"Las chicas de campo" Edna O'Brien

La primera entrega de esta Trilogía de Kate y Baba ha supuesto una pequeña y, espero aunque no lo tengo nada claro, transitoria decepción. Me explico. Normalmente, cuando leo una trilogía o tetralogía o serie en general, suelo dejar pasar varias semanas e incluso meses entre una entrega y la siguiente. Esto es posible porque cada una de ellas tiene entidad por sí misma. Otra cosa son las novelas en dos o más volúmenes que a veces sacan las editoriales como sucede con los dos volúmenes de "Los miserables" de Víctor Hugo que sacó en su día El Círculo de Lectores y que como no podría ser de otra manera, leí seguidos.

Mi idea acerca de esta trilogía era que, como tal trilogía, se trataba de tres novelas, cada una con su título y publicadas en diferentes momentos. Esa idea es además la correcta. Las tres novelas se publicaron independientemente en 1960, 1962 y 1964 respectivamente. Si tengo que juzgarlas como tales obras independientes, tras leer la primera he de decir que la historia se me queda muy coja. Termina y me deja con la sensación de algo inacabado, con poca consistencia, en roman paladino, una sosería. 

Por supuesto, mi opinión no sería esa si, con la idea de la novela en tres tomos, hubiera empezado de inmediato la "continuación" que supondría entonces "La chica de ojos verdes". Hubiera leído los tres volúmenes seguidos y hubiera esperado a terminar el último para poder opinar. Esa es la razón de mis palabras acerca de que espero que la decepción sea transitoria: puede que cuando haya leído las tres, la historia cobre empaque y mi opinión se vuelva favorable. Trataré de tomar por novela lo que se supone trilogía y opinaré del resultado final cuando llegue a él, pero mientras tanto, hablaré de "Chicas de campo" por sí misma, de sus defectos y de sus virtudes.

"Desperté sobresaltada y me incorporé de inmediato. Únicamente me despierto de esa forma cuando algo me angustia; aun así, en un primer momento no entendía por qué tenía el corazón tan acelerado. Entonces recordé. La razón de siempre: él no había vuelto a casa todavía". El día en que iba a cambiar su vida para siempre, Caithleen se despertó con una sensación tan temida como conocida. Su padre aún no había vuelto. Llevaba fuera tres días y se había ido con el dinero necesario para pagar los impuestos. Caithleen, a sus catorce años, ya sabe lo que es el miedo. Tiene miedo a su padre y tiene miedo a Baba, su mejor amiga. Casi tanto como a su padre. También teme esas ausencias de su padre, no por la ausencia en sí, siempre bienvenida y de agradecer para ella y para su madre porque el padre es violento y autoritario, las teme por lo que significan, por lo que puede venir tras ellas, por la duda de "si lo traerían en ambulancia, o en un taxi inglés contratado en Belfast tres días atrás y con la cuenta sin pagar. En si remontaría, tambaleante, los peldaños de piedra de la puerta trasera mientras agitaba una botella de whisky. En si gritaría, si forcejearían, si la mataría, si le pediría perdón. En si aparecería por la puerta en compañía de algún borrachuzo, diciendo: «Madre, te presento a mi mejor amigo, Harry. Le acabo de dar el prado de trece acres a cambio del sabueso más bonito del mundo…». Todo eso ya había sucedido tantas veces que sólo un iluso podría pensar que mi padre volvería sobrio".

No consigo entender al personaje de Baba. O, si decido entender al personaje, no entiendo la amistad que por él siente Caithleen. Así es que no sé a quién entender. No sé si quiero entender a Baba en su carácter caprichoso, egoísta, insultante, carente de respeto por "su amiga"; supliendo con sus ataques verbales y sus insultos una inteligencia en la que Caithleen la sobre pasa con mucho. "[...] no eres más que una pueblerina idiota y ni siquiera te lavas en el baño, por los clavos de Cristo. Unas palanganas en el lavadero y una manopla que ha cosido tu madre con algún harapo. ¿Para qué queréis cuarto de baño?". No sé si quiero entender esa relación tóxica, esa amistad dañina. Y aun así, son amigas y lo serán durante mucho tiempo. Al menos durante todo el recorrido de esta novela por la adolescencia y la juventud de ambas, porque las circunstancias las obligan a compartir casa y familia, colegio y, finalmente habitación y libertad en Dublín.

