no puede dejar de recordar a otras dos novelas igual de maravillosas aunque ambientadas en las primeras décadas del siglo XX. Me refiero a El gran Gatsby de Francis Scott Fitzgerald y Retorno a Brideshead de Evelyn Waugh. 

La novela de Fitzgerald es mencionada en varias ocasiones, aunque la mención que me parece más interesante es la que cito a continuación: 

«—¿Ha oído hablar de Gatsby, señor Bradley?
—¿Quién?
—Su amigo Nick dijo sobre los Buchanan, aunque podía haber estado refiriéndose a los Bradley:
"Eran gente descuidada… Destrozaban cosas y criaturas y después se refugiaban en su dinero o en su vasta negligencia o en lo que fuera que los mantenía unidos y dejaban que otra gente limpiara el desorden que habían causado". Yo me siento atrapado por el descuido de Constant».

A la de Waugh, sin embargo, solo hay una pequeña referencia que puede pasar desapercibida para quien no conozca bien la obra y sus personajes, 

«[...] ¿Charles? ¿Charles te gusta? Uno de mis personajes de ficción favoritos se llama Charles.
—Apuesto que es Charles Ryder —dijo Claire.
—Correcto. —Le sonrió».

Dominick Dune provenía de una familia católica irlandesa acomodada y creció en Hartford, Connecticut, en un barrio dominado por blancos anglosajones protestantes (WASP) en el que siempre se sintió fuera de lugar. Me sonaba mucho el apellido y cuando, tras leer la novela, como hago siempre, me informé sobre el autor, su vida y su obra, descubrí que fue hermano de John Gregory Dunne, el marido de Joan Didion, del que esta autora tanto nos contó en su genial libro El año del pensamiento mágico

Una temporada en el purgatorio no solo es una novela que engancha y mantiene la atención de principio a fin, es una magnífica novela que nos trae el sabor de las historias de siempre, de esas con las que tanto hemos disfrutado a lo largo de nuestra vida lectora. Probablemente pase a ser una de mis lecturas favoritas de 2023.
 
Título del libro: Una temporada en el purgatorio
Autor: Dominick Dunne
Nacionalidad: Estados Unidos
Título original: A Season in Purgatory
Traducción: Eva Millet
Editorial: Asteroide
Año de publicación: 2016
Año de publicación original: 1993
Nº de páginas: 348


Comentarios

  1. Hola Rosa, pues no te voy a decir que no. En principio, tengo muchísimos libros pendientes, pero oye que si se me cruza...
    Un besazo

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    1. Es un libro magnífico, pero es que a mí me encanta la literatura estadounidense. Si te animas, espero que lo disfrutes.
      Un beso.

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  2. Menos mal que ya la leí que si no, tras leer esta estupenda reseña, tendría que salir corriendo a por el libro. Me alegra que la hayas disfrutado. Yo repetiré con el autor, sin duda.
    Besotes!!!

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    1. A mí el empujón final para leerlo me lo diste tú con tu reseña y, desde luego, me alegro muchísimo. Ya tenía apuntado Las dos señoras Grenville si saber que eran del mismo autor. Ahora he apuntado también Una mujer inoportuna y Demasiado dinero.
      Un beso.

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  3. Hola, Rosa. No quiero leer este libro, ¡lo necesito! No sé qué me gusta más de todo lo que estás contando. El ambiente, los tejemanejes familiares y de poder, la época, es que lo tiene todo. Creo que me puede gustar bastante con todos estos elementos. Qué curiosa la relación con Joan Didion, otra autora que también me gusta mucho, aunque de momento solo he leído Río revuelto.
    Apuntadísimo.
    Besos

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    1. Es fantástico. Atrapa desde el principio y lo tiene todo: secretos, crímenes, traiciones, una saga familiar tan atractiva como odiosa... una crítica feroz de unos y de otros. Si leíste Retorno a Brideshead, lo recuerda mucho, aunque esta esté ambientada en los años que van de los setenta a los noventa.
      De Joan Didion he leído tres libros, pero solo una novela, Río revuelto también, que me encantó. A ver si leo alguna más.
      Un beso.

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  4. ¡Menudas dos referencias, Rosa! Gatsby y Retorno a Bridshead, nada menos. La apunto sin dudar. Me ha dado una impresión fantástica todo lo que cuentas de ella. Un beso y gracias por la recomendación.

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    1. Seguro que te gusta. Es un enganche total y con mucha calidad. A Gatsby solo lo recuerda en el chico que de repente se ve inmerso en un mundo muy por encima de sus posibilidades, pero d Brideshead tiene mucho y, sobre todo, esa crítica a la familia, aunque aquí hay connotaciones religiosas y de origen que en Brideshead no hay. No la dejes pasar.
      Un beso.

