"El rodar de un agua interminable" Sara Mañero
«Quisiera hablarte del mar, pero no puedo. Se me olvidó cómo se mecen las olas. Sin embargo, aún recuerdo el sonido del agua al rasgar las piedras de la playa en una despedida perpetua. O quizá no era un adiós; tal vez se trataba de una caricia, como decía Lara, porque ¿quién sabe cómo acaricia el mar? Yo, desde luego, lo ignoro. Se me olvidó sentirlo en mi piel, olerlo, acompasarme a su ritmo, que sé era otro. Solo la melodía de su adiós me acompaña desde entonces y por eso, aunque lo deseo con toda la intensidad del recuerdo, no logro encontrar las palabras que te expliquen su aroma, la textura de su sal, el cabeceo de sus ondas, porque me da miedo confundir la memoria. Es tan fácil traspasar el límite entre lo evocado y lo soñado que, a veces, se me escapa la mirada tras un sueño y pienso: "Sí, ya ves, ese era su azul, esas, sus gotas salpicándome el rostro, esa, su luz al cegar mis ojos", y soy feliz por un instante, hasta que comprendo que no es posible, que me equivoco, que el azul debería incluir el verde y el blanco y el amarillo, que las gotas no revolotean, ni saltan ni se funden hasta formar una estela de espuma, que la luz es demasiado nítida, demasiado transparente. Sí, tan fácil es confundirse. Sin embargo, su melodía al susurrar entre los guijarros me acompaña siempre, sin que jamás haya necesitado ensoñarla, pese a ser posible que nunca haya alcanzado a trasmitirte sus timbres. Por eso hoy he decidido retornar a aquellos días, con el firme deseo de recuperar el mar y lograr acercártelo, para que puedas hacer tuyo lo que yo perdí, lo que apenas has conocido».
Juana habla del mar que perdió a la vez que perdió su nombre. Porque Juana una vez se llamó Xoana y vivió con sus padres y sus hermanos en una aldea gallega cercana al mar. Juana nos cuenta sus vivencias mucho después. En realidad se las cuenta a alguien, ese alguien al que se refiere en segunda persona y que tardaremos en saber quién es. Pero no importa porque la historia de Juana, que está totalmente imbricada en la Historia de España, nos absorbe por completo.
La historia de Juana empieza en 1833. En ese momento, la que todavía es Xoana tiene diez años y va a empezar a trabajar para la señora del pazo grande, la viuda doña Pilar, con quien viajará a Madrid alejándose para siempre, aunque ella aún no lo sabe de su aldea y de su familia. La historia de Juana nos llevará hasta 1870 y será completada por la persona destinataria de sus memorias.
Juana en Madrid será testigo presencial, privilegiado por la situación de doña Pilar en la corte, de los acontecimientos históricos que sacudieron a España en esos años turbulentos. La muerte de Fernando VII, la primera Guerra Carlista seguida después por las demás; la regencia de Maria Cristina al ser Isabel II una niña de tres años cuando muere su padre; el exilio de María Cristina y la regencia de Espartero; la declaración de mayoría de edad de la reina a los trece años para evitar males mayores. Además asistiremos a revueltas populares, cierre de las Cortes, varias constituciones y a la alternancia en el gobierno de las distintas facciones que ya por entonces, creo que desde siempre, dividían a los españoles: liberales, progresistas, moderados...
«Ya ves en qué época revuelta se formó mi espíritu. En un país en guerra, dividido entre los carlistas absolutistas, los de don Carlos, y los liberales isabelinos, o cristinos. También así se llamaban, por María Cristina, la gobernadora, y que a su vez se dividían entre progresistas y conservadores. Pero incluso entre estos últimos había grupos bien diferenciados: los doctrinarios, los puritanos y los autoritarios formaban parte de los segundos; entre los primeros, se distinguía a los doceañistas, a los parlamentaristas, a los constitucionalistas y a los puros. Un mundo fragmentado que, por imposible que te parezca, aún se rompería más, y en el que era necesario tomar partido, elegir un bando».
A la vez y alternándose con las memorias e Juana, asistiremos a otra historia, contada en tercera persona y que comienza con el entierro de Carmen, la abuela de Carmina, ya centenaria, en algún momento del último cuarto del siglo XX. Carmina y su abuela han estado distanciadas durante muchos años, pero han terminado por reconciliarse. Nunca se llevaron especialmente bien. Carmen era una mujer liberal, partidaria del sufragio femenino, amiga de mujeres avanzadas para su época y quiso educar a Carmina en esa línea, pero la joven le salió falangista.