La novela describe dos transiciones paralelas. Por una parte, la de la adolescencia de las dos chicas (tienen catorce años cuando comienza la novela) a su juventud. La adolescencia está representada por el pueblo del que son originarias, un pueblo cercano a Limerik, un lugar cerrado donde todos se conocen y donde los comportamientos de cada cual quedan a la vista de todos y a merced de las murmuraciones. Un lugar idílico, por otra parte a cuya atracción Caithleen nunca podrá sustraerse. El campo, la granja, la laguna, las turberas... "Vi la ciénaga, los lirios que florecían allí y los parches de tierra ennegrecida donde previamente habíamos hecho hogueras para calentar agua; y el brezo que me rozaba los tobillos, y las imponentes crestas calcáreas que surgían de la tierra parda y violácea"Pero es un paisaje al que hay que renunciar, una trampa que atrapa a no ser que se sepa huir a tiempo. La libertad está en Dublín y allí terminarán las dos chicas después de pasar unos años en un convento estudiando. 

Es en el campo y a los catorce años cuando Caithleen descubrirá el amor. Un amor romántico, platónico. No podía ser de otra manera. Toda su educación sentimental se había gestado en las novelas, un amor que arrastrará hasta el final del libro. "El señor Gentleman era un hombre muy apuesto que vivía en la casa blanca de la colina. [...] jugaba al ajedrez por las noches. Era abogado en Dublín, [...] Su verdadero nombre no era señor Gentleman, claro está, pero todos lo llamábamos así". Una presencia constante, aunque intermitente, que Caithleen se llevará con ella a todos los lugares en los que la veremos en esta historia.

La otra transición, la del campo a la ciudad, se dará con su llegada a Dublín a donde llegan ya con unos diecisiete años. El tiempo ha atemperado el mal carácter de Baba. Ya no insulta con tanta alegría a Caithleen, pero sigue siendo quien toma todas las decisiones y quien impone su criterio, no siempre el más acertado. Las relaciones con chicos van ganando importancia. Kate, más romántica, busca el amor. "[...] lo que queremos son hombres jóvenes. Un idilio. El amor, esas cosas". Y eso que ella ya tiene su dosis de amor y a su señor Gentleman, aunque no se sienta muy segura, aunque las largas etapas de soledad la impulsen a buscar "hombres jóvenes. Un idilio"Baba no se enamora. Más práctica que Caithleen, buscará en los hombres un rendimiento material que la irá haciendo más cínica. "Los de nuestra edad están sin blanca. Por lo menos los majaderos que conocemos nosotras, que apestan a brillantina y te llevan a las montañas de Dublín a respirar aire puro y, como mucho, te invitan a un té en cualquier fonda cochambrosa. De eso nada. Aire ya tenemos suficiente. ¡Lo que queremos es vida!"

Las muy diferentes aspiraciones de ambas amigas las irán distanciando, hasta que la separación espacial llegue a hacerse efectiva. Y la novela se termina tan de repente que parece que nos han escamoteado la mitad de la historia. Nos quedamos a medias del discurrir de las vidas de las dos chicas. Se cortan sus peripecias con tal brusquedad que no es propia de una novela que se supone con entidad propia por mucho que dos años después se escribiera una segunda novela que continúa con la historia.


Edna O'Brien

La novela está inspirada en episodios autobiográficos de la autora y cuando se escribió parece ser que supuso todo un escándalo en Irlanda. En un artículo de El País de noviembre de 2013, cuando se tradujo por primera vez la novela al castellano, leo "El libro fue un escándalo en su país, y el párroco de su aldea quemó tres ejemplares en la plaza pública. O’Brien se enfrentó a una persecución en toda regla, señalada por todos sus paisanos como enemiga de Irlanda y una escritora escandalosa". Y de verdad que no lo entiendo. No sé dónde está el escándalo. Es cierto que corrían los años sesenta por la muy católica Irlanda, pero las dos amigas me parecen más bien unas jóvenes ingenuas, bastante metidas en su rol de mujeres que dependen de los hombres. Una por amor y otra por intereses, ambas juegan un rol muy tradicional y nada revolucionario desde mi punto de vista. 