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  5. Una novela con ese círculo concéntrico de "La familia" es pura literatura -y cine- del siglo XX y creo que un buen compendio para comprender este tipo de narraciones. Los saltos o avances temporales también dibujan parte de como evoluciona la sociedad y concretamente los personajes representados en la novela.
    Besos, Rosa, y buen fin de semana.

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    1. Las historias basadas en familias siempre me han atraído mucho y no debo ser la única porque, efectivamente, es un tema muy utilizado en novela y cine. No me extraña porque las familias son un criadero de buenos y malos sentimientos, todos mezclados, que da mucho juego. Aquí se trata de cómo un "intruso", por así decir, influye y se ve influido por esa poderosa familia. Es genial.
      Un beso.

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  6. Buenas tardes, Rosa.

    Leía el principio argumental y pensaba que esta obra no era para mí. Luego seguí leyendo y me topé con las obras de referencia con la que comparas Una temporada en el purgatorio y cambié de opinión. Me has dejado muy intrigada. Apunto este título, que parece fiel a la línea de Libros del Asteroide.

    Un beso, y gracias por la recomendación!!

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    1. Buenas tardes, Undine.
      Depende de los gustos lectores de cada cual. Yo, como amante de la literatura estadounidense, puedo decir que este libro es justamente lo que me fascina. Recuerda a Charles Ryder, más que a Nick Carraway, pero ambos, al igual que Harrison, son personas atrapadas en un entorno en el que son extraños, por mucho que se les admita y se les pida ayuda. Te animo a leerlo.
      Un beso.

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  7. No te diré que la apunto porque esta novela lleva varios años pendiente, pero sí te digo que la rescato del olvido, así que gracias por el recordatorio. Cierto es que recuerda a historias conocidas (y eso que yo no he leído ni El gran Gatsby ni Retorno a Brideshead), pero no es menos cierto que por ello no es menos apetecible y seguro que tampoco menos disfrutable. Lo que no sabía es que Dominick Dunne hubiera sido cuñado de Joan Didion, a la que por cierto tengo intención de leer en breve.
    Besos

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    1. El hermano de Dominick Dunne y marido de Joan Didion, John Gregory Dunne, es también un gran escritor y guionista de cine. Estoy leyendo una novela suya muy buena y muy negra. No creo que le haga reseña porque no doy abasto.
      No dejes pasar Una temporada en el purgatorio. Creo que la disfrutarás. Y también te animo a leer El gran Gatsby y Retorno a Brideshead.
      Un beso.

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  8. Pues si te hace recordar eso dos títulos, mala cosa no será. Yo no he leído nada del autor pero sí me gustan las novelas que nos ofrecen ese recorrido vital, novelas a las que hay que darle su tiempo para conocer la verdad que esconden. Buen aporte, Rosa. Besos

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    1. Es una novela fantástica. Yo tampoco había leído nada del autor, pero con esta ya he tenido para engancharme. A ver si voy encontrando las que me faltan y están traducidas que tampoco son todas.
      Un beso.

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  9. Las historias sobre relaciones familiares y sobre amistades que tienen un papel fundamental (ya sea positivo o negativo) en el desarrollo de aquellas, son muy interesantes, por cuanto vas conociendo hechos, muchas veces ocultos, que tienen una gran importancia para entender su evolución a lo largo del tiempo. Me la apunto.
    Un beso.

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    1. Las relaciones familiares influyen en el amigo externo y el amigo externo influye en la familia, pero siempre es el amigo el más afectado, sobre todo cuando la familia es rica y poderosa y lo embruja con su poder y modo de vida. Lo vimos con Charles Ryder en Brideshead y lo veremos con Harrison en esta magnífica novela que no debes perderte.
      Un beso.

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  10. Bueno Rosa..., me dejas con muchas ganas de esta novela que según dices lo tiene todo, y me dejas con muchas ganas de saber a quién se cargó Constant, a quien asesinó. Intrigas y secretos familiares es un buen caldo de cultivo para que la trama me enganche. esas dos novelas que comentas El gran Gatsby ni Retorno a Brideshead yo no las leí, aunque claro, la peli del El gran Gatsby sí la vi, no recuerdo exactamente qué versión porque sé que hay mas de una, pero sí tengo en la cabeza un gran recuerdo de ella, que me fascinó. Y me quedo también intrigada respecto Retorno a Brideshead, otra novela que parece haber gustado mucho también a alguno de tus comentaristas
    Me la llevo, sin duda, aunque no se cuando caerá, últimamente por diversas circunstancias estoy leyendo algo menos y tengo varias cosas en la cabeza que me apetecen también mucho
    Un beso!