Si Juana fue testigo de los convulsos acontecimientos del siglo XIX, Carmina vive inmersa en los del siglo XX: República, Guerra Civil, posguerra. Ambas asisten a los enfrentamientos ideológicos de las dos Españas, pero mientras Juana va adquiriendo un talante más progresista, Carmina se va decantando por la iglesia, la familia, la mujer como madre y esposa. Todo lo contrario, en definitiva, de lo que su abuela Carmen le quiso transmitir. El enfrentamiento era inevitable.
«−Estamos sanas, sí, pero no bien. Es difícil estar bien tras lo vivido.
−Pero pronto lo olvidaréis, abuela, y arreglaremos Madrid y todo será como antes.
−Nada volverá a ser como antes, ya lo verás. Podréis arreglar las calles y las casas, podréis destapar a la Cibeles o a Neptuno, pero no podréis cambiar los recuerdos. ¿Crees que vamos a poder borrar de nuestra memoria los bombardeos, los incendios, los muertos por las calzadas, el hambre, los gemidos, el silbido de los obuses?
− Dicen que era preciso.
−¿Tus amigos lo dicen?
−Sí, para salvar a España.
−¿Y quién nos salvará ahora, Carmina, quién?»
Como no podría ser de otra manera, las historias de Juana y Carmina terminan confluyendo. No destripo nada. Cualquier lector sabe que las tramas aparentemente independientes que se ven hoy en día y que tanto me gustan siempre terminan por mezclarse y resulta siempre apasionante el ver cómo lo hacen.
Sara Mañero |
El rodar de un agua interminable es la sexta novela que leo de Sara Mañero. Como en todas, he de destacar su prosa muy cuidada y precisa a la par que preciosa; sus tramas sumamente interesantes, con mujeres adelantadas a su época que tratan de abrirse camino en un mundo que se les muestra hostil por el mero hecho de ser mujeres; y, sobre todo, una documentación que da fe del trabajo que la autora se toma en cada novela que emprende. En ésta, hay todo un alarde de conocimientos acerca de los convulsos acontecimientos que recorrieron España durante los años centrales del siglo XIX, desde la década de los treinta hasta la de los sesenta. La novela se cierra con un Apéndice cronológico donde se resaltan los hechos más importantes de cada año del siglo XIX de los contemplados en la novela. Hay además un Índice de nombres históricos tanto de la familia real como políticos, militares, artistas, presidentes de Gobierno etc; y una enumeración de las personas más relevantes del movimiento feminista. Lo dicho, una labor de documentación encomiable y que hace de cada novela de Sara Mañero una forma muy amena de disfrutar de la Historia.
Está a punto de salir una nueva novela de la autora, Aquellos días de marzo, que espero leer pronto.
Las novelas que he leído de Sara Mañero, en orden de lectura y con enlace a la reseña son:
Título del libro: El rodar de un agua interminable
Autora: Sara Mañero
Nacionalidad: España
Nacionalidad: España
Editorial: MaLuma
Año de publicación: 2022
Año de publicación original: 2022
Nº de páginas: 496
Dos periodos históricos turbulentos y muy interesantes, perfectos como ambientación de la novela. Me gusta mucho lo que cuentas sobre ella, esas dos historias de mujeres adelantadas a su tiempo envueltas en una trama que tiene pinta de enganchar enseguida. También me gusta mucho el título. Ya tenía apuntada a esta autora pero aún no me he puesto con ella, se me acumulan las cosas y no llego a todo, pero sí que me apetece leerla. Un beso, Rosa, estupenda la reseña.
ResponderEliminarHa leído todas las novelas de Sara Mañero y te puedo asegurar que todas, salvo Mientras sorprendan los días que está ambientada en momentos actuales, tienen una ambientación en distintos momentos históricos en los que la autora se documenta de maravilla. También mimetiza su forma de escribir con la de la época que refleja. Son novelas para degustar lentamente, con párrafos largos, pero muy sencillos de leer (imagino lo que cuesta ese trabajo de depuración), con historias muy entretenidas, interesantes y apasionantes, imbricadas en la Historia que tan bien nos cuenta la autora. No me pierdo ni una de sus novelas.
EliminarUn beso.