Se habla de escenas de sexo bastante explícitas en el origen del escándalo. Habré estado muy distraída (tampoco puedo descartarlo), pero en ningún momento he sido consciente de tales escenas. La declaración de Edna O'Brien, en el mismo artículo de El País citado más arriba, en el sentido de que "Es la historia de dos chicas, pero en realidad, narra la historia de la Irlanda de esa época" me resulta, cuando menos, exagerada.

No sé qué opinaré cuando lea la próxima entrega. Tal vez, juzgada como obra completa, la trilogía cobre empaque y me llegue a convencer, pero hoy por hoy, me quedo con toda seguridad con la Edna O'Brien de "Las sillitas rojas".

Esta novela entra en el IV reto "Nos gustan los clásicos" por estar publicada antes de 1980. "Las chicas de campo" está publicada en 1960.

Esta novela entra también en el II reto  "Cabalgando entre clasicospor estar publicada antes de 1970. 

Título del libro: Las chicas de campo
Autora: Edna O'Brien
Nacionalidad: Irlanda
Título original: The Country Girls
Traducción: Regina López Muñoz
Editorial: Errata Naturae
Año de publicación: 2013
Año de publicación original: 1960
Nº de páginas: 304

Comentarios

  1. No sabía que supuso un escándalo. Es más, no conocía a la autora. Gracias por este acercamiento. Un saludo!!

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    1. Un escándalo que yo no entiendo. Puede que algo se me haya escapado, pero no sé qué ha podido ser.
      Un beso.

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  2. No es mi estilo, pero me resulta llamativo e interesante lo que nos cuentas. Muchos besos.

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    1. Me alegro de que te haya llamado la atención. Espero que tras leer las siguientes entregas varíe mi opinión y se haga un poco más favorable.
      Un beso.

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  3. Buen día, Rosa.

    Me ha llamado la atención que la novela haya tardado más de medio siglo en ser traducida al castellano. Por otro lado, quizás la historia tome otro color cuando la trilogía sea completada. Esa temática de la salida de lo rural a lo urbano y posteriormente -si sucede- una vuelta a los orígenes suele tener buenos resultados en cine y literatura. No siempre, claro.

    Besos.

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    1. Creo que no hay vuelta a los orígenes porque la historia es bastante autobiográfica y la autora ha terminado viviendo en Londres.
      La novela ha tenido grandes elogios por gente de la que me fío mucho. Yo, de momento, prefiero la primera novela de "Las dos amigas". Me pareció más compacta y original, y la tetralogía completa me gustó mucho. A muchos les parecerá un sacrilegio lo que digo, pero es lo que hay.
      Sí que es curioso que tardara tanto en traducirse.
      Un beso.

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  4. Ufff, pues ya ves, por ejemplo a Inés no le gustó nada Las sillitas rojas y me dijo que solo pensaba leer esta serie de la autora. No sé yo que va a pensar si te lee ahora. Yo voy a leer esta semana La chica, a ver qué me parece.
    Besos

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    1. Me encantará leer tu opinión sobre "Las chicas de campo". A ver si coincidimos. Por cierto, veo que pones "La chica". ¿Vas a leer "Las chicas de campo" o "La chica de campo"? Yo hubo un tiempo que creía que era la misma.
      A mí, sin embrago, "Las sillitas rojas" me gustó mucho. Ya nos contarás.
      Un beso.

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  5. Hola.
    Pues ya han tardado en traducirla.
    Ojalá mejore en la siguiente entrega.
    Feliz día.

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    1. Sí que han tardado, sí. Espero que mejore o al menos enterarme de cómo continua la historia.
      Un besito.

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  6. Entiendo muy bien tu decepción, Rosa, que habrá sido mayor cuanto mejor te haya parecido la historia. A mí me da mucha rabia cuando leo algo y descubro, justo al final, que aún faltan más partes.

    Respecto a lo que nos cuentas, parece una historia agradable de leer, sin más. Como tú dices quizás con la visión que pueda ofrecer el haber leído las tres novelas, el criterio cambie. Esperaré a que nos des tu opinión entonces :))

    ¡Un beso enorme!