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    1. En 1974 quedé fascinada con la película El Gran Gatsby. En 1981 fue la serie de TV Retorno a Brideshead. En ningún caso sabía que había una novela. Cuando me enteré me apresuré a leerlas. Varias veces he visto serie, película y leído los libros. Son historias de esas que enganchan y que recuerdas siempre con la maravillosa sensación de placer que te causaron.
      Una temporada en el paraíso no me atrevo a decir que se tan buena, pero la sensación que te deja y el enganche que te produce es muy similar. Y sí lo tiene todo. Aparte de lo que mencionas: secretos familiares, intrigas, asesinatos... tiene una dura crítica hacia esas familias ricas, pero no ilustres, esos nuevos ricos que no son admitidos por nuevos, por católicos y por irlandeses. Y también crítica hacia los WASP, no olvidemos que el autor vivió un ambiente similar a los Bradley como católico e irlandés. Si puedes, no te la pierdas.
      Un beso.

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  11. ¡Hola, Rosa! Pues una novela realmente atractiva, como dices de esas que uno siempre disfruta. Ya la preguntita inicial es toda un carta de presentación de que el autor en esta historia no va a andarse por las ramas y va a mostrarnos unos personajes de carne, hueso y entrañas. Los que de verdad te atrapan. Las referencias literarias a Fitzgerald y Vaughn sin duda también animan a descubrirla. Un abrazo!

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    1. Es de esas novelas que te atrapan y no te sueltan, al igual que lo hacen El gran Gatsby o Retorno a Brideshead. Una crítica despiadada de un mundo que el autor debía conocer muy bien porque era el suyo propio. Igual critica al irlandés católico que quiere auparse a costa de lo que sea, como a los protestantes que no permiten que ningún advenedizo, hijo de carnicero, se ponga a su nivel. De no perdérsela.
      Un beso.

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  12. ¡Hola, Rosa!
    No he leído a Dominick Dunne y sin duda que con tu reseña has despertado mi curiosidad por el autor.
    "Una temporada en el purgatorio" tiene una trama que me atrae mucho, el poder, el dinero, la ambición, los secretos, las mentiras... el lado más oscuro de las clases altas norteamericanas.
    Y si además dices que probablemente pase a ser una de tus lecturas favoritas de este año, pues sin duda, es una novela que deseo leer.
    Te cuento que yo también siento cierta fascinación hacia los Estados Unidos, a pesar de todas sus sombras, hay que admitir que también tiene bastantes luces. A diferencia de Europa, es un país que conozco bastante bien y que he visitado en distintas oportunidades, creo entender esa atracción que ejerce sobre ti ;)
    Por cierto, caso curioso, pero los libros de esta editorial siempre llaman mi atención.
    Un besote.

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    1. Ay, Marianna, Dominick Dunne ha sido un descubrimiento de los más importantes de este año. Su novela me ha gustado muchísimo, me ha enganchado, me ha recordado esas otras tan icónicas que menciono.
      Mi fascinación por estados Unidos viene, lógicamente del cine y la literatura. Cuando viajé por primera vez, en 2009, pensaba que me iba a decepcionar y que esa idea literaria que yo tenía se me iba a derrumbar como un castillo de naipes. Visitábamos el norte de Estados Unidos y parte de Canadá y yo pensaba que Canadá me gustaría mucho más. La sorpresa fue que mientras en Estados Unidos me sentí super cómoda y me resultó un país asequible donde todo era fácil (hablo como turista, claro, la vida allí para una gran cantidad de gente debe ser muy dura), mientras que en Canadá estuve peor. La gente era como más estirada y para el turismo todo más complicado. Imagino que captas lo que quiero decir. tendría que extenderme mucho para poder explicarlo bien. Lo que pasa es que una cosa es lo que resulta un país para el visitante ocasional y otra, para los que viven allí. Es entonces cuando las sombras brillan más que las luces.
      Un beso.

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  13. Hola Rosa!! Tiene muy buena pinta esta novela, me llevo bien anotada tu recomendación. ¡Gran reseña y gracias por el descubrimiento! Besos!!

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    1. Es de esas novelas que cuando lees estás deseando tener un rato para volver a ella y cuando la terminas estás deseando volver sobre el autor. Yo me estoy reprimiendo porque no suelo leer al mismo autor muy seguido, pero no tardaré.
      Un beso.

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