Hola, muy complacido por encontrarte en un lugar del ciberespacio. Te saludo desde Colombia. Cuenta con que estaré atento a tus historias, que pueden ser y no ser las mías. Un abrazo literario
ResponderEliminarImagino que eres el anónimo de arriba. Bienvenido a mi blog. Espero que desde Colombia disfrutes y encuentres historias a tu gusto.
EliminarUn abrazo.
Hola Rosa, de Sara solo he leído Atrapando la luz, novela que me gustó mucho, esta me la apunté con la primera reseña que leí y aun la tengo pendiente. Me llama especialmente la época en la que desarrolla, que me parece muy interesante. Además Sara escribe muy bien y sabe como unir personajes atrayentes y una cuidada ambientación. Besos.
ResponderEliminarAtrapando la luz y El rodar de un agua interminable comparten época en los principios del siglo XX y la guerra civil. En El rodar... se incide más en la política y la Historia, sobre todo del siglo XIX, y lo hace con la tarea ingente de su documentación, esa documentación que siempre llama la atención en sus novelas. No la dejes pasar.
EliminarUn beso.
El siglo XIX fue nefasto para España, pero resulta muy rico históricamente y literariamente hablando: véanse los Episodios Nacionales (en ellos estoy y me están gustando mucho).
ResponderEliminarAbrazos.
Diría que en ese siglo fue cuando se empezaron a gestar las dos Españas si no fuera porque ya las veo perfectamente formadas desde los inicios. He leído muchos Episodios Nacionales, pero no de manera seguida, sino dejando semanas o meses entre uno y otro. Cuentan muy bien la realidad de ese siglo.
EliminarUn beso.
Se ve que Sara Mañero da un buen recorrido en esta novela por un período histórico de España bien interesante. Ya tuve la oportunidad con Atrapando la luz de disfrutar de la elegante y sensitiva prosa de esta autora, así como de admirar el ingente trabajo de documentación que realiza para escribir sus novelas, por lo que no me sorprende nada de lo que comentas acerca de El rodar de un agua interminable.
ResponderEliminarBesos
Pues en El rodar de un agua interminable, he visto de nuevo una documentación que me ha dejado perpleja. Toda la política de una siglo tan convulso como el XIX, nos la muestra con toda su crudeza y muy bien analizada mediante conversaciones de gente de la calle. También deja muy patente el paralelismo entre la época convulsa del XIX y la época previa a la Guerra Civil así como la propia Guerra y la posguerra. Pero todo ello de forma muy amena imbricado en las historias de los personajes. Y, como siempre la prosa de Sara, tan hermosa y sencilla. Y tan trabajada, que solo trabajando mucho se consigue una prosa sencilla.
EliminarUn beso.
¡Hola Rosa!
ResponderEliminarpor lo que veo, Sara Mañero escribe (y muy bien) novela histórica, para mí no va a ser, al menos de momento, ya me conoces, pero voy a investigar a ver lo que tenemos de ella en la biblio para poder recomendar sus novelas a los usuarios que me preguntan y me piden recomendaciones de histórica, que son muchos. Siempre me viene bien conocer autores buenos, de esos que se documentan (porque la novela histórica necesita para ser buena una esmerada documentación) y si además escriben que da gloria...
Un beso
Las novelas de Sara Mañero suelen mezclar los episodios históricos con otros más actuales. De todas formas no todo el mundo considera histórico lo acontecido después de la guerra civil puesto que muchos lo hemos vivido.
EliminarTe advierto de que yo tampoco soy una fan de la novela histórica, pero con todas las de Sara Mañero he disfrutado mucho.
Un beso.
Todavía no me he estrenado con esta autora y mira que lleva tiempo entre mis pendientes. Tomo muy buena nota de esta novela, que me llama todo, ambientación, personajes, trama... Y a ver si me animo de una vez.
ResponderEliminarBesotes!!!
Seguro que después de leer ésta te animas con alguna más. Todas las novelas de Sara mañero merecen la pena y hacen pasar muy buenos momentos. Además están muy bien escritas porque ella es muy meticulosa con su forma de escribir y siempre adopta la de la ápoca que trata. Y le sale genial.
EliminarUn beso.
Leí Atrapando la luz y me encantó su manera de escribir. Esta que reseñas también me parece muy interesante. El siglo XIX es crucial en la historia española y europea. En nuestro caso es cuando surgen los nacionalismos y las fuerzas centrífugas y centrípetas que pretenden vertebrar y/o desvertebrar la idea de España. Ahí estamos aún. Una pena porque no se avanza en una u otra dirección con claridad y pertinente declaración de ello.