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    1. La historia se lee muy bien y está muy bien escrita. Con mucha sencillez, pero no termina de llegarme. A veces me ha parecido que la chica era un poco como autista. Lo que aguanta de la amiga no está justificado y otras cosas que no quiero desvelar. Y ese final tan brusco... En fin, a ver cómo sigue.
      Un beso.

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  7. ¡Hola, Rosa! Quien sabe si ese escándalo fuera impulsado por la propia editorial, ya sabemos que el escándalo es un reclamo comercial de primer orden. Hablando de trilogías, pienso que cada novela o película tiene que ser un valor por sí misma. No es excusa para una novela que el lector ha comprado el decir que forma parte de una trilogía y que para comprenderla en su totalidad y valorarla en consecuencia el lector deberá hacerse con las otras dos. No, el lector que compra un libro tiene el derecho a que ese libro sea un valor en sí mismo. Será trabajo del autor el ofrecer otras perspectivas de la historia igualmente interesantes en las siguientes entregas, pero no una excusa para justificar que esa primera novela sepa a poco.
    un fuerte abrazo, Rosa!

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    1. Pues no me pega que fuera promovido por la editorial. Parece ser que hasta el párroco del pueblo de la autora quemó ejemplares en público.
      Yo estoy de acuerdo contigo en que, aunque formen parte de una trilogía las novelas tienen que tener entidad por sí mismas y no dejarte a medias de una historia. Pasaron dos años entre cada publicación y no se puede vender una novela por entregas con dos años entre cada entrega. Con la serie de "Las dos amigas", que son cuatro novelas, en ningún momento tuve esa sensación de falta de algo.
      Igual he leído la novela con poca atención, pero de ser así, es porque ya me fallaba algo que me atrajera lo suficiente.
      Un beso.

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  8. En la Irlanda católica al menos, la mojigatería censora de los 60 era tan intensa como la de la España de los 50 en cuestión de formas, educación, comportamientos y lecturas. ¿Por qué será que los libros siempre son los primeros en pagar las consecuencias de los estrechos de miras?
    Acabo de terminar otro libro, este más actual, titulado -engañar a la muerte- cuya historia también se dirime en tierras irlandesas principalmente. Y certifico que todo el que la visita se enamora de sus paisajes e incluso de la alegría de la juventud que la habita, pero los que viven allí sin embargo detentan la opresión de lo limitado, del no poder cambiar de aires ni de poder huir de normas restricciones y una subterránea sospecha del entorno.
    Agradezco como siempre tu reseña.
    Un beso.

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    1. La verdad es que no he leído mucha literatura irlandesa, pero la que he leído, esta incluida, da una imagen del país triste y gris. Entre las nubes, nieblas y lluvias, y la grisura que contagia el conservadurismo, la iglesia, la cerrazón, aquellos años tuvieron que ser terribles. Eso sin meter en la ecuación la variable que supuso el IRA con su terror de muertos y la represión correspondiente por parte de los ingleses.
      Creo que tenemos muchas cosas en común, pero nosotros hemos salido antes, al menos, de la opresión de la iglesia. Allí aún está muy presente. Más que aquí me da la sensación.
      Un beso.

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  9. A pesar de la decepción transitoria me ha llamado la atención, creo que la voy a apuntar para más adelante. Irlanda fue, y sigue siendo un territorio de fuerte poso religioso y con tradiciones bastante anacrónicas, en los sesenta más, no me extraña demasiado el episodio que cuentas que vivió la autora.
    Gracias.
    Un beso.

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    1. No me arrepiento de haberla leído y de hecho leeré las otras dos novelas. No es que no me haya gustado es que me esperaba más y ha quedado por debajo de mis expectativas. No obstante, tiene su interés, está muy bien escrita y, sin ser "la historia de la Irlanda de esa época", como ha declarado la autora y a mí me parece exagerado, sí que muestra algunas cosas interesantes. Ojalá te guste.
      Un beso.

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  10. A nosotros nos parece anodino, pero como dices levantó en su día ampollas en la católica Irlanda. Es bueno tenerlo en cuenta para saber de dónde venimos y donde podemos volver como demos un traspiés. Me viene a la cabeza "La Regenta" o "Electra" de Galdós (esta era una obra de teatro), también muy polémicas y ahora...Aunque al menos "La Regenta", quitando algo de paja, se sigue leyendo muy bien.
    Un abrazo.

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    1. No he leído Electra. Puedo entender el escándalo de La Regenta, incluso hoy podría resultar escandalosa esa relación entre el Magistral de la catedral y Ana Ozores. Aquí puede haber escándalo moral también porque Baba busca a los hombres para que le resuelvan la parte económica y material de la vida, pero sigue pretendiendo depender de un hombre y Kate planea escapar con otro hombre. De verdad que el escándalo de las jóvenes rebeldes e independientes se me escapa por todas partes.
      Un beso.

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  11. Recuerdo haber apuntado en pendientes este libro cuando se editó en España. No terminaba de llamarme, y veo que quizá la historia no termine de llegar nunca a mis manos.
    Por otro lado, me parece interesante entender las sagas como un todo, como una historia completa en lugar de dividirla en novelas. No obstante, reconozco que soy más de juzgar la parte por el todo, y si una de las entregas me hace perder el interés, mal vamos.
    Me hace gracia que ese escándalo del que tanto se hablaba brille por su ausencia. Si es que a veces hay más chicha en la publicidad de un libro que en la propia historia que cuenta.
    Un abrazo.

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    1. Como he dicho más arriba, algunos me tratarán de sacrílega por decir esto, pero con un solo libro leído de la trilogía, creo que la tetralogía de Elena Ferrante es más interesante en estos tiempos. Su visión de Nápoles (ciudad que conocí este otoño y que me fascinó y repelió a partes casi iguales) está magistralmente transmitida y cada novela termina y puedes tardar años en leer la siguiente y sigue teniendo entidad propia.
      Yo estoy acostumbrada a eso. A leer una entrega de una serie y a lo mejor tardar años en leer la siguiente, pero en este caso es que te pide leer la continuación de seguido porque es eso, una continuación en el más amplio sentido de la palabra. Imagino los lectores de 1960 esperando dos años a que se publicara la segunda novela y sin saber si se iba a publicar.
      Un beso.

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  12. No sería la primera trilogía que en realidad está contemplada como novelas que continúan y sin final cerrado. Entiendo perfectamente tu decepción. Una se siente un poco estafada cuando le ocurren estas cosas.

    Cuando leí Las sillitas rojas al principio me costó meterme en el libro. Llegué incluso a plantearme abandonarlo (menos mal que no lo hice). Indagando opiniones de otros lectores para ayudarme a decidir si continuaba o no con la lectura, curiosamente me encontré con bastantes en las que destacaban que lo que más les había gustado era el principio y que les recordaba a la Edna O'Brien de La trilogía de las chicas de campo. El resto del libro ya no les había satisfecho tanto. A mí me ocurrió al revés, hecho que, además de constatarme una vez más que a menudo voy contracorriente, no me animó en su momento a plantearme la lectura de estas tres novelas.

    A pesar de que no te noto plenamente convencida con esta lectura y no solo por ese abrupto final, no me desagrada lo que cuentas de ella: la relación entre las dos amigas, el paso de la adolescencia a los primeros años de la juventud y el contraste entre el ambiente más rural y provinciano del origen a ese otro más urbano y supongo que también más abierto a pesar de tratarse de la Irlanda de aquellos años. De todas formas, voy a dejar que me hagas un poco de conejillo de indias y esperar a que leas los dos libros que te faltan y nos cuentes.

    Besos

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    1. Encantada de ser tu conejillos de indias. A ver qué me deparan los dos libros restantes que leeré seguidos y reseñaré en una sola entrada.
      A mí "Las sillitas rojas" me costó un poco. En ningún momento me planteé abandonar y cuando me pilló, me pilló del todo. Cierto que tiene cosas que pueden desconcertar como ese cambio entre las dos partes, pero todo me interesa en ella, me pude apetecer más un tema u otro, pero todo me engancha y me tiene pegada a las páginas.
      Esta novela tiene cosas que también me han gustado. Lo que le reprocho es ese final abrupto que requiere un continuará para empezar a leer a continuación. Es que además termina en lo más interesante y hasta con intriga.
      Igual es que yo entendí mal la historia. Ya te contaré.
      Un beso.