ResponderEliminarTomo nota de esta novela. Tu reseña me anima a ello.
Un beso
No termino yo de ver el siglo XIX como el principio de nada en España. Sí es cierto que surgen los nacionalismos, pero también en el resto de Europa. Lo que me gustaría saber es cuando surge en España esa división en las dos Españas que ya estaba muy clara en el XIX y creo que en el XVIII y que siempre que leo sobre el tema,veo que se trata en profundidad, pero nunca se llega al origen. Sea como sea, creo que esta novela te gustará y mucho.
EliminarUn beso.
Que bien que escribes pones alma a cada una de tus letras
ResponderEliminarabrazos
Alma, corazón y vida.
EliminarA ver cuando tengo tiempo para disfrutar de la manera de escribir de Sara. Besos
ResponderEliminarSí, su estilo y su forma narrativa son inconfundibles. Para degustar lenta y tranquilamente.
EliminarUn beso.
¡Hola, Rosa!
ResponderEliminarNo conocía a la autora y aunque no soy muy fan de las novelas históricas, sí me ha llamado bastante la atención lo que comentas acerca de la prosa de Sara Mañero, cuidada, precisa y preciosa.
Tomo nota, a lo mejor me animo con ella, nunca se sabe.
Gracias por la reseña y por la sugerencia ;)
Un abrazo.
Es una autora que va teniendo cada vez más proyección, pero tampoco es muy famosa. Mucho menos, en todo caso de lo que merecería. Yo tampoco es que adore la novela histórica, pero las de Sara Mañero me atrapan y me interesan mucho. Y su prosa es, en efecto, muy hermosa y cuidada.
EliminarUn beso.
Hola, Rosa. De nuevo me tientas con tu reseña. Lo que más me atrae es conocer y saborear la escritura de esta autora que veo que es una excelente profesional de las letras. Mil gracias y buen día.
ResponderEliminarEs una gran autora con menos proyección, desde mi punto de vista, de la que merece. Una prosa muy cuidada, una ambientación fantástica, unos hechos históricos muy documentados y tramas muy interesantes. Poco más se puede pedir.
EliminarUn beso.
No he leído ninguna novela de Sara Mañero, sé que la tengo muy pendiente porque la sigo en redes sociales y es un encanto de autora. Al leer tu reseña, creo que me encantaría empezar por este título, "El rodar de un agua interminable". Besos.
ResponderEliminarPuede ser un buen título para empezar. Esa parte del siglo XIX está fantásticamente ambientada, documentada y la trama es muy interesante. La parte del siglo XX es también muy buena, lo que pasa es que llama menos la atención porque la tenemos más reciente y algunas hasta la hemos vivido. Te recomiendo mucho a Sara Mañero, con éste o con cualquiera de sus libros.
EliminarUn beso.
Gracias, Rosa. Hace días que quiero contestarte, pero las últimas semanas han sido de mucho lío, con la presentación de la nueva novela. Como siempre, agradecerte tu tiempo, el cariño con que me lees y esa reseña que, quizá, me permita llegar a otros lectores. Esta ha sido una novela que disfruté mucho escribiendo. Lo cierto es que me salvó del confinamiento, y ese mar que tanto añora Juana es el mismo rumor que yo añoraba. Con esta novela descubrí que acabo por convertir en voces cuanto me falta, ya sea la lluvia o el rodar del mar. Por lo demás, es tan triste esa parte de nuestra historia, tan reiterada, que era preciso recordarlo. Gracias de nuevo y espero que hasta pronto. Un abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias por pasarte por aquí, Sara. Imagino lo que tiene que ser la presentación de un libro y no sabes cuánto me alegro de todo lo que estás publicando.
EliminarEsta novela me ha gustado mucho como ya sabes. Me han gustado las dos tramas y su forma de enhebrarse y, sobre todo, me ha gustado la ambientación histórica. Y no sólo en lo que se refiere a los hechos políticos, sino al día a día de los personajes en cada época, el ritmo de la vida en la ciudad y en la aldea gallega.
Muchos escritores salvasteis la pandemia escribiendo muy buenas novelas. Hasta de las peores situaciones se pueden sacar cosas buenas.
Espero poder leer en breve esta última que también me apetece mucho.
Un beso.