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  13. Inquietante me gusta lo que he leído
    tiene todo lo que me gusta
    tu diseño es perfecto
    ¿lo será también el libro?

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    1. Pues ya ves por lo que cuento, que a mí el libro muy perfecto no me ha parecido. Gracias por atribuirle perfección a mi "diseño".
      Un beso.

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  14. Te doy mi interpretación sobre tu decepción que yo entiendo. Además de que forma parte de una trilogía y la novelista es evidente que lo tenía así planteado, la decepción deriva de la pila de años transcurridos desde que se escribió (1960). Yo supe de esta novela por un amigo que estuvo de lectorado en England allá por el año 1976; él la leyó en inglés recomendada por un compañero del centro donde estaba. Era en ese momento una lectura escandalosa viniendo además de la católica Irlanda.
    Dejando a un lado esta consideración y si nos ponemos en contexto y situación hay que reconocer que estas dos chicas son avanzadísimas para su época. Yo como estaba avisado cuando la leí en la traducción al español me agradó y más porque proseguí con las otras dos hasta completar la trilogía. Constituyen una apuesta decidida por otro papel para la mujer en el mundo. Y más siendo chicas de campo, algo muy distinto a la progresía que se les supone a las de ciudad y el conservadurismo a las de campo. Literariamente me parecieron bastante tradicionales, si bien en la última se produce un depliegue formal más avanzado.
    Lo que no negarás es que son novelas que se leen muy bien y que suponen una clara superación de la novela sentimental anterior en la que las mujeres alcanzaban sus metas con el matrimonio y la maternidad. Aquí no, aquí estas chicas o mujeres se quieren realizar como seres humanos capaces de algo más que eso aunque sin desdeñarlo tampoco porque es algo que las completa como personas.
    Bueno es evidente que a mí me gustaron. Pero en tu descargo te diré que pusimos "Las chicasd e campo" como lectura en la tertulia hace unos años y en especial a las tertulianas no les gustó. Les pareció antigua, pasada, superada, que no enganchaba; que, en ocasiones, era algo surrealista y por ende poco creíble; que era muy poco original; que era muy aburrida; que si tal y que si cual. En fin que me dieron pal pelo, un repaso guapo guapo.
    Venga, chica, un beso

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    1. ¿De verdad te parecen chicas avanzadas para su época? Una tratando de sacar de los hombres todo lo que pueda por los medios que sea; la otra enamorada de un hombre que puede ser su padre y esperando durante años que vaya a visitarla y dispuesta a huir con él. Yo las veo más bien un tanto dependientes de los hombres, como era habitual en la época. Lo de irse a la ciudad a trabajar en un ultramarinos me imagino que sería típico también de aquella época en los pueblos de Irlanda.
      De verdad que no veo el escándalo.
      Respecto a lo de que la autora pensara hacer tres partes me parece bien, pero puesto que son tres novelas y no una entres volúmenes, cada una tiene que tener una cierta independencia y aquí según terminas la primera te pide empezar la segunda (que igual es lo que tenía que haber hecho). ¿Qué hicieron los lectores en la época que tuvieron que esperar dos años para saber lo que pasaba con las chicas un minuto después de terminar la primera? Aparte de que como novela sola resulta un poco sosa.
      Sí que está muy bien escrita y se lee muy bien y tiene cosas que me han gustado como el ambiente del pueblo, de la familia de Kate y de la de Baba tan distintas ellas.
      Pobre. Menuda tertulia pasarías. Yo no la tacho ni de aburrida, ni de poco creíble; tal vez sí de poco original, aunque en 1960 igual era original.
      Ya te contaré cuando lea el resto.
      Un beso.

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  15. Desde luego que si en una trilogía la primera novela no engancha, es para dejarlo correr. Pero si, en este caso, las supuestas novelas 'independientes' resulta que no lo son y necesitas leerlas como un ente único para que te atrapen, entonces creo que el mensaje de la editorial o de quien se dedicó a hacer creer que eran historias libres, fue engañoso, algo que, para mí, ya es otro motivo para no seguir leyendo.
    El libro puede que no sea perfecto porque lo has dejado muy clarito (guiño cómplice) pero tu reseña sí que es tan buena como es habitual. A mí, también me gusta lo que he leído ;)
    Un beso.

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    1. Es que si las siguientes entregas siguen la tónica de esta, tomando la obra como una novela entres tomos, puede resultar muy gratificante. Esta parte ha sido buena y cuenta cosas interesantes. Además está muy bien escrita, con sencillez, pero contundencia. Las leeré seguidas y en breve y ya daré una opinión general.
      Un beso.

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  16. Hola Rosa, tengo a la autora pendiente y mi idea era empezar por la Trilogía de Las chicas del campo que era la que me habían recomendado. Lo curioso es que nadie me hablará de esa falta de entidad de cada novela, ni la necesidad para entenderla de leerlas seguidas. Ahora entiendo porque las vi en una librería publicadas todas en un solo volumen. Vuestros comentarios han despertado mi curiosidad y espero ponerme con ella en cuanto sea posible. Besinos.

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    1. Entenderse se entienden, lo que pasa es que te quedas a medias con la historia en un momento crucial, creo yo. pero vamos que no es más que mi opinión y habrás visto otras muy diferentes, porque la tónica general es que la trilogía gusta y mucho. Puede que como obra completa y leída seguida, cuando termine los tres volúmenes, a mí también me guste y varíe mi opinión. Y hasta puede que haya leído esta novela en un momento poco afortunado y de haberla leído en otro, me hubiera parecido otra cosa.
      Tengo muchas ganas de leer tu reseña y otras para ver qué contáis.
      Un beso.

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  17. Autores irlandeses en mi blog hay cuatro, y ha sido siempre un acierto cada lectura; Joyce, Jennifer Johnston, James Stephens y Walter Starkey, recuerdo especialmente a James Stephens, en una de las mejores novelas que he leído, "La hija de la mujer de la limpieza", memorable.

    Edna O´Brien siempre la tengo ahí, en el punto de mira. Hay aspectos llamativos en tu comentario, ciertamente esa relación amistosa resulta un tanto "marciana", ¿no?, igual que el final según tu parecer, algo desconcertante. Dicen que esta novela es de las mejores que tiene la autora, pero la experiencia de cada lector con un libro es única, y ese es el atractivo de acercarte a otras impresiones, como la tuya, con tan buenos argumentos.
    Un beso, Rosa.

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    1. No he leído ninguno de esos autores irlandeses que mencionas y tan solo conozco de nombre a James Joyce (ah, "Ulises" y mi eterna deuda con él).
      Acabo de empezar la segunda parte de la trilogía y no se puede negar que está muy, muy bien escrita, de forma sencilla y hermosa. A ver cómo va evolucionando mi opinión, pero sigo pensando que no puedes leer tres novelas para decidir si te gusta la primera. Te tiene que gustar por sí misma.
      Ojalá la leáis varios más y me deis vuestras opiniones. De momento solo tengo dos más, una buena y una mala.
      Un beso.

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  18. Hola Rosa, cuando vi que habías escrito la reseña de esta novela ni siquiera tuve interés de ver lo que decías.
    Me explico, me interesaba tu opinión pero, empecé la trilogía con mucho interés, incluso encargué a la librería el siguiente título. Fue una decepción, la tercera novela se me caía de las manos; me pasaba como a ti, no entendía a los personajes y mucho menos sus reacciones.
    Ahora que ya han pasado un par de años, apenas la recuerdo y no son libros que vuelva a releer.
    Sigue con este trabajo que te has buscado. Aunque no soy una seguidora fiel, me gusta encontrar las novedades que nos presentas y que suelen alegrarme. Un abrazo

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    1. Me encanta ver que hay más gente que piensa como yo. la verdad es que, salvo tú ahora, solo me había llegado otra reseña negativa, el resto son bastante elogiosas. Estoy ahora con la segunda parte y me refuerza en mi opinión, aunque he leído muy poco ciertamente, pero como siga así, paso de la tercera.
      Lo que más me llama la atención es que se considere a las chicas muy avanzadas para su época. A mí me parecen totalmente tradicionales en su comportamiento con los hombres cada una a su manera. A ver cómo sigue, pero no le veo buena pinta.
      Un beso.

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